Lo que van a leer a continuación es una historia ficticia, en parte producto de mi imaginación, de una historia que me contaron y también de algo que me tocó vivir.
Lo que comenzó como cualquier otro sábado, cambió la vida de un chico común y corriente.
Eran las 9 de la noche y Pablo decidió llamar a su amigo Pedro para ver que hacían en la noche, ellos son amigos desde hace mucho tiempo y son muy buenos amigos.
Pedro le dijo que estaba en su casa solo, los padres estaban en un casamiento e iban a volver muy tarde, pero que más tarde iba a ir su novia con la hermana, y lo invitó a Pablo a que se uniera al grupo, pensaban alquilar alguna película, tomar unas cervezas, divertirse un poco ya que tenían la casa para ellos solos.
Cerca de la 11 de la noche Pablo fue para la casa de Pedro, primero pasó por el videoclub para alquilar dos películas, cuando llegó a la casa de su amigo ya habían llegado las dos chicas.
Pablo conocía a Yanina, la novia de Pedro, pero no a su hermana, y quedó impactado por lo que vio.
Guadalupe era una chica muy atractiva, como de un metro sesenta, ojos negros, pelo negro, y un cuerpo impresionante, las tetas eran enormes y bien paradas, el culo tenía el tamaño justo, ni grande ni chico.
En ese momento Pablo no pensó que todas las cosas que habían pasado por su cabeza en el instante de conocerla se iban a hacer realidad.
El grupo de jóvenes se presentó, hablaron un rato y decidieron ir a ver la primera película.
Se sentaron un en cómodo sillón del lado derecho estaban Pedro y su novia bien juntos, no podían sacarse las manos de encima, siempre pasaba lo mismo, es como si estuvieran calientes las 24 horas del día, del lado izquierdo estaban Pablo, en la parte de más afuera, y Guadalupe, por supuesto no tan juntos como los otros dos, pero tampoco muy separados porque el sillón no era muy grande.
Empezó la película y todo comenzó a calentarse muy rápidamente, la película era de acción y tenía mucho sexo, muchas mujeres y hombres con poca ropa, Pedro recorría con sus manos el «inmenso» cuerpo de su novia, Yanina era petisita como su hermana, pero a diferencia de ella era más bien gorda, también tenía unas tetas muy grandes, pero no tan paradas como las de su hermana tres años menor, Yanina tenía 23 años, su culo era bien grande, el pelo rubio teñido, y los ojos marrones.
Pedro también era algo gordo, era alto (1,80), pelo castaño claro, y con sus grandes manos no paraba de masajear las gigantes tetas de su novia.
Pablo miraba de reojo lo que hacía su amigo, pero no quería llamar la atención, lo que si llamó su atención fue como Guadalupe casi no miraba la película por mirar como su hermana era toqueteada y besada por su novio, en ese momento Yanina empezó a tocar también, primero fue el pecho de su novio y después fue el miembro semi erecto de Pedro.
Eso hizo que los dos «invitados al espectáculo» se sobresaltaran y dirigieran su mirada al televisor.
Pero solo fue un instante, ya que los movimientos que hacían llamaban la atención y ni Pablo ni Guadalupe pudieron dejar de mirar cuando Yanina le sacó la remera a Pedro y Pedro hizo lo mismo, dejando a la vista de todo el sostén de Yanina que estaba a punto de estallar por la fuerza de esas enormes tetas.
En el momento que Yanina desabrochó el pantalón de Pedro y metió una mano adentro, él le dijo que mejor se iban, que ya era demasiado espectáculo el que estaban dando a su hermana menor.
Se fueron los dos enamorados calientes dejando solo a Pablo y a Guadalupe. Pablo era un chico normal, ni lindo ni feo, de estatura normal (1,70), ojos verdes, pelo castaño oscuro, ni gordo ni flaco, y muy tímido, está era su oportunidad de hacer algo con la hermana, pero su timidez no se lo permitía.
Se acomodaron un poco en el sillón, Guadalupe tenía puesta una pollera cortita, una remera con cierre adelante que tenía bastante cerrada y botas casi hasta la rodilla.
Después de acomodarse Guadalupe dijo que tenía un poco de calor y se abrió un poco el cierre dejando ver un poco su brasier y también parte de sus preciosas tetas.
