Fantasía acuática

La luz del día cruzaba la habitación, posando sus rayos sobre nuestra piel desnuda.

Mis manos estaban enlazadas a las suyas sobre su cintura, de repente note como dulces caricias hacen que me salga de mi sueño, era mi princesa dándome pequeños besitos por la cara, -esto si que es un buen despertar- pensé, la mire a los ojos y la bese intensamente en señal de agradecimiento por su delicadeza, la dije:

Te mereces un premio, pase la una mano bajo su espalda y otra bajo sus rodillas, la levanté y sin decirle nada, la lleve al baño, Rosa sabía perfectamente lo que quería hacer, así que me agarraba del cuello y nuestros labios se volvieron a juntar durante otro instante.

En este lugar habías pasado grandes momentos de pasión y amor, la pose sobre el suelo y empecé a abrir las duchas, hasta que el agua estuvo en el punto exacto.

Lentamente nos metimos bajo el agua y continué besándola, mientras miles de gotas nos cubrían la piel.

Mis manos se perdían por su espalda, y las suyas volvieron a fundirse en mi cuello, sus pechos chocaban contra mi torso, deje sus labios, empecé a recorrer beso a beso, sus pómulos disfrutando de cada instante, su frente, etc…

Cuando llegue a su orejita pase lentamente la lengua por cada uno de sus cartílagos, para terminar dando un mordisquito en el lóbulo de la oreja, de su boca salió un pequeño gemido ahhhhh.

Continué mi camino hacia su cuello, donde estuve besándolo repetidas veces, ayudado en varios momentos por los movimientos de mi lengua, la respiración de ambos se fue aumentando mmmmmm, notaba como sus pezones estaban reaccionando a cada una de mis caricias, esto provocó que mi excitación aumentara, y también mis ganas por continuar surcando ese maravilloso cuerpo cubierto de agua.

De su cuello pase a sus hombros, su piel era muy suave y desprendía un perfume que hipnotizaba mis sentidos, por su parte, me besaba y recorría con su lengua cada cm de mi piel, en mi, crecía de forma incontrolable una gran excitación mmmmmmmm, que era ensalzada por la reacción de mi sexo.

Nota: El baño estaba formado por una ducha muy espaciosa, el palto sobre el que estábamos, era lo suficientemente grande para que entremos los dos juntos, cada uno tenía su respectiva ducha, contigua una a la otra, de cada ducha nacía el «telefonillo», para que la ducha fuese más completa.

Antes de continuar con lo que se veía inevitable, páramos el agua, me puse detrás, cogí el bote de gel, y deje caer un hilito frío muy fino, del hombro derecho al izquierdo, deteniéndose sobre cada pecho.

El gel se derramaba poco a poco, sus ojos se cerraron, decidí dejar que fluyera hasta llegar a cubrir sus respectivos pezones, entonces el cuerpo de Rosa se estremeció, posaba mis manos sobre sus hombros para esparcir todo el gel, por más que intentaba tocarse no la dejaba y yo me acercaba mas y mas, para que notase perfectamente el estado de mi sexo.

Ladee hacia la izquierda su cabeza, mis labios se pegaron contra su cuello, pasaba la lengua cada vez que mis manos se ponían en contacto con sus pechos, le daba pequeños mordiscos cuando le rozaba los pezones, muy dulcemente le pregunté:

quieres que siga???

Y ella asintió.

El movimiento de mis manos aumento y la presión sobre sus pechos también, sus suspiros fueron más intensos y pronunciados ohhhhh ahhhhh, la incline, puso sus manos contra la pared, mis manos bajaban por su espalda haciendo todo tipo de signos, mientras mi polla estaba rozando entre sus nalgas, flexione un poco las rodillas, apunte a la entrada de su culito, pero lo que hice fue friccionarla desde su ano hasta su concha y viceversa.

Rosa estaba muy sensible a cualquier roce ahhhhhhhh, me puse de rodillas y pase mi mano cubierta de gel por su culito y seguí bajando por la cara externa de sus piernas, para luego subir por la cara interna, y pasar mis manos por su concha muy despacito mmmmmm, para que se empapase de jabón pero solo una sola vez.

