Últimos relatos gay:

Una mamá para cuatro III y final

0,00 (0 votos)
El que la culeaba comenzó a morderle el cuello desde atrás mientras le hincaba duro y el pelirrojo, quiso rematar lo que casi ya no podía imaginarse. Le pidió a mi esposa que comenzara a decirme cochinadas porque quería ver mi polla de nuevo dura y echando la leche por segunda vez.

Tiempo perdido IV

0,00 (0 votos)
Cuando me corrí dentro del culo de mi madre, tenía metidos dentro de su coño tres dedos y sentí su orgasmo casi simultáneo al mío. Me retiré agotado y mi madre se dio la vuelta bajándose la falda. Me miró con lujuria y me besó en la boca.

El padre de mi mejor amiga I

0,00 (0 votos)
El sabor de su piel es delicioso como los jugos que manan de su sexo cuando se prueba por primera vez, antes siquiera de calentarla, y es totalmente distinto del no menos delicioso sabor de los jugos que produce ese mismo sexo cuando está caliente como una perra luego de un rato de estimularla sexualmente.

Esto es lo que me pasó cuando ayudé y consolé a mi vecina

0,00 (0 votos)
La besé y mientras hacia esto dirigí mis manos al cierre de su sostén que cayó con facilidad, al notarlo baje mis labios de sus labios a sus pechos, los bese dulcemente, rodeando sus erectos pezones, tras esto me arrodille ante ella y bajé lentamente sus braguitas dejando a pocos centímetros de mi vista su precioso sexo, al verlo bese su escaso vello púbico y di un par de lametones a su ardiente sexo.

Una mamá para cuatro II

0,00 (0 votos)
Los otros que se habían corrido aprovechando que mi esposa estaba a cuatro patas y sus pechos colgaban como los de vaca, se situaron cada uno de ellos dos, en cada pecho de mi mujer y comenzaron a ordeñarle literalmente la leche de sus colgantes tetas, cayendo literalmente de sus pezones a sus bocas abiertas.

Mi maravilloso primo

5,00 (1 votos)
Me la saqué de la boca, se la pegué contra el vientre y le comí las bolas, una a una, delicadamente, pasándole la lengua primero y metiéndomelas de a una después. Las tenía duras, rebosantes de leche aunque hacía apenas unos minutos había descargado una buena cantidad.

Una mamá para cuatro I

0,00 (0 votos)
Sus pechos se pusieron como globos a causa de su producción lechera y no era extraño que en más de una ocasión, por la noche, me vieran mamando sus tetas porque, como ella decía "había tenido una subida de leche y le dolían mucho".

Es algo para vivir

0,00 (0 votos)
El pasillo de la universidad esta lleno de nuevos estudiantes! que jóvenes me parecen! ya hace más de tres años que termine la carrera y hoy fui a saludar a Marisa, la chica (52) que trabaja en la biblioteca, ella me ayudo mucho en conseguirme ese libro de derecho constitucional, al encontrarme en su oficina, estaba ella, morocha delgada, su busto bien formado y el traje entallado, decían a voces de sus ejercicios fue Marisa quien me la presentó, su nombre Soledad, pensé enseguida que no le quedaba bien, pero al escucharla

Compañeras de facultad II

0,00 (0 votos)
Cuando su amiga nos descubre tratamos de explicar lo que sucedió mientras nos arreglábamos la ropa, al no caber los tres en el reservado Jessica (la rubia) se va dejándome solo con Marcela, cuando estamos solos me dice que me desea y que podría calmar la calentura que le hicimos agarrar con nuestro espectáculo de susurros y por lo que vio al descubrirnos, al no responderle se acerca a mi y me besa en los labios mientras que con una mano