Ella lo sostuvo todo el tiempo con ambas manos y de vez en cuando me ayudaba a introducirlo en mi boca, me imaginaba que ahí mismo me follaría con el miembro del caballo, lo cual desde luego no sucedió.
Con el extremo de la lengua rocé casi imperceptiblemente el clítoris húmedo e hinchado. La abuela volvió a estremecerse. Insistí con la lengüeteadas, para arriba y para abajo, sobre el clítoris y sobre la entrada de la vagina.
Laura fue la primera en venirse dejando escapar gritos y maldiciones por doquier luego el negrito le dijo a Raúl me vengo y sentí como su culo se contraía provocándome una grata sensación yo empecé a vaciarme como loco dentro de su culo resoplando y sujetándolo de los hombros para lograr la máxima penetración justo cuando acabe de depositar mi ultimo lechazo Raúl se venia sin tocarse para lo más mínimo el pene.
Daniel por su parte buscaba mi boca con su verga y yo comencé a mamarla y a masturbarlo, mientras que ellos me decían que era una puta rica y que suerte la de tu marido que te culea cuando quiere.
Nos detuvimos en un semáforo y yo seguí absorta en mis pensamientos, de repente volví a ver a Sergio para consultarle algo sobre la forma en que debía redactar mi informe y lo sorprendí mirando detenidamente mis piernas.
La habitación se componía de dos camas separadas por un metro y medio mas o menos, yo estaba en la cama de la izquierda, la luz era tenue, Lali se acerco a mí y miro para comprobar si estaba dormida, cosa que yo fingí.
Yo desde niño descubrí que mi preferencia sexual apuntaba hacia las personas de mi mismo sexo, sin acusar ninguna característica exterior que pudiera clasificarme dentro del grupo de odiados homosexuales.
Al escuchar eso, me calenté un poco más, luego le di la vuelta y empecé a tomar sus caderas y ella empezó a moverse también y gemía mas fuerte cada vez mas, como una puta, empecé con mis manos a abrir un poco sus nalgas mientras ella pasaba uno de sus dedos por su culo.
Yo seguía haciendo mi trabajo y Yasuhiro me suplicaba que lo penetrara así que le di el gusto le tome sus piernas y las coloque en mis hombros para ver su cara, al penetrarlo era maravilloso ver su cara de gozo por mis embestidas así que mientras más lo veía más me calentaba yo y comenzaba a penetrarlo más fuerte
Nicole y yo seguíamos muy sorprendidas entonces mi hermano Luis nos dijo que el si sabia que ellos tenían sexo y que el también tenia sexo con ellas, continuamos platicando y nos contaron como fue que desvirgaron a mis primas