Notaba que ella quería más y que la dejase de hacer sufrir, aún así, esta vez era yo quien iba a dominar, la posición de cara a mí, cogí el telefonillo de la ducha y empecé a pasarle el agua por su cuerpo, le separe las piernas, la imagen era preciosa su monte de venus brillaba como si las estrellas se estuvieran reflejando en él.

Mi boca buscaba con desesperación la suya para apaciguar mi sed MMMMM, volvimos a besarnos mas apasionadamente, deje sus labios y empecé mi camino, le dije que le relataría un cuento sobre el viaje que estaba a punto de realizar sobre su cuerpo.

El aventurero (mi lengua) bajo por una gran ladera (tu cuello), el suelo que pisaba era una delicia, miro hacia el frente y vio dos grandes montañas unidas (tus pechos unidos por tus manos) durante unos momentos dude en conseguir mi sueño, pero la recompensa (tu orgasmo) era demasiado elevada para rendirse.

Empecé a escalar dichas montañas por un pequeño camino que había entre las mismas. El suelo que pisaba era muy duro y a la vez aterciopelado, poco a poco llegue hasta a la cima de la montaña, dando un pequeño «castigo» sobre el pico (pezón), mis ojos no se lo podían creer lo que veían, él se estaba endureciendo y aumentando de tamaño, así que salido corriendo por una ladera para intentar refugiarse en la otra montaña y me encontré con otro pico y le di un «castigo» mayor que a su vecino, cogí mi espada y la clave (mordisquito) sobre el pico, los efectos fueron los mismos, empecé a correr a su lado para ver que ocurría, era increíble está oyendo rugir (gemiditos) a la montaña, alce la mirada hacia el cielo y vi como dos grandes estrellas (tus ojos) ardían como si quisieran estallar (excitación).

Paso a paso (beso a beso) iba recorriendo mi camino, pasando por un pequeño agujerito (tu ombligo) al que bese, como si de los labios de mi amada se tratase, según pasaban los segundos este aventurero llegó a un tupido bosque, donde la oscuridad iba a ser su acompañante hasta llegar a su destino.

Notaba el cómo un fuerte olor le invadía la cabeza, era encantador y provocaba que si cuerpo se desplaza directamente hacia El Gran Cañón.

Recordó que el botón para ascender al cielo (tu clítoris) estaba escondido por grandes pliegues de tierra, según la leyenda narra:

A aquel consiga tocar el botón de ascender al cielo, podrá beber de las aguas divinas, que nacerán entre los pliegues(labios) del gran cañón(vagina), aquel que lo consiga será complacido con el mayor de los tesoros.

Para ello deberán meterse entre esos pliegues y desplazarse intensamente hasta que nazcan de la tierra sus primeras gotas divinas.

El aventurero (mi lengua) se introdujo entre los pliegues y estuvo desplazándose de un sitio hacia otro, vio que no conseguía había ninguna repuesta a sus estímulos, decidió hacerlo en círculos y hacia los lados, a la vez que sus pasos se incrustaban en la tierra, por su esfuerzo fue concedido con la mágica gota que tomó con mucho agrado, directamente continuó su camino hacia el botón mágico, sin avisar apareció ante él, al que acarició durante un largo tiempo, noto como una gran manantial nacía bajo sus pies, el olor era cautivador y dejó que el manantial cubriera su cuerpo.

De repente vio su tamaño había aumentado, que se encontraba abrazado a su princesa amada y que sus labios volvían a estar unidos bajo el agua divina.

Mi amor te gustó mi cuento, a lo que ella me dijo levántame del suelo:

– Fóllame mi gran cañón me esta pidiendo que lo atraviesen- ufffffffff eso me puso a 1000, nuestros cuerpos estaban completamente excitados, cogió la polla con la mano y le dio un besito en la punta, se me endureció como si una descarga la cruzase.

