Me la saqué de la boca, se la pegué contra el vientre y le comí las bolas, una a una, delicadamente, pasándole la lengua primero y metiéndomelas de a una después. Las tenía duras, rebosantes de leche aunque hacía apenas unos minutos había descargado una buena cantidad.
Sus pechos se pusieron como globos a causa de su producción lechera y no era extraño que en más de una ocasión, por la noche, me vieran mamando sus tetas porque, como ella decía "había tenido una subida de leche y le dolían mucho".
El pasillo de la universidad esta lleno de nuevos estudiantes! que jóvenes me parecen! ya hace más de tres años que termine la carrera y hoy fui a saludar a Marisa, la chica (52) que trabaja en la biblioteca, ella me ayudo mucho en conseguirme ese libro de derecho constitucional, al encontrarme en su oficina, estaba ella, morocha delgada, su busto bien formado y el traje entallado, decían a voces de sus ejercicios fue Marisa quien me la presentó, su nombre Soledad, pensé enseguida que no le quedaba bien, pero al escucharla
Cuando su amiga nos descubre tratamos de explicar lo que sucedió mientras nos arreglábamos la ropa, al no caber los tres en el reservado Jessica (la rubia) se va dejándome solo con Marcela, cuando estamos solos me dice que me desea y que podría calmar la calentura que le hicimos agarrar con nuestro espectáculo de susurros y por lo que vio al descubrirnos, al no responderle se acerca a mi y me besa en los labios mientras que con una mano
Esta historia fue de lo mas intensa que he vivido en toda mi existencia. Si alguna vez tienes la oportunidad, si te gusta tu primo!, solo hazlo no tienes nada que perder... solo la virginidad!.
Cuando llegue a la playa me puse a tomar el sol tranquilamente, después de estar un buen rato , no recuerdo exactamente cuanto tiempo, decidí irme a una de la playa a una pequeña calita que estaba cerca mas tranquila, a llegar allí debían ser sobre las seis o las siete, ya casi no había nadie, así que extendí mi toalla en una pequeña zona que había arena y me tumbe.
Yo seguí bombeando hasta que no aguanté y sentí que me venía, y estuve a punto de sacarla, pero me dijo en un balbuceo rápido, tomo pastillas!!, con lo cual se la volví a meter hasta el fondo y la inundé con mi leche en tal cantidad que rebalsaba por sus labios vaginales y corría por sus nalgas mezclada con sus jugos cada vez más abundantes, y al mismo tiempo bañaban mis muslos y encharcaba las sábanas.
En aquellos años en que todavía existía en algunos colegios incluyendo el mío la imposición de natación obligatoria al desnudo para los muchachos varones que cursaban la secundaria.
En las horas de la tarde los insectos, principalmente los mosquitos, hacen la vida imposible en esta ciudad húmeda entre los ríos, que la cobijaron en su segunda fundación, la plaza principal es una zona de encuentros de los personajes del poder, que caminan por la casa de gobierno, tribunales, la catedral o el colegio de los jesuitas.
Desde muy pequeña tengo una amiga, se llama Elisa, y hasta ahora hemos compartido todas nuestras experiencias, en el cole, el instituto y la universidad, en la pandilla y hasta en nuestros novietes.
En aquél entonces fui a tomar clases de aerobics a un gym que estaba cerca de mi casa; se me ocurrió esa idea después de que mi cuerpo comenzaba a perder su forma, es decir, no era una chava con un supercuerpazo, al menos no como el que tengo ahora, pues antes mis medidas eran 85 – 70 – 112, y actualmente tengo 90 – 60 – 95, así que se podrán imaginar la lujuria y el deseo que provoca mi cuerpo hoy día.
Nos recostamos un rato y tomamos un par de cervezas mas mientras nos acariciábamos todos, mi pene seguía erecto y montándome sobre Marianita en posición de misionero la penetre suavemente, era una sensación extraordinaria, la cuquita de esa niña era estrechita, muy caliente y suave, ella solo gemía y abría bien las piernas para facilitar mi penetración
Su cabello era negro azabache, le llegaba a la altura de los hombros, y enmarcaba una cara de belleza latina de ojos también negros y grandes, que le daban a su mirada un aire de ingenuidad que contrastaba con la malicia que su sonrisa pícara transmitía desde esa boca grande y sensual de labios carnosos tan de moda en los últimos años.
Fue entonces cuando le propuse que nos casáramos. Un día ella viajó a Murcia, nos casamos en el Juzgado, aunque la noche de bodas la celebró ella con un chico muy guapo, con un gigoló que yo le busqué y pagué, y que ella celebró como debía, gozando como una loca, follando toda la noche con él.
Fue esa mi primera relación con Esteban, a el y a mi nos había encantado, fuimos encontrando los momentos de repetirla , mientras Carlos creía que en cada vez, me estaba haciendo más su pareja, yo era la amante de ambos. Siempre desatada totalmente con mi suegro, el cual en el desenfreno me enloquecía.