Pablo se moría de ganas chuparle las tetas, pero su timidez no se lo permitía.
Después de mirar un rato la película, escuchar todo tipo de ruidos y gemidos provenientes de la habitación de los padres de Pedro y haber tomado bastante cerveza, Pablo se levantó para ir al baño.
Al pasar por la habitación en la que su amigo y la novia cogían desde hacía más de media hora vio que la puerta estaba un poco abierta pero no miró.
Fue después de salir del baño cuando se detuvo a mirar un poco, y vio como Yanina le chupaba la pija a Pedro, justo en ese momento cambiaron de posición y Pedro se puso atrás, al principio Pablo no se daba cuenta por donde se la estaba cogiendo pero enseguida notó que no era por el culo, estaba realmente caliente, verlos cogiendo lo había excitado mucho y se estaba tocando un poco sobre el jean que llevaba puesto, en ese momento se dio cuenta que Yanina lo estaba mirando y le hacía señas de que entre, a Pablo se le fue la timidez de golpe y entró, Pedro seguía con lo suyo, Yanina agarró a Pablo de una mano y lo acercó bien al borde de la cama, le tocó la pija por encima del pantalón y le dijo que tenía algo muy grande ahí y que se la quería chupar, Pablo miró a Pedro como pidiendo permiso y su amigo le dijo que haga lo que quiera, en menos de un segundo y sin que Pablo se diera cuenta Yanina ya le había bajado el cierre, el pantalón y estaba a punto de agarrarle el miembro, Pablo para estar más cómodo se desvistió todo de la cintura para abajo, Yanina ya estaba chupándole el pene, que había tomado un gran tamaño, Yanina se lo estaba chupando muy bien, le masajeaba los huevos con una mano, le chupaba la pija desde la base hasta el glande, le recorría todo con la lengua y después se lo tragaba todo, se estaba metiendo 24 cm en la boca, y el grosor también era imponente, Yanina verdaderamente estaba disfrutando eso pero Pablo lo disfrutaba más, cuando Yanina se dio cuenta que Pablo iba a acabar se lo sacó de la boca y le pidió a los amigos que cambien de posición pero le pidió a Pablo que se la cogiera por el culo, no era la primera vez que él hacía algo así, primero le metió un dedo, después dos y le untaba por todo el ano los jugos que salían de su vagina, después empezó a jugar con la cabeza de su pene en el ano y en la vagina, todavía no la había penetrado pero Yanina gemía como loca, por el comportamiento de su amigo Pablo se dio cuenta que no era la primera vez que compartía a su novia ya que hacía todo con mucha naturalidad.
Pablo ya estaba listo para penetrarla, le habló por primera vez desde que había entrado a la habitación y le dijo que se la iba a meter despacito, pero la puta de Yanina pidió todo de un golpe, Pablo primero le metió la cabeza y se acomodó para de un solo golpe meterle los 24 cm en el culo, Yanina gritó de dolor, le había dolido en serio, Pablo metía y sacaba con fuerza y rapidez, en un minuto Yanina cambió los gritos de dolor por gritos de placer, Yanina ya no le chupaba la pija a Pedro, solo disfrutaba con una enorme pija en el culo, Pedro se masturbaba frente a la cara de su novia, y estaba a punto de acabar, a Yanina le chorreaban sus jugos por las piernas, estaba teniendo un orgasmo por la cogida que le estaba dando Pablo, él le avisó que estaba por correrse y ella le pidió que lo hiciera dentro suyo, y Pablo lo hizo, explotó dentro del culo de la novia de su mejor amigo, Yanina estaba sintiendo como una enorme cantidad de leche la llenaba.
Al mismo tiempo Pedro le llenaba la cara de leche y Yanina le limpiaba la pija sin dejar una gota sin chupar, Pablo le sacó la pija del orto y mucha leche salió y chorreo por el cuerpo de Yanina, ella se dio vuelta y le limpió el pene a Pablo con su lengua.
Nadie se había dado cuenta, pero Guadalupe había visto gran parte de lo que había pasado desde la puerta de la habitación, cuando todos la vieron tenía una mano adentro de su tanga y se estaba tocando. Yanina se sentó en la cama y dijo «entra Guadalupe, quiero que Pablo te desvirgué con su pijota».