La acerque a mí, ella abrió las piernas flexiona las rodillas y coloque la puntita en su entrada y roce mi polla con sus labios, sabía que ella se moría de ganas, pero la estaba haciendo sufrir un poquito, volví a colocarla y empecé a empujar poco a poco quería que sintiese como entraba, el capullo ya estaba dentro pero lo saqué, y volví a metérsela pero esta vez hasta la mitad, volví a sacarla pero deje el capullo dentro, entonces la dije:

-pon tus brazos alrededor de mi cuello

– pose mis manos sobre su culo, a la vez que la levantaba sé la incrustaba hasta el fondo, sus ojos se quedaron en blanco y de su boca salió un profundo suspiro UUUUUUMMMMMMM, la apoye contra la pared y comenzamos un ritmo frenético de entradas y salidas, su vagina abrazaba a mi polla en cada embestida, notaba como mis huevos se mojaban por los jugos de su concha, como sus pechos golpeaban contra mi torso y sus pezones se clavaban en mi piel.

Una de mis manos se la llevé a la boca y le hice chupar dos de mis dedos, volví a bajar mis manos y pase alrededor del esfínter uno de mis dedos, notaba como cada vez se relajaba, gracias, también, a la lujuria que le recorría el cuerpo, coloqué mi dedito en la entrada de su culito, oooooooohhhhhhhh, y poco a poco lo fui metiendo, a la vez que mi polla invadía sus adentros, al tiempo poco, ya tenia todo mi dedo dentro de su culito, se lo metía a la vez que mi polla y con la misma intensidad, ambos no parábamos de gemir mas y mas, entonces decidí meter el otro también, saque el 1º y empecé a meter los dos a la vez al principio despacito, pero luego hasta dentro, estuvimos así un buen rato, hasta que ambos nos corrimos en un grandioso orgasmo AAAAAAAAAHHHHHHHH, sin separar nuestros cuerpos para que ambos disfrutásemos uno del otro, nos miramos a los ojos y estaban invadidos de placer y acto seguido nos besamos durante un largo rato.

La senté en un gran escalón dejándola con mucho cuidado, estábamos agotados, pero una idea invadió mi mente, así que la hice recostarse sobre el escalón, abriendo bien las piernas y dejándome expuesta la conchita y parte de su culito.

Cogí con una mano un telefonillo de la ducha, lo puse para que diese un chorritos muy finos y a gran presión, lo probé sobre mi capullo, se me doblaron las piernas de la sensación.

Me acerque hacia ella con el objeto en mi mano, me coloque entre sus piernas, te di un largo beso mientras colocaba el agua sobre tu tripita, mmmmmmmm todo tu cuerpo se estremeció ante el 1º contacto, subí el aparato sobre tus pechos, tus besos se hicieron más intensos, tu lengua poseía la mía a su antojo, me gustaba como lo hacías, entonces pose de golpe el agua sobre tu concha, y metiste tu lengua casi hasta mi garganta, así que sin poder aguantarlo más me separe de ti, deje tu boca libre y comencé a besar tu pezones, les daba mordisquitos, mientras el agua hacia su trabajo sobre tu concha. Para hacerlo más intenso, coloqué el agua sobre tus labios que los abría por la presión con la que salía el agua, metí dos de mis dedos dentro de tu vagina moviéndose en todas direcciones, entrando de golpe y saliendo despacito.

Posé mi boca sobre tu clítoris, empecé besándolo muy despacio luego más deprisa, tus caderas se movían de un lado a otro, cogí tu clítoris entre mis labios y mi lengua le dio varios lengüetazos de un lado a otro, le daba mordisquitos una y otra vez.

Le dije que acercase un poco y que sujetase el agua junto a sus labios y un poco a su culito, entonces saque sus dedos de su concha y le dije que me chupara dos de la otra mano, lo chupo como si le fuese la vida en ello, los pasó la lengua, sentía que era mi polla la que se estaba llevando ese masaje.

Coloque el dedo índice de cada mano en la entrada de su vagina, y empecé a meterlos y sacarlos alternativamente, por lo que su vaginita siempre estaba con algo dentro, ella me decía que no parase que siguiese, así que decidí subir un escalón, ahora metía dos dedos de una mano (3 en total), y continuaba con el mete-saca, sus paredes los aceptaron bien, así que pobre con uno más, les coloque uña con uña, Rosa estaba gozando como una loca pero no sabía lo que estaba a punto de meterle, y empecé a meterlos poco a poco por que tenia miedo de que le hiciese daño, pero su concha estaba muy húmeda y entraron hasta el los nudillos, no podía creer que entrasen todos, así que empecé el mete-saca a destiempo, moviéndolos en círculos, ahora tenia su vagina poseída por 4 dedos sus clítoris castigado por mi boca y el agua estaba dándole sobre tus labios, por lo que me tuve que colocar como puede para que así fuese.

