En un campamento en Granada pruebo por primera vez dos pollas grandes al mismo tiempo.
Aquel inolvidable verano cuando le quité el sujetador y aparecieron dos hermosas tetas blancas con pequeños pezones rosados.
Aquella verga si conseguía entrar en mi culo, me iba dejar reventado, era como si te meten el puño en el culo.
Siempre me había gustado imaginarme de gogo y ahora en la despedida de soltero tenía la oportunidad.
El verano que nunca olvidaré fue cuando cumplí los doce años, mi prima me enseño más de lo que pude imaginar.
Historia que vivió un lector de mis relatos, el cual me escribió pidiendo si podía escribir sus recuerdos de cuando fue desvirgado.
Porque su esposo no llegó el día que ella lo esperaba, se convirtio en bailarina y prostituta, después que fue invitada por una amiga a una supuesta despedida de solteras.
Uso el trofeo obtenido de la presidenta para hacerle la colita a mi mujer.
Era un sábado por la tarde, cuando aprovechas para hacer todas las cosas personales que durante semana no logras realizar por las demás actividades
Una prostituta recibe con excelente disposición la noticia de que su propio hijo se ha hecho cargo de su explotación comercial.
Conozco a Sylvia desde hace mucho y se que siempre me ha tenido envidia, yo siempre tuve mas éxito que ella con los hombres.
Conseguir un perro para tener relaciones es difícil, esta es mi primera experiencia zoofílica con un maravilloso perro.
Me puse un ligero negro de una sola pieza y el vestido, solo hacían falta unas zapatillas y ahí estaban, había pensado en todo.
La parte final de esta apasionante historia con la puta de Sylvia, la guarra y zorra de mi tía.
Los dos contamos cómo sucedió una seducción no planeada, uno estuvo atado con una corbata y el otro lo penetró.
Me gustaba la ropa interior femenina pero me termino gustando también la verga, este fue mi inicio gay por accidente.
Siempre desee follar con mi tía, una mujer madura y muy tetona, que debe tener por lo menos 180 de busto.
El sexo con Raquel, la hermana mayor de Silvia, era naturalmente muy distinto de las relaciones con la pequeña.
Un encuentro casual en la videoteca, con mi mochila y cincuenta dólares, un sexo rápido y un desenlace a mi favor.
La polla de D. Jose era enorme, muy gorda y gruesa, larga y llena de venas, oscura, pesada y eso que solo estaba morcillona