Ahora mismo hay 817 series de relatos eróticos.
Las series o sagas eróticas, son un conjunto de relatos eróticos que tienen un argumento central y que son publicadas por entregas por sus autores.
La pobre Savina, la gran mujer trofeo de Puglia, de rodillas e inclinada hacia adelante, con los brazos en cruz sujetos por dos hombres encapuchados. Sus tetas colgando botaban con cada embestida de su hijo, drogado, encapuchado y acollarado, sujeto con una cuerda en las manos de Emma Violante.
Enseñando a disfrutar en casa. Cuando los deseos superan la realidad
Como me follo un perro callejero siendo aun virgen y inocente.
A veces elegimos nuestro destino y por falta de amor fraternal llegamos a buscar una salida con alguien, pienso así.
Más que amigos, ahora somos familia .amantes hasta el final. El amor nos transforma.
Recuerdos que surgen cuando recibo una invitación a un evento especial, el festejo de un aniversario en mi primer empleo.
En mi primer relato les conté mi primera experiencia con un hombre pero esa experiencia dio paso a una serie de acontecimientos que me llevaron a lo que soy hoy Susana
Sin querer, un hijo tiene sexo con su madre decepcionada por la infidelidad de su marido, a su vez que ella se va preparando para tener una aventura con un profesor de su hijo.
La historia de mi día a día 😈🙈🔥Un relato erótico cargado de sexo y drama
Un hetero y un gay de closet se hacen amigos en el trabajo
En el momento no piensas, no coordinas, no reaccionas, es el cuerpo el que manda...
Cómo una joven fuerte pero bondadosa e inocente termina siendo el juguete sexual de un vampiro.
Relato una cita bastante larga que tuvo mi hermosa esposa junto a atractivo y dotado novio, la cual se convirtió en algo único.
Luz Maria es una mujer normal como cualquiera,educada,recatada y de saber estar pero cuando se excita todo cambia.
La decisión de querer dejar de estudiar y ponerse a trabajar hizo que una joven poco experta en el sexo, quedase cautivada por su jefa, una mujer lesbiana, muy dominante, que la inicia a probarlo.
Solamente bastó una vez mirarlo para saber que lo quería dentro de mi...
Las tetas de Cristina se aplastan a su vez una contra la otra, ondulando rápidas como flanes, presionadas por su brazo izquierdo. Su mano está dentro de su pantalón, entre sus piernas, y sus nudillos se dibujan en la fina tela, mientras se masturba.
La joven Astrid recibe un llamado alarmante. Con desesperación toma a su hermano y llegan a un búnker oculto en el medio de un bosque Sueco. Mientras las bombas atómicas caen sobre el territorio, los dos tienen que aprender a convivir solos en una intimidad inquietante.
Cinta no sabía la magnitud que iba a alcanzar esa decisión.
Celia cree que su sobrino Enrique puede ser un gran hipnotizador. Él vive rodeado de mujeres a las que adora: su madre, su hermana y sus primas. Celia usará todas las armas disponibles para tentarlo y llevarlo a su máximo potencial.