Rosa estaba totalmente ida, no para de decirme que no parase y yo continuaba cada vez más fuerte. sin decirla nada coloqué dos dedos en la entrada de su culito y se los metí, tenia el culito muy dilatado y entraron sin complicación, su concha era una cascada de jugos no sé cuántas veces se corrió pero fueron muchas, al final le chupe el clítoris y le metí los dedos todo la rápido que puede hasta que volvió a llegar al orgasmo por no se que vez. estuve más de 15 minutos sin parar.

Ahora, yo ya tenia la polla totalmente recuperada y tal y como estaba el panorama la hice que se sentase encima de mí y que me montase, mi polla entró sin dificultades dentro de su concha, ya que estaba muy lubricada, sentía el calor de sus paredes alrededor de mi polla, creía que estaba en el cielo, me levanté y empecé a chuparle los pechos como si intentara sacarle leche, sus pezones daban vueltas dentro de mi boca, estaban duros, muy duros y sabrosos mi saliva los envolvía, los mordía, los absorbía, los chupaba eran todo míos.

Rosa apoyaba sus manos en mis hombros para controlar la penetración, en cambio yo las colocaba en su culito para ayudarla, me encanta agarrar ese culito lindo, lo apretaba con fuerza cada vez que entraba, por el placer que me estaba produciendo sus movimientos, nos fundíamos entre abrazos y jadeos, mi lengua estaba como loca recorriendo su cuerpo, parecía que era un vampiro a punto de beber su dosis diaria, mis dedos cada vez se acercaban mas y mas a su agujerito estrecho, estaba tocando el final de su conchita, esparcía todos sus jugos por la entrada de su culito, ella sabía lo que tenía pensado hacer, porque la mire a los ojos y me dio permiso con su mirada, así que empecé a meter uno de mis dedos dentro de ti, cada vez que bajabas tu cuerpo era poseído, por dos de mis miembros, y luego por tres sin decirte nada, aumentaste el ritmo, en una bajada yo te la metí de golpe todo lo que puede, nuestros ojos se pusieron en blanco en ese instante, y continué cada vez más duro, mi lengua entraba también más duro por tu boca, como si quisiera tocar tu campanilla, y mis dedos entraban todo lo profundo que podían cuando ella subía, cada vez que lo hacía de su boca salía un fuerte suspiro mmmmmmmmmmmm, note como cada me agarrabas con más fuerza los hombros y de repente vi que cada vez te dejabas caer con más fuerza, me estaba haciendo gozar como un bloqueo siiiiiiiiii mmmmmmmm, me quito las manos de se culo y me dijo ahora voy a follarte, cambiaba los ritmos muy bruscamente, los alternaba con ritmos lentos pero profundos, suaves pero muy rápidos, me agarra del cuello, me hace mirarla a los ojos, entonces subió y de repente cayo de golpe, ufffffffffff creí que iba a estallar cada vez que me lo hacia, ahora me estaba follando rápido y muy duro, de boca solo salían gemidos y mas gemidos, mientras ella me decía: no es esto lo que querías bien duro, ahora quien es la que esta dominando??? dímelo!!!!! dímelo!!!!, d boca solo salían dos letras: tú, tú.

