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Dennis: confesiones verdaderas I

Luego me acomodaba de espaldas a él, encima de su pene, quedando en cuclillas para lograr una delicada penetración, esto lo hacía bien despacio porque en esta posición es un poco dolorosa la penetración anal, una vez que el pene llegaba hasta el fondo me recostaba de espalda sobre mi amante dejando el terreno libre para mi otro amante, ahí comenzábamos con la doble penetración, que linda sensación tener los dos miembros dentro mío aparte bien erectos y duros después de bancarse sin acabar semejante mamada.

Cumpliendo con la fantasía de mi novia

Eran las siete de la mañana y mi novia se dirigía al parking a coger su coche y de pronto mi amigo con la cara totalmente tapada la cogió por detrás y colocándome las manos de ella por detrás decidí a esposárselas con unas esposas que teníamos, tapándole los ojos y la boca.

Una treintañera separada y muy caliente

Acto seguido el dueño de la casa se quitó el pantalón y con la polla tiesa se tumbó en el suelo, el tio que se cepillaba la tía, la obligó a que se montara sobre el aparato, cosa que logró entre palabras y balbuceos de borrachera, al lograrlo el tío de la casa empezó a moverse como loco dentro de la tía, pero el otro tio no contento aún, apunto su polla hacia el culo de la tía y la introdujo su polla dentro, por lo que la tía respondió con un grito.

Se olvidó de reír

En un momento dado, Carmen le dio un soberbio manotazo, tú no me puedes tocar hoy te enteras, no soy tuya, soy de Alex y hasta cuando el no me disfrute como tu disfrutaste de su mujer mientras estuvo viva; tu disfrutaras de mi cuando el te deje, lo que pasa es que Alex es demasiado bueno y seguro que mojaras pero será si yo te dejo que es muy posible que no lo haga, así que tu

Vacaciones sexuales

El caso era que un dia hablando con el dueño de la casa le había comentado que su sobrino no había estado nunca con una mujer y varios hombres y que le había comentado que sería una de las cosas que tenía que hacer antes de marcharse, ya que vivía fuera de España, en un lugar donde las mujeres son más frías, y que quería buscar a una mujer que estuviera dispuesta a hacerlo, en ese momento mi amigo se acordó de mí porque sabía que no había cosa que mas me gustase, y se lo propuso.

Iniciación zoofílica II

Su fantasía era normal, pero no por eso dejaba de ser emocionante, irse a una isla con dos amantes, desde luego, uno su marido y perderse allí durante seis meses, sin preocuparse de nada, ni del dinero, ni los críos, ni las broncas de su jefe, ni de la compra diaria, ni la casa, solo sol, sexo y más sexo.

Un paseo por el parque

Después nuevamente me beso en la boca y me dijo ¡¡¡quiero hacer algo que nunca he hecho!!!, enseguida le pregunte que era, entonces me dijo que deseaba probar mi verga por su culo, pero que no se atrevía porque la tenía muy grande, además me confeso que nunca nadie le había dado por el culo, solo le habían metido un par de dedos y mamado.

Fantasías

Mi amigo comenzó a chuparme las sandalias y a masturbarse mientras lo hacia porque ya se había puesto caliente otra vez al ver todo el semen por mis medias y en mis sandalias, yo le deje hacer mientras me recuperaba y jugaba con su polla y mis pies.

Una sorpresa para mi esposa

Lo empujé otro poquito, como unos 5 ó 7 centímetros y ella de repente se fruncía, como con miedo de no poder soportarlo, sin embargo, estaba en verdad tan encharcada, que las paredes de su vagina no representaban ningún obstáculo para detener el avasallante paso de nuestro callado nuevo "amigo".

Mentiras piadosas I

El mete y saca que ese pibe me hacía me ponía loco, jugaba con su pija en mi culo, lo hacía rápido a veces, despacio después, por momentos movía su cintura provocando que su pija se mueva como en círculos dentro de mi.

Deseaba que fuera una puta pero tuve que empujarla y engañarla para que lo hiciera

Mi pequeña, mi chica, mi María, estaba siendo follada en un sándwich. Tuve que disculparme un momento e irme al servicio a hacerme la paja más monumental que jamás me había hecho. Cuando volví poco quedaba ya por contar. Hasta cuatro veces repitieron el numero. Mientras, ella repetía lo puta que era, que era una zorra barata, que la reventaran a pollazos…

Mi querida y fiel esposa

Lo único que encontró su mano fue el tieso y goteante miembro de Rodrigo, aferrándose de él como si de ello dependiera su vida, se le notaba que se aproximaba al clímax, y en medio de la excitación busco llevarse ese pene a la boca, quedando los dos enlazados en un perfecto 69.