De repente, mamá dejó de retorcerse. Echó la cabeza hacia atrás y gimió. Juntó los tobillos, atrapando a mi hermana en su lugar. Tiró de su pezón derecho de forma impactante y empezó a vibrar. Su respiración se volvió aguda y entrecortada mientras gritaba de placer.
Metí el dedo índice en la abertura de la ropa interior de mamá. Su coño húmedo y excitado cedió deliciosamente, pero no era para eso que estaba allí. Tiré hacia abajo, le arranqué la prenda del cuerpo y la arrojé al otro lado de la habitación. Mamá ya me abría las piernas.
“¡Joder, mamá, me está llenando de lo lindo! ¡Se está corriendo en mi coñito apretado y me encanta! ¡Córrete dentro de mí, hermano mayor! ¡Lléname el coño de puta con tu lefa! ¡Joder, tu carga caliente me está haciendo correrme demaa ...
Me sumerjo en un laberinto de culpa y deseo al descubrir cómo Arturo mi hermano somete a nuestra madre a actos cada vez más degradantes, desde mamadas forzadas hasta el uso de un dildo, la línea entre lo correcto y el placer se difumina.
Comencé a bajarle la ropa, esa sería la primera vez que la vería desnuda, era una belleza total su piel caliente por la excitación y su olor me volvía loco.
Apenas le baje el panty un aroma a hembra choco con mi nariz fue un golpe de excitación que llevo mi dureza a otro nivel sentía que la verga.
“Hazlo, Kevin. Córrete dentro de mí. Quiero sentirlo. Córrete dentro del coño de tu hermanita”. Para subrayar esas palabras, Cora se empujó hacia abajo sobre mí, alojando mi polla lo más profundo posible en su coño. Mi mano quedó atrapada entre nosotras, jugando lo mejor que pudo con su clítoris.
El vuelo a Montreal fue tranquilo, solo aburrido a pesar de ser en clase ejecutiva. Leí los horarios del trabajo por hacer y, por lo que leí, no habría retrasos. La línea que el cliente había pedido venía directamente de la planta de producción, sin extras, y el equipo asignado para la instalación tenía suficiente experiencia como para que no previera ningún problema.
Mi hermana no solo se había sentado a observar mientras mi madre y yo hacíamos el sesenta y nueve como las adolescentes más cachondas del planeta, sino que además se había corrido. Mi hermana se había masturbado hasta el clímax viendo a su madre y a su hermano follarse la cara.
Disfruto y me excita ver a mi esposa tener sexo con otros hombres, después que otro hombre se lo cogio, cuando el otro le saca la verga de su panocha mojada, yo meto mi lengua dentro de su majada panocha para saborear sus Sabrosos jugos de sus venidas, mamarle la panocha a mi esposa después de coger.
Bienvenido a nuestra peculiar relación, algo caótica, totalmente sin sentido, pero muy excitante. Somos tres chicos que disfrutamos al máximo de nuestras interacciones y cuando digo al máximo me refiero a que entre nosotros se vale todo. Procura no correrte con nuestras aventuras y ¡A disfrutar!
Mis padres charlaban con John en la sala, riendo como si nada. Él me miró, y sus ojos me clavaron al piso. Mis manos apretaron la toalla hasta blanquearme los nudillos. *Quédate quieto, Danielito*, me ordené. Pero ya sabía que ese día había rajado algo en mí, como cuando abres un sobre sin querer.
Todo empezó cuando acompañé a mi mamá a una reunión en la escuela de Arturo. El profesor y el director nos dijeron que mi hermano tenía problemas serios, que era agresivo y no se llevaba bien con los demás. Mi mamá, siempre tan dedicada, decidió hacer lo que fuera necesario para ayudarlo, incluso si
Ambos yacíamos jadeando en la oscuridad. Periódicamente, una pequeña sacudida recorría a mamá haciéndola retorcerse contra mí. La abracé y sonreí como un idiota. Una parte de mí quería quedarme despierto y observar a esta mujer insoportablemente sexy alcanzar su brillo postorgásmico.
Quitándose los tacones de una patada, llegó al borde de mi cama, donde se sentó riendo. El olor a sudor y vodka impregnaba el aire. Mamá tenía el pelo despeinado. Todavía llevaba el vestidito negro, francamente escandaloso, con el que había salido.
Dos jóvenes residentes de una clínica se tientan al ver por primera vez a su jefa, una odontóloga de 36 años con un culo más que llamativo que los dejó turbados. Uno de los dos decide dar un paso más y conquistarla mientras el segundo saldrá beneficiado por tal accionar de su compañero.
Sabes últimamente estoy hablando más seguido con la Fisoterapeuta. Parece q me extraña y desea coger nuevamente conmigo me excita el olor de la vagina de mi masajista.
Tito y Lorena, atrapados en la rutina, desatan sus fantasías en un viaje a Pinamar. Un encuentro ardiente en un pub con Diego enciende el morbo hotwife. ¿Qué hará Tito con el número de Diego? Un relato de deseo, celos y promesas que queman.
Una mano la metí debajo del top para poder apretar las tetas, la otra la empleé para meterle un dedo mientras con mi boca succionaba su clítoris. Como si fuera un sueño, escuché la mejor frase que he escuchado en mi vida “tío por favor penétrame”,
En el relato anterior les había contado que había follado a la sobrina de mi esposa , una linda joven que me excitaba y provocaba desde el dia en que la conocí y pude follarla como quería, hoy les traiga la segunda parte de esta historia de sexo y pasión, la primera vez fue cuando fui con mi esposa
Susana descubre el dildo en el baño y lo usa frente al cristal, excitando a los vecinos. Cristina provoca, chupa el juguete y termina dándole una felación al joven, mientras el marido, al borde del límite, contempla la escena incendiaria.