Estoy a punto de….le decía yo, ella me dijo: ahora te jodes, y paro de golpe, me quedé a medias, no lo podía creer, y cuando creí que me iba a dejar así, empezó a montarme como una loca, mi polla está muy sensible después de haberme dejado a medias, su mirada era de pura picardía, me beso en los labios muy intensamente y me dijo mis pezones necesitan de tu amor, así que sin pensármelo fui a por ellos tome cada pecho con las manos y empecé a besar los pezones muy intensamente, cada vez que yo aumentaba el ritmo de mi lengua, ella también aumentaba la velocidad, le dije que estaba a puntito, entonces entraba y salía de mi con pura rabia, rápido y muy duro ambos tenían la vista perdida del placer que sentíamos, y le dije: me corrooooooo y ella subió casi hasta salirse el capullo y entró de golpe a la vez que de mí salía mi 1º chorro de leche, subió e hizo los mismo, por lo que produjo que cada chorro saliese con muy velocidad, note como ella se corría, al sentir mi semen por todo su interior, se quedó uno segundos ahí dentro mientras nuestras bocas volvían estar unidas en un mar de deseo y placer.

Nuestros cuerpos pegados y protegidos por nuestros brazos, nos tumbamos y ella se puso encima de mí, con mi sexo dentro del suyo, descansando por el esfuerzo que habían hecho los dos, la miré a los ojos y le dije: aun nos queda algo más por hacer, y ella me respondió: ya lo sé, y ahora lo vamos a hacer, ambos estábamos como motos y muy calientes, ya que era nuestro primer encuentro desde hacía un mes y medio, me beso tiernamente en los labios, me beso en la barbilla, bajó muy despacio por mi cuello, ufff esta chica me ponía a mil con solo sus besos, continuó bajando llego a mi pecho estuvo jugando con mis pezones, los mordía, los chupaba, uffff me hacia subir a los cielos, siguió bajando por mi tripa y paro en mi ombligo, su lengua daba círculos y poco a poco se fue metiendo dentro, mmmmmm entraba y salía de él, ufff notaba como mi sexo estaba reviviendo aunque poco a poco, continuó pasando su lengua por encima de mi pubis, jugueteaba con mis pelillos, se acercaba cada vez mas, notaba como sus besos subían por mi polla, la agarró con la mano de la base y la elevo, levante la cabeza, me miró a los ojos y me beso en la puntita, entonces sentí la mayor descarga de placer cruzándome y mi polla dio un salto, UUUUUUFFFFFFFFFFFFF me miraba mientras se la metía en la boca y la chupaba, (yo pensaba: esta chica que me va a matar de placer), notaba como dentro de su boca pasaba la lengua arriba y abajo, dios!! me estaba haciendo volar, notaba como mi polla crecía con cada una de sus caricias, la sacaba de su boca y me miraba a los ojos, mientras pasaba todo la extensión de su lengua, desde la base hasta el capullo, cada vez que me hacía eso recibía un bestial descarga por todo mi cuerpo, entonces empezó a follarme con la boca, más rápido, a la vez que me masturbaba con la mano.

Mi polla se endurecía por momentos, cada vez mas y mas, pero también se acercaba más el momento de llegar a mi orgasmo aaaaaaaaaahhhhhhhhhhhh, así que decidí que la tenía que agradecer de alguna manera este gran placer que me estaba produciendo.

Así que, le dije que parase, que ya tenía mi polla a punto para volver a perforar tu cuerpo, ella se sorprendió ante mi respuesta, la puse frente a la ducha y le dije que se apoyase en la ducha su cuerpo casi hacia un ángulo de 90º, ella misma abrió un poco las piernas.

Pose mis labios sobre sus nalgas, fui subiendo poco a poco por su espalda, mis labios y mi lengua recorrían cada cm de su piel besándola, tocándola, rozando suavemente la puntita de mis boca con sus espalda, mientras mis manos la abrazaban por la cintura y hacía que su cuerpo se fuese elevando lentamente hasta pararla a unos 130º.

