Más tarde vuelve a bajar su boca por mis testículos mientras me agarra firme la polla y me da pequeñas mordidas en el escroto y me mete la lengua y hasta un dedo en el culo que previamente moja en su boca o en la mía.
Dianet y yo coincidimos en un curso en el mismo hospital, ella era ya una especialista formada y estaba haciendo un diplomado, yo estaba apenas en el último año de mi especialización.
A mis treinta y seis años tenía dos amantes además de mi esposa, Liz. Me quería comer el mundo y pasaba todo el tiempo pensando en follarme a mis tres mujeres.
Cómo les decía Jude tiene un pequeño coño depilado y produce un manantial de rico fluido transparente que empapa mi pubis, mi boca, mis manos, es un olor agridulce muy agradable y muy difícil de quitar, más aún porque ni siquiera me baño antes de llegar a casa.
Mi objetivo era provocarle un orgasmo por el culo, a ella que siempre me lo había negado. ¡Y claro que lo logré! Me movía como un poseso, no solo de atrás a delante sino también en círculos, su culo, al principio apretado, se dilataba enormemente.
Volví a besarle hasta que sus brazos que intentaban rechazarme, se enroscaron en mi cuello y su lengua comenzó a devolver las caricias de la mía, juntó su cuerpo al mío y ahí me di cuenta de que el tamaño de mi verga no sería impedimento para cumplir mi capricho.
Se la metió en la boca hasta conseguir que la entrase toda hasta el final. La sacaba y la metía. Después de tamaña sesión de sexo y de lo que llevaba conteniéndome, yo no pude aguantar más y realicé otra descarga mayor que la anterior. Se tragó gran parte del semen que despidió mi polla, y otra parte la extendió por su cara y sus pechos.
Mientras su novio está examinando unos restos arqueológicos, el dueño del local, un cine para más señas, toma en silencio y con contundencia a la novia del alelado muchacho que se deja hacer con delectación.
Estábamos como siempre tomando algo toda la pandilla, y llevábamos muchas copas de más, y a mi novio le dio llorona porque ese día habíamos discutido por una tontería. Total que le lleve a su casa y yo me volví con ellos a tomar la última. Me encanta hablar con Marcos y nos sentamos juntos en una terraza. Yo siempre le tomo el pelo con sus escarceos sentimentales que nunca llegan a nada...
Su encuentro con una antigua novia, fue muy apasionado. Le confesó que no le había podido olvidar y como su matrimonio no iba bien, le propuso una noche de placer juntos.
Uno de los días vinieron dos amigas suyas y disfrute como una perra comiéndome sus coños negros, y bebiendo su meada, las dos se mearon en un vaso de plástico y me bebí un vaso de litro de plástico con toda su meada. Si también me van las chicas, también disfruto comiendo coños, y bebiéndome la meada de chicas de mi edad, y porque no decirlo también las maduritas me vuelven loca.
Él se arrepentía de no haber sabido como retenerla a su lado. Siempre ha sido bastante egoísta en esto de los sentimientos. Pero la verdad es que envidiaba a su marido por tenerla.
Cuando voltee vi cómo se quitaba la ropa y como quedaba descubierta aquella gran verga negra. Cuando la vi, mi concha comenzó a sentir unos espasmos, no podía esperar a que me la metiera.
Mi camisón era un estorbo así que colabore en los movimientos para despojarme de él. Ahora estaba boca abajo en mi cama solo cubierta por la tanga cola les que era mi única prenda y siendo recorrida por unas manos fuertes pero que sabían tratar a una mujer
Intentando conseguir alguna respuesta a sus no formuladas preguntas, volvió la mirada hacia Ana, solo para ver con total incredulidad como su hermana estaba en el suelo, descalza, arrodillada, con la cabeza y los brazos en el suelo, en posición de total humillación, casi de adoración, hacia Nacho.
A los pocos momentos me corrí con gran placer y empujé tanto que la empujé a ella contra el cabecero de la cama, y con un pequeño PUM me quité de encima, y disfruté el momento.
Un joven intenta consolar a una amiga que ha tenido una discusión con su novio. Ella, repentinamente, se ofrece a él y ambos tienen una deliciosa tarde de sexo.
Llega la boda de esta curiosa pareja, donde él es un cornudo feliz y consentido. Desde la noche de bodas a la luna de miel, todo es un río de goces y cuernos.
A veces las apariencias engañan y es mejor cerciorarse antes de tomar decisiones apresuradas, como las que ejecuta esta esposa, sospechando que su marido le es infiel.
Una pareja recupera gran parte de su morbo sexual a los pocos años de casarse, con la fantasía de la infidelidad. Hasta que él descubre que no es tal sino que es una realidad muy auténtica...
Después de algunos encuentros incluyendo hombres en su cama, la esposa pierde las inhibiciones y disfruta de un perfecto viaje sexual con una amiga suya y los hombres que las cortejan, para contárselo después con detalle a su marido.
Nuestra protagonista, iniciada por su novio en las relaciones en grupo, va con él a una discoteca. Cuando él está borracho y dormido dentro del coche, un seguridad se la folla vaginal y analmente apoyados ambos en el mismo auto.