El hombre entra en el local de ambiente gay y es observado desde la barra por un muchacho. Después de un inequívoco contacto, primero visual y después muy físico, ambos caen en una cama...
Un mundo de culos, pollas e inyecciones de semen.
El nuevo vecino de la urbanización se pone a cien al ver cada día a un joven albañil. Terminarán masturbándose y haciéndole una maravillosa mamada.
Nuestro protagonista quiere animar su vida sexual y desea ardientemente probar relaciones gays, consiguiendo una cita en un bar de ambiente. Su amante, una mujer madura, le anima a llamar a su iniciador.
Una particular academia recibe a los candidatos. Uno de ellos es seleccionado como pasivo y probará vergas y semen hasta quedar saciado y casi insconsciente.