En esta oportunidad les relataré unos de mis encuentros con una prima viuda, trataré de describir lo más fielmente la ocasión. De más esta decirles, que lo relatado a continuación es totalmente verídico.
Desde los primero años de mi adolescencia siempre me ha gustado mucho masturbarme, lo he hecho de muchas maneras y en muchos lugares diferentes, esto no es nada del otro mundo pero la anécdota que les voy a contar a continuación, ocurrió en uno de mis lugares favoritos para masturbarme: el baño.
La tomé del culo por debajo de la falda acariciándole las bragas e incluso sorteándolas para acariciarle el chocho por delante y con la otra mano le sobé las tetas por encima de esa tela tan suave.
El verano de 2002 fue un verano en el que yo y mis amigos y amigas descubrimos experiencias nuevas, que la verdad nos gustaron mucho a todos.
Hacia ya un par de semanas que no había tenido oportunidad de tener relaciones con él, y la verdad ya lo extrañaba, y como papa no estaba, pues, pensé en pasar una noche muy agradable con mi abuelo.
Aquel día iba buscando quien me diera por el culo, había ido a los aseos de la estación de ferrocarril, ya pasaban de las 10 de la noche y todas las veces que había entrado en los aseos, no había tenido suerte.
Desde que tengo consciencia he tenido relaciones sexuales con mis primos, primas y hermanos. Esta parte de mi infancia y adolescencia me ha convertido hoy en un adulto adicto al sexo y hoy quiero compartir con ustedes mis experiencias incestuosas.
Una mujer casada tiene una fantasía y con la ayuda de su esposo la lleva a la realidad, lo que le permite descubrir su verdadera vocación.
Era un bonito lugar caribeño, una isla rodeada de playas enormes de finas arenas y aguas transparentes, palmeras, buena gastronomía y sobre todo hermosos y hermosas nativas de la isla a las cuales era imposible que tanto los ojos de Nuria como los míos no se perdieran en sus curvas y en su tez morena.
Como en muchas ocasiones, aquel día había ido en busca de sexo a los aseos públicos, en concreto había ido a los aseos públicos que había en los jardines de 4 caminos.