Mi coñito esa noche me dió las gracias por todo lo sucedido.
Nuestras dos inefables maduritas y su nueva pero no menos dominante amiga más joven continúan su perverso juego con su presa casi adolescente hasta hacerle llegar a un final que no es más que el principio de renovados y deliciosos tormentos.
Ahora le toca a otro de sus sobrinos para el que tiene preparada una pequeña sorpresa.
Soy una chica de muy buen ver, delgada pero mis piernas son un poco gorditas mis nalgas las tengo duritas y paraditas, mis pechos no son muy grandes pero tampoco son muy pequeños, soy blanca de ojos un poco chicos color miel, mi boca es un poco grande y de labios gruesos, mido 1.68 m. y peso 61 kilos
Llega un estudiante joven, guapo, sexy y me vuelve loco me hace presa de sus encantos, es menor que yo pero muy machote.
Salí muy molesta de una fiesta, por el comportamiento de mi Ya era bastante tarde cuando abandoné la fiesta donde me encontraba en compañía de mi esposo, después de haber discutido por su falta de respeto hacia mí, ya que no dejó de coquetear con cuanta mujer se cruzó frente a él., y no sabía las ricas cogidas que me esperaban...
Salí de ese cuarto oscuro desnudo y con la verga todavía palpitando, y me pare en la regadera del otro vapor refrescándome y limpiándome un poco, y por supuesto que dando un buen espectáculo a los que estaban sentados frente a mi y que con esa buena iluminación admiraban mi cuerpo desnudo y mi verga erecta.
Estos machos estaban mejor que nunca, había de todo, músculos, jóvenes, rasados, peludos, vergas hermosas, cabezonas y venosas, vergas chicas encogidas y dulces, mulatos, blancos, latinos e incluso un chico indio del norte de América.
Una oficina no es el sitio más erótico del mundo, pero conseguí convertirla en un lugar que rebosaba sensualidad.
Estoy tumbada en la cama, hoy es uno de eso días que no sabes que hacer, abro las ventanas y dejo que entre el aire, oigo la ducha es un chico que conocí la noche pasada en una discoteca.
Como yo no gusto de él ni mi hijastra gusta de mi, pensé que lo mejor sería retirarme a ver televisión en la sala del segundo piso hasta que mi mujer volviera y así lo hice dejando a la pareja acomodados en el sillón del primer piso. Ella me preguntó que yo que iba a hacer y le dije que a dormir, así que seguramente se sintieron a sus anchas.
E se fue con el resto. Como yo no les conocía empezamos a hablar y el chico me comentó que había estado saliendo hacía un tiempo con E y que por lo que se escuchó la otra noche había cambiado mucho pues ahora parecía toda una fiera en la cama.
En un lateral había una entrada que supuse eran los servicios, me colé por ella y al entrar vi un espectáculo digno de la mejor película porno, un tío a cuatro patas era follado por un gorila enorme, mientras le chupaba la polla a otros dos gorilas que se estaban morreando entre ellos. Me puse ante uno de los urinarios y sacando la polla, me quité el preservativo que tiré a una papelera que había al efecto en casi todos los urinarios.
Comenzó a penetrarme lentamente, aunque mis labios estuvieran muy húmedos y su dedo hubiera abierto camino, hacía tiempo que no practicaba el sexo y costó un poco al principio, incluso me llegó a doler un poco, pero este es un dolor agradable, porque es simple roce cuando el agujero está tan cerrado con el clítoris, crea una sensación de placer que muy satisfactoria.
El chico abre los ojos como platos. Entra una despampanante mujer vestida con una espectacular cazadora negra, que tapa una camiseta roja; y debajo unos ceñidos pantalones que comprimen unas poderosas piernas y unas nalgas de ensueño.
Salimos de la cuidad el viernes por la mañana, fuimos en el coche de Antonio, el novio de mi amiga, ella se llama Rocío, llegamos a la finca sobre las 12, soltamos los bultos, repartimos las habitaciones y nos fuimos al pueblo que estaba al lado a comprar algo para comer y tal.
Yo ni tardo ni perezoso le comenté que sabía dar unos muy Buenos masajes y que tenía practica en ello, que si le interesaba le ayudaría en ese aspecto, a él le encanto la idea, así que le indiqué que como yo era muy profesional tenía el equipo indicado en casa, así que me despedí rápidamente para volver en unos minutos con todo mi equipo.
A las 11:30 llegaron, el abrió la puerta del auto, y se dirigió hacia la de ella, abrió la puerta como todo un caballero, y ella salió deslumbrante, el cerró la puerta y la abrazó por la cintura, ella cruzo sus brazos sobre su cuello y se besaron, yo mientras miraba por la ventana sentía ganas de salir para matarlo, estaba dispuesto a matarlo. Cuando se despidieron, y ella caminaba hacia la puerta, baje corriendo hacia la sala para esperarla.
Nos besamos como si nos conociéramos de toda la vida y nos sentamos a comer. La velada fue muy divertida, pues parecía que fuésemos dos amigos que llevaban mucho tiempo juntos y salían a comer.
El muchacho no debía de dar crédito a lo que estaba sucediendo y comenzó a responder con la misma pasión. Eva le desabrochaba la camisa y cuando la tuvo desabrochada arañó ficticiamente su pecho y le mordió en el cuello, luego, lo empujó tirándolo sobre el sofá.