Estaba apunto de correrme y se lo advertí para que se retirara, pero parece que a ella le dio igual e incluso aumentó el ritmo mas y mas y no pude controlarme y acabé dentro de su boca tragándose todo mi semen sin rechistar y limpiando los restos que quedaban en mi pene.
La ducha no tiene mamparas pero si unas cortinas, me desnude y me metí en la ducha cerré la cortina y me lave, al terminar me puse el pantalón corto y me fui al salón, y allí estaba ella sentada en el sofá, llevaba una camiseta blanca muy fina y un pantalón muy corto.
Dos meses después y con una serie de retoques dados por Luis y Sole emprendí viaje a mi nuevo destino, Madrid había sido la ciudad elegida por la organización que me había adquirido, como lugar de entrenamiento y rodadura para posteriores viajes al extranjero.
Cuando accedimos al pequeño claro que quedaba entre aquellos matorrales, la visión que tuvimos fue de campeonato. Allí se encontraba el viejo de pie, sin los pantalones, con aquella tremenda polla, ensartada en la boca del jovencito, que desnudo como dios lo trajo al mundo, se hallaba a cuatro patas, y siendo montado por el perro del viejo.
Ya son más de las siete y media. La piscina va a cerrar. Yo ya estoy vestido, con mi pantalón corto, esperando a mi novia que está en el vestuario. La chica no se ha movido de allí, pero de pronto se levanta y se vuelve a meter en el agua. No hay nadie.
El ganador, ordena. El perdedor, obedece. El final de la partida llevará a Marta a vivir su primera experiencia como esclava. Segunda entrega de este relato.
Hace una semana, lo que era un baile se convirtio en una noche de placer para mi y mis nuevos amigos... mmhhh...rnrnEspero que disfuten como yo lo disfruté...
En ese momento comprendí que todo estaba ya planificado y yo, sin saberlo, era parte de esos planes. Sin pensarlo dos veces mi amigo levantó a la morena por la cintura y la cargó hasta la orilla depositandola en la misma sábana que estaba acostada cuando llegamos.
Ella me había enseñado que podía mantenerse excitada (sin correrse) durante períodos de tiempo bastante largos pero en esos instantes no era capaz de controlar su propio cuerpo y Sheena era una experta comedora de coños; todas mis esclavas son capaces de hacer maravillas con sus lenguas.
El viejo terminó de hablar y cenamos tranquilamente como reponiéndonos de la agresiva embestida oral y sacudiéndonos las frases, dichos, reflexiones etc. Salimos al jardín a pasear y mi esposo fue detenido por su padrino, probablemente era cierto lo que Jorge Luis decía acerca de la voz "no importa cuanto duela o cueste, siempre hay tiempo para otra palabra".