Al salir de aquel trance en los espejos, como cuando se entra al laberinto de éstos en una feria y encuentras la salida, me encontré nuevamente contemplando aquella casona por entre aquel tamizado verde de hierbas cuando un amigo me saluda a gritos y me vuelvo a él.
Fue comprenderlo y comencé a soltar una gran cantidad de semen en tres o cuatro espasmos absolutamente fantásticos, que hicieron que mis piernas casi se doblaran, mientras sus manos se cerraban firmemente en la base de mi pene y su boca no dejaba escapar ni una gota de todo lo que en ella eyaculé.
Si te quieres tirar a una dama de la aristocracia tienes que buscar a una Sara Montiel o a una Duquesa de Alba, mientras que por mil euros ya tienes una perra de raza que te aseguran el pedigrí.
Me dijeron que no tenían ni idea de quién era, que se presentó en la puerta de casa con una invitación y amablemente les indicó (por señas) si podía ir con ellos y como eran gente maja le llevaron, pero después desapareció.
Sorprende a unas alumnas fumando y las manda a su despacho para proceder con el castigo Me llamo Miguel, y puede decirse que no soy nada especial, tengo 46 años y vivo solo, nunca he estado casado y realmente no tengo éxito con las mujeres. Quizá sea porque soy de poca estatura, llevo gafas y […]
Primero la recibí casi tímidamente con la puntita de la lengua, después tomé su pezón con los labios y finalmente me tragué gran parte de su teta mientras mi lengua recorría incansable su aureola.
Mi tío volvió a casa, y seguimos con nuestros juegos sexuales; pero resulta que recibí una llamada de mi novio que venía de mi ciudad, entonces les pedí permiso a mis tíos para que se quedara en la casa, a él no le pareció la idea, pero ella dijo que sí, que podía usar la habitación de los huéspedes
Yo algunas veces fui a ese anexo y no me sorprendía ver tipos parados frente a los orinales luciendo enhiestas vergas de todos colores, tamaños y por qué no decirlo, sabores.
Yo me quedé muy nervioso con ganas de llamarle y decirle que quisiera perderme en sus brazos fuertes, total que quise olvidar el rato y me fui al baño, eran como las 11 de la noche, cuando me entra una cachondez y me decido ir a buscarlo me puse unos jeans y una playera y subo a la azotea, llegó y está abierto su cuarto,
El chico se levanta por la noche tras escuchar unos ruidos y descubre a su madre masturbándose mientras ve una película porno.