El domingo siguiente se casaba una vieja amiga de la infancia, y ese sábado por la noche celebraba su despedida de soltera en un local de la ciudad. A tal evento había invitado a sus cuatro mejores amigas que ya estaban todas casadas, entre las que evidentemente me encontraba yo.
Yo había llegado hacia buen rato a un sauna con amanecida que al en el sur de Cali y estaba en el patio de atrás en el jardín pegándole una mamada a un negro lindo cundo en esas llegan allí al jardín dos pelaos bien sardinos que después me dijeron que venían de Manizales
Llegamos hasta el lugar, con una breve pero inquisitiva mirada me di cuenta que éramos los únicos en aquella sección del cuarto piso de la biblioteca. Y teníamos dos horas antes que la cerraran.
Tengo una que me encanta y me masturbo mucho con ella, y es que voy con mi marido de noche dando un paseo nocturno, nos asalta un negro fornido, y nos pide la cartera y el bolso, mi marido se resiste ya que esta bastante fuerte, y golpea al negro, entonces salen 4 negros mas, que reducen a mi marido.
Entonces ella empezó a desnudarme a mi, ahora sus diestras manos abrieron los botones de mi camisa, sus maquillados labios besaban primero mi largo cuello, luego mis hombros y por fin bajando los tirantes de blanco sujetador mis anhelantes pechos.
Nunca supe como pero si se que sucedió, de una manera increíble, todo comenzó hace una semana, estaba en mi apartamento cuando desde la parte de afuera estaban realizando trabajos de arreglo de la fachada del conjunto y podía escuchar la canción de una voz varonil, que mientras trabajaba hacia cantaba un ballenato, en ese momento estaba en el apto.
El negro se bajo los calzoncillos con la única mano libre que le quedaba y lo que apareció me paralizó totalmente. La polla del negro era en estado flácido mas grande que la de Toni y de un grosor como mi muñeca. Al instante noté como los pezones se me ponían duros y como un calor me subía directamente desde mi entrepierna a mi cuello.
Estaba en penumbra... y Ulises me pidió que esperara afuera... él entró y al salir me dijo que pasara, que él estaría viéndome, que hiciera todo lo que se me pidiera... Yo estaba muy nerviosa y me daba miedo pero Ulises me dijo que después podríamos tener todo el sexo que quisiéramos... así que entré...
Esa tarde cuando la llevaba al centro sintió su mano sobre la pierna al invitarla a estar solos, comprendió que era su oportunidad, lo miro asintiendo, en un santiamén estuvieron en una casa desconocida para ella, su fragilidad manifiesta ante ese cuerpo, era compensada con una relajación natural
Mi mujer se bajo de la camilla y con la cara completamente desencajada, se dirigió al biombo donde había dejado su ropa, -deja la bombacha para mí y el corpiño para Jair dijo el medico, sin esas prendas se dirigió al baño, escuche correr agua, y supuse que se estaba lavando y que le dolía todo el cuerpo y su vagina y su culo que habían quedado completamente abiertos y dilatados.
El pelado ya estaba con su enorme pija erguida, roja y brillante, listo para seguir. Yo estaba destruida, pero tan satisfecha como no recordaba haber estado y apenas me podía mover. Igual me hizo poner en cuatro patas sobre la esterilla y me pasó saliva por el orificio de mi culito que, si bien no era virgen, no tenía demasiado uso.
Los sábados y domingos tomo mucho sol ya que mi casa tiene parque y piscina, así que tengo mi cuerpo tostado, con mi esposo tenemos una muy buena relacion sexual, les voy a contar como soy y después comienzo a relatar lo sucedido hace 1 mes aproximadamente.
Mi mujer Adela, y yo vivimos solo en un viejo y amplísimo apartamento de la costa, donde acostumbramos a vivir casi todo el año, entregados al trabajo de cada uno y después a los mil juegos y placeres de la Erótica Universalis.
Mary se disculpó por no estar arreglada cuando llegó y quería compensarlo, además haría todo lo posible por levantar al monstruo y verlo de pie. JR le dijo que ya lo estaba logrando, entonces ella se agacho para servirle otro vodka y le puso casi en la cara todo su culo desnudo tapado solo por un hilo dental. Mi monstruo ya estaba totalmente parado.
