Éxitos de bar

Éxitos de bar

Desde que estábamos en ultimo año uno de los hobbies que más a menudo realizaba con mis amigas del colegio era ir a los bares a conseguir muchachos, así tuviera novios respectivamente, solo buscábamos una aventura y nunca pasábamos de un buen filtreo.

Yo siempre tenia éxito, pues aunque no me considere la más hermosa del mundo generalmente yo lograba conquistar al más guapo de la noche.

Hace varios años conocí en un bar al hombre más guapo del mundo, con un cuerpo perfecto, abdominales marcados, cola perfecta, el hombre que cualquier mujer desearía tener como suyo, después de esto seguimos hablando y saliendo como amigos durante meses (aun somos amigos), siempre nos íbamos a su apartamento, pero un día fue diferente de los demás.

Una tarde bien fría nos quedamos jugando con su computador, hobbie que teníamos en común, el estaba con un jean ceñido a esas piernas perfectas que tenia, una camisa negra bien ajustada y la mejor loción del mundo, por mi parte, con una de mis típicas falditas negras súper cortitas con unas mallas negras geniales y una camisita blanca bien ajustada, de un momento a otro el me abrazo como de costumbre, pero esta vez comenzó a respirar cerca de mi cuello, comenzó a besarme y sin soportar más accedí sin pensarlo a sus besos, comencé a besarlo todo y tocar ese cuerpo que siempre había a deseado, comenzamos a tocarnos, sentía que la gloria me caía encima…

El comenzó a tocar mis senos, comenzaron a colocarse muy duros, cada sentimiento de su tacto me hacia estremecer, sentía como sus manos jugaban con mi cuerpo lenta y tibiamente, y el sin pensarlo decidió quitarme la camiseta, jugando con las tiritas de mi sostén para luego quitarlo lentamente con sus dientes, comenzó a besarme de arriba abajo, con su lengua tibia besando todo mi cuerpo, bajo por mi abdomen, siguió bajando hasta mi ombligo y con una sonrisa maliciosa me insinúo que iba a romper una barrera, le quite la camisa e inmediatamente comencé a acariciarlo con mis uñas de gatica.

Decidió dar un paso más y desabrocho el lazo que amarraba mi faldita y comenzó a bajarlo lentamente quitándose luego su jean, luego se acerco y quito mis tangas, con su boca y comenzó a besar lentamente mi concha, con su lengua comenzó a explorar todo cuanto pudo, cada vez me sentía más caliente y mojada, mis gemidos comenzaban a sentirse y el comenzó a darse cuenta de la cercanía de un orgasmo.

Decidió detenerse un segundo y se quito sus bóxer, vi mi sueño hecho realidad, se acerco y comenzó a penetrarme lentamente con ese inmenso miembro que siempre había deseado, lo hacia lento, rápido, sentía que me excitaba totalmente, cambiaba de ritmo constantemente para nuestra mutua satisfacción. me recorría toda su energía, el tenia una cara de placer que nunca en la vida había visto.

Comenzó a jadear y apretar más mis senos mientras me penetraba cada vez más rápido y fuerte, me hizo llegar al mejor orgasmo de mi vida, cuando el llego fue una explosión… estoy segura que nunca en su vida se hacia sentido así, igual el pudo contármelo después.

Esa tarde se convirtió en noche la cual pasamos juntos completamente, ahora seguimos siendo amigos, pero con algunos derechos y grandiosos encuentros que seguiré narrándoles más adelante.