Pablo estaba sorprendido pero muy contento, quería tener a las dos hermanas al mismo tiempo. Yanina se levantó y dijo que se iba a lavar, que comiencen a jugar un poco pero que la esperen a ella para seguir. Ahora la tímida era Guadalupe, entonces Pablo dio el primer paso, se acercó a ella y le comió la boca de un beso, lo que hizo que Guadalupe se estremeciera y se dejara llevar por «su amante».
Pablo la recostó en la cama mientras la seguía besando con pasión, después por primera vez puso una de sus manos en las tetas de Guada, ella no decía nada, tenía los ojos cerrados y parecía disfrutar cada una de las cosas que Pablo le hacía. Pedro, desnudo, se acercó a ellos y empezó a desvestir a su «cuñada», primero las botas y luego la mini, Pablo ya le había bajado el cierre de la remera dejando el corpiño al descubierto y se preparaba para chuparle las tetas, cuando Guadalupe sintió el contacto de los labios de Pablo con sus tetas abrió los ojos, parecía sorprendida, como pudo se desabrochó el brasier y se lo sacó, para estar más cómoda y que Pablo pudiera hacer lo suyo mejor.
Pablo paró por un segundo, se dio vuelta y su amigo ya se estaba masturbando viéndolos, le sonrió con complicidad y siguió con Guadalupe.
La besó por todo el cuerpo hasta llegar hasta la pequeña tanga, la bajó muy delicadamente y se la tiró a su amigo, quien la agarró, la olió y la siguió usando para masturbarse.
Como Pablo se lo había imaginado, Guadalupe tenía la vagina totalmente rasurada, primero pasó su mano y sintió una suavidad que nunca antes había sentido, luego comenzó a comérsela a besos, y a pasarle la lengua muy suavemente por sobre los labios vaginales de Guada, ella comenzó a emitir los primeros gemidos, muy tímidos, casi no es escuchaban al principio, pero con el correr de los minutos y la excitación fueron más fuertes.
En ese momento Yanina volvió a la habitación decidida a dirigir la primera cogida de su hermana menor, le ordenó a Pablo acostarse boca arriba y a su hermana a sentarse en el pecho de él lo suficientemente cerca de su cara como para que Pablo le pueda chupar la conchita virgen y rasurada.
Enseguida los dos acataron la orden, y Yanina se puso a chuparle la pija a Pablo mientras Pedro desde atrás se la cogía muy despacio.
Al cabo de unos minutos todos llegaron al orgasmo, primero fue Guadalupe entre gemidos y gritos de placer que tenía el primer orgasmo producido por un hombre, después fue Pedro y enseguida y casi al mismo tiempo Pablo le acababa en la boca a Yanina y ella tenía un orgasmo producto de la cogida de su novio y de que ella se masturbaba como loca, metiéndose hasta tres dedos en la vagina.
Guadalupe cayó como agotada en la cama boca arriba, Pablo no la dejó descansar y se le acomodó encima, quería cogerla ya, la besaba y le tocaba las perfectas tetas, le dijo voy a penetrarte, a lo que Guada respondió con un si rotundo, Yanina dejó por un segundo de besarse con su novio para decirle a Pablo que sea delicado que su hermana nunca se había metido nada en la vagina.
Pablo le aseguró que iba a tratarla muy bien, entonces Yanina solo se dedicó a su novio, y a ser cogida otra vez por el culo mientras vigilaba lo que pasaba con su hermana.
Como la preciosa conchita de Guadalupe estaba bien mojada por el orgasmo anterior y toda la excitación que no había parado, Pablo no tuvo que esperar mucho para penetrarla, primero jugó un poco con la punta de su pene en el clítoris de Guada, con una mano le abría la concha para llegar mejor al clítoris, luego de un minuto comenzó a meterle la pija, muy despacio hasta que hizo tope con la virginidad de Guada, quien gemía de placer y se quejaba muy poquito del dolor que le producían los 24 cm de Pablo entrando en ella, él se acomodó mejor para poder metérsela hasta el fondo sin hacerlo de golpe para no producirle mucho dolor, Pablo lo estaba haciendo muy bien, Guadalupe casi no sentía dolor, solo placer.
