Eli decide junto a su madre enderezar su vida y dejar atrás los excesos y las fiestas, cuando su vida va hacia arriba recién graduada y con un matrimonio en puerta esa vida saludable la lleva a reencontrase con el hombre que inició todo su padre.
Después de tener relaciones con su padre ella lo busca para aclarar las cosas y al no encontrarlo decide llevar una vida llena de excesos que la llevan a una turbulenta vida sexual intensa implicando está ves a su madre.
Un estilo de vida lleno de vida excesos llevará a la joven protagonista a un sorpresivo reencuentro con su padre y al inicio de una relación prohibida llena de complicidad y deseo.
Siguen las historias en Femdonia, el paraíso de la Dominación Femenina, en este caso se juntan dos Amas con sus sumisos, y claro, pasa lo que tiene que pasar.
Julia, una jovencita angelical, está a punto de descubrir por las malas que sus actos tienen consecuencias. A sus recién 18 años cumplidos descubrirá que la vida no es un cuento de hadas si no un cuento perverso que esconde placeres insospechados para su inocente mente
Jorge, trabajando en la Mansión El Edén, pudo comprobar, casi como un estudio sociológico y estadístico, que lo que dice en sus artículos la consejera matrimonial Margaret Morgan Clark, es extraordinariamente cierto. De hecho, en la mansión, son muy demandados los chicos que prestan estos servicios.
… ‘La tenemos a punto, es toda nuestra’ _Dijo Tocho arrodillado mientras metía y sacaba sus enormes dedos por el culito de mi novia, mientras con su perversa sonrisa seguía mirándome...
Soy de Perú Lima y vivo por santa Anita xd se que no debo dar mucha información pero en fin ando súper caliente y no sé cómo calmarme lo único que me tranquiliza es leer relatos erótico siempre yendo al trabajo nunca me pongo sostén y después de tanto pensar me puse un polo casi transparente.
El camarero se puso delante de Melisa y con gran suavidad le acarició los pezones. Melisa abrió su boca y gimió. Le acarició su polla sobre los pantalones, dándole un pequeño mordisquito. el camero apretó uno de sus pezones y dándose la vuelta, partió hacia la cocina.
Mi sirvienta me llevó para ser usada. No lo dudé un segundo, me arrodillé entre sus piernas y me rendí ante esa polla, adorándola con mi lengua y con mi boca. Empecé lamiendo esos gordos huevos que se aventuraban bien cargados.
Ángel cerró la puerta del hostal poniendo un cartel donde se leía un número de teléfono, por si querían acceder al hostal. Se encaminó hacia el bar, preparó el whisky y una botellita de agua y procedió a subir a la habitación trescientos trece.
Clara, una mujer cercana a los 50, busca revitalizar su vida y matrimonio en el gimnasio. Su joven entrenador, si sobrino Alejandro, despierta en ella un deseo prohibido que la lleva a explorar fantasías lascivas y sumisas, transformando su rutina en una pecaminosa aventura que desafía todo límite.