El difunto Evodio. La dolorosa opresión en el pecho, la creciente dificultad para respirar y el paulatino adormecimiento del cuerpo confirmaron a Evodio que la vida se le escapaba, así lo comprendió su mujer que corriendo fue a buscar ayuda.
Una de las amigas de Cristina traía consigo un periódico y se dedicó a hojearlo mientras platicaban de sus cosas, en un momento dado la chica del periódico apenas seguía la conversación de las mujeres, éstas le preguntaron acerca de su distracción, a lo que contestó la aludida que en el diario venían anuncios muy curiosos, "algunos muy atrevidos", dijo, pero ante las bromas de Cristina y de la otra chica, la interesada en los anuncios dejó por la paz las hojas impresas y se metió de lleno a la plática de las mujeres.
Durante años el sexo fue para Leonor algo así como parte de las obligaciones que toda mujer debe tener. Originaria de Oaxaca, como la mayoría de sus coterráneas se había casado muy joven, y junto con su marido llegó a la gran ciudad en busca de nuevos horizontes.
Ya estaba dentro de ella, su verga entraba y salía de su mojadísimo sexo, la argentina tenía las piernas muy abiertas apuntando hacia el techo de aquel cuarto de hotel, mientras él a la vez que arremetía con su miembro una y otra vez en aquel sexo abierto y peludito, besaba y acariciaba ese par de senos, grandes, duros, de pezones ahora duros y paraditos, Azul se quejaba, gemía, se acercaba al orgasmo...
Al entrar los cortos ya habían iniciado y tuvo que hacer esfuerzos para orientarse y buscar un asiento, ya medio acostumbrada a la oscuridad se percató de que la sala estaba casi vacía, solo algunas parejas de novios más entretenidos en fajar que en ver la película.
Relato de una madura amante del sexo en todas sus variantes. Un chiquillo en vacaciones la conoce y disfruta de muchos días y noches con ella, hasta que decide partir.
Relato de zoofilia. Una mujer se inicia en los placeres zoofilicos con el perro que su hermana le dejó encargado.
Historia de una mujer madura que descubre circunstancialmente el desenfrenado deseo sexual que despierta en uno de sus alumnos.
Los siguientes días fueron un tormento para Teresa, se sentía inquieta, nerviosa, más cuando su mirada se cruzaba con la de Beto, entonces su nerviosismo contagiaba su cuerpo.
Primera parte de un relato de amor filial entre una madre efectuosa y muy consentidora y su hijo, un menor en los inicios de su pubertad.
Experiencia sexual de un adolescente con la madre de su novia, la mujer madura descubre a su hija y a su novio teniendo sexo en la sala de la casa.
Como entre sueños escuchó la puerta de la entrada abrirse, soñolienta volteó al lado de la cama que normalmente ocupara su marido y al encontrarlo vacío concluyó que quien entraba a la casa era él, que como cada viernes regresaba de madrugada luego de irse de borrachera con sus amigos, resignada se acurrucó bajo las cobijas y de inmediato se quedó dormida.
Yo profundamente dormido, poco a poco fui sacado de mi sueño por algo que me estaba ocurriendo, la diestra mano de Amada hurgaba bajo mi trusa, acariciando mi verguita, que ya para entonces se ponía erecta cuando me la acariciaba en el baño, pero ahora era otra mano, una mano de mujer, la manita acariciadora de mi prima Amada.
Historia de la vida sexual entre una maestra madura y su aventajado alumno.
Fui hasta mi coche y guardé las cosas, eran apenas las dos y media, tendría suficiente tiempo. La busqué con la mirada, traía una camioneta Windstar negra, casi nueva. Volteó a mirarme y se subió al auto. Llegué hasta ahí y ya la puerta me esperaba abierta.
Recuerdo que todavía era un chiquillo cuando gustaba de meterme bajo la mesa del comedor para mirar las redondas piernas de mi tía, y muchas veces tuve la suerte de alcanzarle a ver sus calzones sin que ella me descubriera.
Avatares de un jovencito metido circunstancialmente a peluquero de señoras, sus éxitos y fracasos, tanto amorosos como económicos, y su fin como peluquero de paisaje.
Un adolescente se ve inmiscuido en la desenfrenada vida sexual de su familia, descubre a su tia con su padre, chantajea a la tia para que tenga relaciones con el y al final descubre que su propia madre tiene mucha cuerda al respecto.
Como cada tarde, los primos se detenían en un arrochuelo para dar de beber a las vacas y de paso darse un baño y lavar sus humildes vestimentas.
Se trata de un trio entre una mujer madura, su sobrino y un amigo de este, todo sucede al final de una fiesta.