Yanina felicitó a Pablo por el trabajo que estaba haciendo pero le dijo que la desvirgara de una vez, y Pablo otra vez le obedeció, aunque le costó quebrar esa barrera lo hizo, y muy de a poco pudo meter toda su pija en Guadalupe, espero un momento, la sacó casi por completo y la volvió a meter muy despacio otra vez, siguió así un rato, de a poco fue acrecentando el ritmo, Guadalupe gemía de una manera impresionante, parecía poseída por el placer, no tardó en tener el primer orgasmo producido por la cogida que Pablo le estaba dando, casi enseguida llegó el segundo, Pablo estaba dando lo mejor de sí, aceleraba y frenaba el ritmo de meter y sacar para alargar su orgasmo y producirle muchos a Guadalupe, hasta que le avisó que iba a correrse, Guadalupe le pidió que lo hiciera adentro suyo, Yanina le dio «permiso» ya que tomaba pastillas desde hacía unos meses.
Guada abrió las piernas lo más que podía, Pablo se acomodó y mientras la besaba en la boca, comenzó un mete y saca impresionante hasta acabar dentro de Guada quien gemía y gritaba por otro orgasmo que Pablo le producía, Pablo también gemía y acababa como nunca lo había hecho, no paraba se salirle leche de su pija, era tanta que comenzó a salir de la estrecha pero flexible vagina de Guadalupe.
Pablo cayó sobre el cuerpo de Guada muerto de cansancio por lo que acababa de hacer, la besó otra vez y se acostó boca arriba al lado de Guadalupe, y al mismo tiempo pudo ver como Pedro otra vez le acababa en la boca a Yanina.
Guadalupe estaba cansada, pero se notaba que había disfrutado muchísimo lo que había pasado recién, todavía estaba con las piernas un poco abiertas y tenía la conchita muy mojada, por sus líquidos y por el semen de Pablo que se había derramado.
Pedro salió un momento de la habitación, y volvió con dos botellas, una de vodka y la otra de whisky, Yanina se «apoderó» de la de whisky, y Pablo del vodka, luego se las fueron pasando y todos tomaron un poco de cada una, pero no demasiado, solo para tomar energías para seguir cogiendo.
Yanina derramó un poco de vodka sobre el cuerpo de Pablo e invitó a su hermana a lamer toda la bebida, entre las dos no dejaron nada de vodka, Pablo estaba excitadísimo, tenía lo que quería a las dos hermanas para él, ya que Pedro se había ido a dar una ducha.
Las dos chicas estaban dedicándose al falo de Pablo, estaba durísimo, brilloso por la saliva de las chicas que al chupar al mismo tiempo la misma pija sus labios y sus lenguas se rozaban, Pablo les pidió que se besaran apasionadamente y las hermanas obedecieron, y de qué manera, un beso perfecto, las tremendas tetas de las chicas de apretaban, Pablo se unió al beso, se puso entre medio de las chicas, lo sentía de maravilla eso, cuatro enormes tetas lo apretaban, dos chicas lo besaban al mismo tiempo, las dos chicas se besaban entre si mientras lo tocaban por todo el cuerpo.
Mientras Pablo transaba con Guada y le masajeaba las tetas, Yanina se acomodó frente a él y ella sola se metió el gran pene de Pablo en el ano, el muchacho que había sido tímido no hacía nada, todo el movimiento lo hacía Yanina moviendo su culo grandote para darse placer. Pablo comenzó a jugar con sus dedos en el ano de Guada, lo cual parecía no molestarle a la chica ya que lo seguía besando cada vez con más pasión.
Pablo le pidió a Yanina cambiar de posición, Guadalupe se puso a chuparle la pija, Pablo le pidió a Yanina que le lamiera un poco el ano a su hermana porque se la quería coger por el culo.
Antes de correrse en la boca de Guadalupe, Pablo pidió otro cambio de posición, Yanina se acostó boca arriba, arriba de ella su hermana, y mientras se besaban con mucha pasión, Pablo comenzó a meterle la pija en el dilatado ano de Guada, su hermana había hecho un gran trabajo y a Pablo no le costó mucho meterle la pija, aunque le dolió un poco al principio, Guada casi no se quejó, como lo había hecho cuando la desvirgo por la vagina, Pablo comenzó despacio y de a poco fue acrecentando el ritmo, mientras las hermanas no dejaban de tocarse y de besarse, Pablo agarró a Guadalupe de las tetas, el ritmo era perfecto, los huevos chocaban contra la conchita de la hermana menor, quien no tardó en tener un orgasmo. Guadalupe le pidió a Pablo que acabara porque ya le estaba doliendo mucho, es que hacía un rato que la estaba cogiendo en la misma posición, pero Pablo aguantaba lo más posible para disfrutar más cuando le acabara adentro del culo. Pablo accedió al pedido, y en menos de un minuto le llenó el culo de semen, cada vez que Pablo sacaba un poco la pija, le salía leche de ano a Guadalupe que le chorreaba junto a sus flujos por las piernas hasta legar a su hermana que estaba debajo suyo.