Estaba a pocos metros del cielo, en mis manos un vehículo hermoso, convertible, tapicería de cuero, buena música y un motor que daría envidia a cualquier corredor de carros y mas aún, a mi lado, dos hermosas y celestiales piernas que sostenían el cuerpo y cara mas divinos que yo había conocido, ni qué decir de su cola, parte la que sostengo, es la primera que nos fijamos los hombres en una mujer, eran firmes y levantados
Mis dedos entraban fácilmente en su húmedo coño rojo, mi otra mano iba de sus tetas que apretaba con fuerza a su boca donde su lengua lamía mis dedos sin cesar y volvían a sus pechos para agarra sus pezonazos, estirándolos y pellizcándolos hasta que gritaba de dolor y placer, metí uno de mis dedos en el orificio diminuto de su ano.
Las sales que acostumbraba a usar, daban al agua una una textura de por si suave, y el roce de nuestros cuerpos impregnados era una sensación imposible de imaginar, sentía cada centímetro de piel suya y mía, y nos besábamos los pechos sin descanso, con la excitación en puntos no imaginables.
Comencé a revisar a Jhoanna, la cual actuaba inocentemente, le dije que se diera vueltas y se subiera la polera, ella lo hizo sin preguntar nada me di cuenta que estaba con sostenes, luego le dije que se colocara boca arriba y lo hizo y le dije que se subiera la polera y como antes lo hizo sin decir nada ya que se la subió hasta arriba dejando ver sus grandes tetas, yo no lo podía creer ya que le estaba viendo las tetas a mi prima chica que la mirarlas me daba cuenta que no tenía nada de chica.
Hacía 4 meses que no tenia sexo, salvo alguna que otra calentura que arreglaba masturbándome. Mi vida estaba en una rutina ya cansadora, del trabajo a casa, mi estado de animo tampoco era muy bueno, y por mis 20 años algunas de mis amigas no lo veían normal. Soy bonita de cara, linda cola, no muchas tetas, 1,65 de altura, me considero atractiva, pero siempre fui muy conservadora y vergonzosa.
Sin decir ni una palabra abrazo por detrás a su madre y agarro sus pechos Por encima su vestido. Alargó su mano hacia el frente del vestido de su madre y resbaló su mano hacía de su sostén, sintiendo el calor del pecho desnudo de ella.
Despacio, tiró al elástico. Estaba listo para sacar su mano si su madre mostraba la mínima resistencia, pero continuaba retorciéndose contra él sin darse cuenta de nada. Él empujó su verga en los calzones de su madre. El elástico resistía firme contra su pene, pero no era una sensación desagradable. La punta de su verga halló la entrada a la concha de su madre. Estaba húmeda, y emanaba un caluroso y maravilloso olor.
Una vez me masturbé detrás del mostrador, me saqué las bragas discretamente y con la mano izquierda empecé a masturbarme, ese día había mucha gente en la tienda esperando para comprar pero yo erre que erre con la manita, al rato la saqué de mi vagina chorreante que desprendía un olor muy fuerte y de tan perceptible que era ese perfume de sexo tuve que ir a lavarme al mano a la trastienda
El se movía como un loco y gemía y gritaba del placer que estaba disfrutando, yo le acompañaba en sus movimientos muy pegado a sus nalgas para que no se le saliera ya que sus movimientos eran muy violentos y mi verga aunque gruesa y cabezona tendía a escurrirse fuera y era lo que ninguno de los dos deseábamos en ese riquísimo instante de goce inenarrable...
Por fin llegó el viernes, y a las 6 de la mañana ahí estaba yo esperando por todos en el local combinado. Pronto llegó todo el mundo, y pude despejar mis dudas sobre las dos otras chicas, una estaba muy bien, y la otra tampoco estaba mal. La amiga de Ana era sin duda la mejor de las 4, se llamaba Natalia, y la amiga de Luisa se llamaba, Susana.
Y mientras tus músculos estirados aspiran el caliente licor, mis hilos de esperma inundarán tu trasero, tu espalda o boca, de tu grito extasiado brotará tu néctar vaginal. Ambos derrengados por la fuerza de la conmoción, rodaremos sobre nuestro lecho extenuados con la mirada perdida de felicidad. Nuestro vínculo sicalíptico se cumplirá.
Al acabar el ruido del agua, oí su voz reclamándome... Rosa, te importaría ayudarme a secarme la cabeza? Entré al baño, y no pude por menos de admirar una vez más el espléndido cuerpo de Paula, torneado en las más suaves formas femeninas, con toda la juventud y madurez a la vez.
Como siempre hago ejercicio tengo un cuerpo bastante firme y de buenas proporciones, muy blanca, de pelo y ojos color cafe claro, mi rostro es bastante atractivo y aunque soy muy bajita, apenas 1.51m, participe de muy chavita en concursos regionales de belleza y conseguir destacar en algunos.