Sí, estaba seguro, o al menos eso creía porque cuando ella se levanto las falda plisada por encima de los muslos y me los mostró tan túrgidos y sensuales, con la tanguita transparente que deja ver los prominentes labios de su coño, no pude resistir, me abalance sobre ellos y quise quitarle la braga, pero ella no me dejó bajársela y entonces pegué mi cara sobre ellos, los lamí y lamí de arriba abajo
El negro puso a Elena de pie apoyada de manos contra el respaldo del sofá y procedió a sodomizarla. Elena gritaba: Párteme el culo negro cabrón, enséñale a mi marido como respondo, que soy una profesional, que yo no abandono mi trabajo a medio hacer. Lorena hazme lo que ya sabes.
Se imaginan!!!! Mi fantasía estaba por hacerse realidad y me hermanita me quería llevar!!!!, el se ofreció a darme raid, mas tarde, y yo le agradecí, mi hermana me dijo, tu sabes, no lo conoces, pero yo lo deseaba, así que decidí quedarme, pero le dije que solo unas dos horas mas, eran apenas las 2 de la mañana, así que nos quedamos solos, yo estaba supercaliente y deseosa
Alquile un chale en la costa durante quince días, busque a través de contactos de Juan a cinco tipos bien dotados y con aspecto de brutos, así como el mayordomo de Juan, un corpulento negro que tenia una verga como nunca había visto.
Fue genial inclusive se escucho un ruidito como el de una sopapa que me excito muchísimo. Pero ahora el negro se imponía y quería cogerme del todo, fue ahí que le pedí que sacara su pedazo y como un verdadero profesional así lo hizo; pero le pedí que ahora lo entre y saque varias veces pero no más que su cabezota y sin acabar.
Yo solo quería que me den más y les pedí que me culeen entre ambos. Se acostaron en la cama cada uno a un costado mío y me puse de rodillas en la cama, y se las chupaba alternadamente, dejándoles ver mi culo mientras lo hacía.
En la estación del metro abordamos un taxi y nos dirigimos a recoger el coche que estaba en el taller mecánico y en el camino le dije que estuviera atento para cuando lograra llevar a los mecánicos al cuarto de herramientas entrara y me diera por el culo, su cara se ruborizo y pose mi mano en su pantalón sintiendo la reacción en su pene...
Introduje un dedo allí para palpar la situación y vi como esa vagina es estrecha en su entrada y luego se agranda por dentro, recordé una vez que me había metido un dedo en el culito mio, entonces la lubrique un poco con saliva aunque no chupe nada porque estaba con algo de sangrecilla, y luego pude meter ese miembro dentro pero solo pude hasta la parte donde se agranda porque fue imposible introducir semejante bulbo en la pequeña entrada.
Después de acariciar los pechos tiró de los pezones con fuerza lo cual hizo gritar a la mujer y retorcerse en el columpio.. El negro no hizo caso y continuó con sus toqueteos.
Llevaba seis meses sin mi novia, me dejó por otro, y los calentones ya no tenían bastante con mis masturbaciones diarias, necesitaba sexo, y sexo del bueno, por lo que cansado de recibir calabazas recurrí al periódico.
Legamos al taller de los Colombianos, que por cierto por eso me gustaba por que los mecánicos eran colombianos, y salude me llevaron al auto informándome que estaba sincronizado y con los aceites nuevos. Mire a los dos que me decían de el estado de mi auto y les dije: Bueno y yo también necesito que me midan el aceite..uhmmm, me miraron sonrientes y me dijeron: y ese que esta ahí no es su marido, yo les dije que no importaba que el participaría, se miraron sorprendidos y mirando a mi alrededor que nadie me viera les toque sus miembros y camine hacia el cuarto de herramientas.
Aunque nada parecía haber cambiado en nuestras relaciones sexuales, yo estaba algo confundido, por lo que mi fogosidad había decaído algo. No podía evitar pensar en María, supongo que porque tuvimos un sexo desatado y prohibido o porque ella era mi criada o porque María me dio cosas que Nuria no me permitía, como practicarlo sin preservativo o como el sexo oral que tanto asco le produce a Nuria.
Se la empezó a meter despacio y cuando el negro sitió que entró la cabeza le dio un empujón que le metió casi la mitad. Mónica gritó en señal de dolor y yo le dije al negro que no la lastimara. Después ella sola se empezó a mover poco a poco. Cuando le entró más o menos la mitad, llamó al otro, para que la penetrara por la vagina. En ese momento empezó a gritar como nunca.
El marido pone un anuncio en internet buscando voluntarios para cepillarse a su esposa, tendiéndola una trampa, de todos los que contestan elige a un negrazo jamaicano y le concierta una cita a ciegas a su mujer.