En ese momento Yanina también tenía un orgasmo producto de toda la excitación y del movimiento arriba suyo.
Los tres se levantaron como pudieron, estaban exhaustos de tanto coger, y se fueron a darse una ducha todos juntos, cuando entraban al baño Pedro salía, pero volvió a entrar porque no quería dejar pasar la oportunidad de hacer algo con su «cuñadita».
Como pudieron se metieron en la bañadera, Yanina abrió el agua, que estaba apenas tibia, todos jugaban y se tocaban entre sí, se enjabonaban uno al otro, pero Pedro parecía más dedicado a su «cuñada», y lo que hacía era más que enjabonarla, la apoyaba desde atrás con su pija semi parada, le apretaba los pezones, le pasaba una y otra vez las manos por la vagina, y por último le daba besos en el cuello, Yanina vio lo que pasaba y le dijo a su hermana, chúpasela que está muy caliente con vos, pero fue Yanina quien comenzó a hacerlo, Guadalupe le dio un gran beso a Pedro en la boca y se arrodilló a seguir con el trabajo que había comenzado su hermana mayor, Pedro estaba en el cielo, mientras su novia le lamía el ano y le metía algún dedo, Guada le chupaba la pija, le estaba dando una gran mamada ya que lo hacía con más facilidad que con Pablo por el menor tamaño de la pija de Pedro que no llegaba a los 17 cm y tampoco tenía el gran grosor de la de su amigo. A Pablo le llamó la atención como Pedro disfrutaba de lo que Yanina le hacía y no dejaba de mirar como ya le había metido dos dedos por el culo.
Pedro lo miró y le preguntó, ¿querés probar?, a lo que Pablo respondió con un rotundo NO, luego Pedro dejo a Pablo perplejo, le dijo, ¿querés que te la chupe? Pablo ni respondió a eso, solo agarró a Guadalupe por la cintura, de un golpe y desde atrás le metió la pija en la vagina, se la estaba cogiendo de manera violenta, pero a Guada parecía gustarle ya que gemía como podía porque tenía la pija de Pedro en la boca. Pablo estaba haciendo eso para demostrarle a Pedro que no pensaba tener contacto con él.
Luego de unos minutos Pedro acabó, Pablo también provocándole un orgasmo a Guadalupe, los chicos y las chicas terminaron de bañarse, se secaron entre sí y se dirigieron a la cama en la que todo había comenzado.
Camino a la habitación Pedro le pidió perdón a su amigo, le dijo que cada tanto le gustaba «jugar» un poco con hombres, Pablo que dijo que estaba todo bien pero que no volviera a hacerlo.
Se acostaron todos en la cama y prendieron la televisión, Pablo estaba entre las dos chicas, y a un costado de Yanina estaba Pedro, las chicas cada tanto le tocaban la pija a Pablo, parecían adictas su gran pija, no podían estar dos minutos sin verla o tocarla y no dejaban que se le bajara del todo, estaba todo el tiempo semidura.
Luego de descansar media hora, Yanina y Pedro coincidieron en que ya había sido suficiente descanso, y Yanina dijo lo que quería hacer, «quiero que me cojan por el culo y la vagina al mismo tiempo, y vos Guada sentate arriba mío qué te chupo la conchita». Todos obedecieron, cada uno tomó la posición que Yanina quería, Pablo se la cogería por delante y Pedro por detrás.
Pablo se acomodó lo mejor que pudo para no tocar a su amigo, pero igual había algunos roces que no le molestaban. Los cuatro gemían, Yanina gemía a los gritos, era la primera vez que probaba eso y la estaba pasando mejor que nunca.
