En un campamento en Granada pruebo por primera vez dos pollas grandes al mismo tiempo.
Aquel inolvidable verano cuando le quité el sujetador y aparecieron dos hermosas tetas blancas con pequeños pezones rosados.
Aquella verga si conseguía entrar en mi culo, me iba dejar reventado, era como si te meten el puño en el culo.
Siempre me había gustado imaginarme de gogo y ahora en la despedida de soltero tenía la oportunidad.
El verano que nunca olvidaré fue cuando cumplí los doce años, mi prima me enseño más de lo que pude imaginar.
Historia que vivió un lector de mis relatos, el cual me escribió pidiendo si podía escribir sus recuerdos de cuando fue desvirgado.
Porque su esposo no llegó el día que ella lo esperaba, se convirtio en bailarina y prostituta, después que fue invitada por una amiga a una supuesta despedida de solteras.
Uso el trofeo obtenido de la presidenta para hacerle la colita a mi mujer.
Era un sábado por la tarde, cuando aprovechas para hacer todas las cosas personales que durante semana no logras realizar por las demás actividades
Una prostituta recibe con excelente disposición la noticia de que su propio hijo se ha hecho cargo de su explotación comercial.