Mis labios se apoderaron de su orejita derecha, mi lengua recorría cada cartílago, chapándolo, dando pequeños mordisquitos, a los que respondía con pequeños suspiros, mientras mis manos se apoderaban de sus pechos, colocando los pezones entre mis dedos, mi sexo estaba en la entrada de su conchita, pero antes de mecerlo, pase una de mis manos por su sexo para ver cómo se encontraba estaba húmeda, aun así jugué durante unos minutos con sus labios y con su clítoris hasta que estuviese muy lubricada, coloque mi polla en la entrada de su conchita, le dije al oído: quieres que te la meta?? y antes de terminar la frase, ella ya me había agarrado de la polla y se la había metido el capullo dentro, con un golpe de cadera se la metió hasta que mis huevos chocaron con sus labios, me dijo acércate a mí, yo acerque mi cara a la suya y me dijo: follame hasta que te duela la polla, sin pensármelo empecé con un ritmo bestial sobre su vagina, y por si era poco le está castigando en clítoris con una de mis manos mientras la otra seguí con sus pechos, los dos gemíamos como loqueos, parecía que iba a ser nuestro último polvazo en un temporada, tenía el clítoris muy duro, le estaba dando todo tipo de magreos, roces, toquecitos, pellizquitos a la vez que le decía: te gusta así??? o quieres más y ella me respondía: metela mas, más, no pares, sigue, sigue, a lo que le dije: como desee princesa, empecé a follarmela uuuuuuuuuummmmmmmmmmm muy rápido coloque una de mis manos sobre sus caderas y con la misma mano que antes estaba jugando con su clítoris la coloque en la entrada de su culito y le metí el dedo todo lo que puede, le volví a decir: ahora quieres mas y rosa me respondió: ahora más que nunca, así que le metí dos dedos, y la estaba penetrando de golpe, sé oían los impactos de nuestras carnes, plaf plaf, y cada vez mas aprisa, en esos momentos solo gozábamos, mis dedos sé abrían paso dentro de su culito como intentando hacerlo más grande, ella estaba orgásmica, así que le dije: tu culito me esta pidiendo algo y ella respondió: metela bien a adentro y hazme correrme, príncipe!!!! Siiiiiiiiiiiiii, no pares, no pares. Ambos estábamos totalmente descontrolados solo querías gozar mas y mas, así que se la saqué de su húmeda concha y empecé a mecérsela en su culito, mi polla estaba muy lubricada por todos los jugos que tenia en la concha, al principio solo entró el capullo, lo mantuve allí un rato para que se acostumbrara lo volví a sacar y se lo metí en la concha para que volviera a cubrirse de jugos, mientras rosa se estaba tocando el clítoris como ella sabía y en este intento entro casi toda dentro de su culito, volví a metérsela en la concha aumente mucho el ritmo a la vez que la decía prepárate, entonces salí y entre de un golpe hasta que mis huevos chocaron con sus nalgas, emitió un fuerte gemido que compartí con ella oooohhhhhhhhhhhh, empecé bombear despacito, según pasaban los segundos el ritmo era mayor, mas y con mas fuerza quería partirla en dos, cada vez la estocadas eran más profundas y alocadas sin control, mientras ella no paraba de jugar con su querido clítoris.

Mi mano izquierda bajo por su cadera y la coloque sobre sus labios los movía una y otra vez hacia todos los lados, objetivo era darle todo el placer que pudiese, así que coloqué mi mano en la entrada de su conchita empecé con un dedos, luego dos, luego tres creí que iba a reventar mmmmmmmmmm, ya que mi mano es un poco grande, pero no se quejaba es más no quería que parase así que empuje cada vez con más fuerza sobre dos agujeros, y de repente paré en seco, paro volver a meterla de golpe todo lo que pude, le dije que estaba a punto de correrme y ella me dijo: lo quiero todo dentro, así que continué rápido, más rápido, noté como su cuerpo se estremecía y como mi polla se hinchaba por lo que estaba a punto de acabar se lo dije y ella misma fue la que movió sus caderas para que la llenase, de mi polla salían chorros y chorros estrellándose contra sus paredes, las descargas de nuestros cuerpos las transmitíamos de uno a otro ya que ambos nos corrimos a la vez AAAAAAAAAAAHHHHHHHHHH MMMMMMMMMMMMM, por la cara interna de sus piernas caía un los restos del nuestros elixires combinados.

Entonces la tomé en brazos y la dirigí a nuestra cama.

Colocamos nuestras caras una frente a la otra y la bese en los labios, nuestras lenguas se volvieron a fundir y ambos probamos los jugos del otro, nos separamos, la mire a los ojos su expresión lo decía todo y le dije lentamente, te amo, a lo que ella respondió con esas dos mágicas palabras, te amo, que hacían que todo lo sentido anteriormente, tomase un nivel especial.