Pedro se corrió rápido, Pablo tardó un poco más pero antes de correrse se puso frente a las dos hermanas y les acabó en todo el cuerpo, era increíble que después de tantos orgasmos todavía le saliera tanta leche.
Antes de que Pedro acabara Yanina tuvo tres orgasmos casi seguidos provocados por la terrible que cogida que le brindaban los amigos, estaba excitadísima, y el placer que había sentido según ella misma dijo no creía volver a lograrlo jamás.
Pedro dijo al grupo que eran casi las cinco de la mañana, que los padres seguros llegaban cerca de las seis, dijo que se iba a dar una última ducha e iba a comenzar a ordenar todo para que los padres no notaran que en su casa se había dado una orgía, Yanina dijo que lo ayudaba, en cambio Pablo y Guadalupe decidieron darse una última cogida.
Los dos chicos que comenzaron la noche tímidamente ya cogían como amantes súper experimentados, se acomodaron en un 69 para comenzar, Guadalupe no tardó en tener otro orgasmo más, quien sabrá cuantos tuvo esa noche, ni ella misma seguramente.
Pablo se acostó boca arriba y Guada fue introduciéndose la pijota en su conchita muy mojada de a poco hasta que entró toda, comenzó a moverse de arriba abajo mientras Pablo le tocaba las tetas y le masajeaba el clítoris, Guada parecía toda una experta pero la verdad era que esa misma noche la habían desvirgado, no tardó en tener otro orgasmo pero siguió subiendo y bajando hasta que sintió como Pablo la llenaba de leche como ya lo había hacho varias veces en la noche, otra vez sentía como los «disparos» de Pablo golpeaban en su interior.
Con la pija chorreando todo tipo de líquidos Pablo se arrodilló en la cama y le dijo a Guadalupe que se pusiera en cuatro, la chica obedeció y Pablo comenzó a cogérsela casi sin tener que «jugar» con su ano ya que estaba bastante dilatado por todo lo que había cogido por allí en toda la noche, Pablo quería tener dos orgasmos seguidos a pesar que ya había tenido muchos durante la noche.
Con la pija bien dura se la metía y se la sacaba rápidamente y con facilidad por todos los líquidos que derramaban ambos, cambiaron de posición, otra vez Guada sentada sobre Pablo pero con la pija en el culo, otra vez subía y bajaba pero haciendo menos recorrido que antes pero con más velocidad, la chica de las tetas grandes y paradas no paraba de tener todo tipo de orgasmos, Pablo estaba prácticamente bañado en los líquidos de Guada y en transpiración pero no podía llegar a otro orgasmo, le pidió a la chica que se la chupara y se la masturbara con fuerza, Guada se metía un buen pedazo de pija en la boca, con una mano le hacía una paja y con la otra le masajeaba los huevos, Pablo la agarró de los pelos y le movía la cabeza un buen ritmo para poder acabar, cuando estaba por acabar le metió la pija lo más adentro de la boca que pudo y la mantuvo así mientras la leche le salía, en menos cantidad que antes pero no era poco, cuando dejó que Guada se levantara pensó que se iba a enojar con él pero solo se dedicó a limpiar todo el semen que salía y a mirarlo a los ojos con cariño, le había gustado lo que Pablo había hecho.
Cuando terminó le dijo «tu leche es sabrosa» a lo que Pablo respondió «vos sos muy sabrosa» y se fundieron en un gran beso, a Pablo poco le importaba que ella tenía semen en la boca, disfrutaba de cada momento porque sabía que era difícil de repetir una noche así.
Se quedaron dormidos por unos minutos hasta que Pedro los despertó, ya casi eran las seis de la mañana y no habían limpiado nada de la habitación, se levantaron, se ducharon rápidamente y no hicieron nada más, aunque les costó mucho ducharse juntos y no tener más sexo.
Se vistieron, ayudaron a terminar de ordenar todo y Pablo acompañó a Guada hasta la casa, ya que Yanina se quedaba a dormir en la casa de su novio.
Durante el camino seguían los cariños entre estos dos desconocidos hasta el día anterior, intercambiaron teléfonos y ambos prometieron seguir esta relación que apenas comenzaba, ante todo seguir con el buen sexo.
Hay más historias de los cuatro chicos, juntos o por separado, y con más gente sumándose a las fiestas.
Y con más sorpresas para Pablo, pero eso lo dejo para otra historia, otro título.