Cuando estuvo en pelotas, le invité a que me desnudara a mí.... me dejé desnudar y sobar por todo el cuerpo... su picha excitada estaba totalmente pegada a su vientre...
Con mucho cuidado fui bajando. Sentí que la punta del glande comenzó a abrir poco a poco mi ojal. Seguí con la presión, repentinamente el glande completo fue absorbido por mi culo y casi me da un infarto. A pesar de haberme comido buenos leños por el culo, este sobrepasaba cualquier idea que tuviera de ser penetrada por un tamaña verga.
Me comenta que es en este lugar, bien aislado acústicamente en donde se dan los mayores castigos, por supuesto sin mordaza para que la sumisa o sumiso pueda gritar todo lo que desee sin que nadie por ello haga el más mínimo caso, por supuesto también existen mordazas por si el castigador prefiere no oír los lamentos del torturado.
Pasó su lengua por mis dedos bien cuidados, lamió la planta de tal forma, que me hizo excitarme nuevamente ante la experta caricia que me daba. Tomo mis dedos y se los fue metiendo en la boca uno por uno, chupando y lamiendo hasta que no pude soportar
Se me quedo viendo y sin prisa comenzó a bajarse la falda con unos movimientos de cadera ayudada por sus manos, creí observarle un leve brillo en su labio superior al mismo tiempo que nuevamente mordía ligeramente su labio inferior y sin quitarme la vista de encima la dejo caer a sus pies...
Mi madre se había comenzado a desesperar por la tardanza del bus y yo ya estaba cansada de esperar, por lo que decidimos, que sin importar si nos tocaba de pie o sentadas, igual nos iríamos, ya que no desperdiciaríamos el tiempo invertido en la fila, al retirarnos a casa sin visitar a los abuelos, al fin al cabo de unos minutos arribo el ansiado bus, de inmediato la gente se dio a la tarea de abordarlo
El me respondió que hace unos meses conoció al viejo, y este le había contado que no era capaz de satisfacer a su mujer, pero cuando él le había propuesto a ella que estuviera con otros hombres se había negado.
Sus dedos a penas perceptibles deambulaban por mi pelo, al igual que los míos por su brazo; la película era el pretexto para quedarme allí a su lado, aunque mis pensamientos fantaseaban en cómo sería gozar a ese hombre.
Alicia es una chica de bandera o lo que equivale a un buen partido para cualquier hombre porque a parte del dinero la verdad es que está bastante buena, es alta y estilizado, pasando por unas cuervas de miedo y su pecho es grande y redondo, siempre que salimos por ahí ella llama la atención del todo el mundo.
Empezó por acariciar mi glande y después le propino tres grandes lametazos que me hicieron casi correr, en ese momento Nina cogió la batuta de la situación y le dijo seguro que de esta forma le gusta más. Se dio la vuelta, puso su culo en pompa, y metió mi nabo entre sus dos glúteos masturbándome así de esta manera.