No se cuantas veces más me cogieron, hasta la mañana seguían, perdí la cuenta. Por ahí alguno se despertaba para ir al baño y aprovechaba para cogerme y seguía durmiendo la mona.
Descapulló la pequeña verga y lentamente y con mucho amor se la introdujo en la boca. Mientras chupaba el glande, con dos dedos masturbaba el pene y con la otra mano jugaba con los huevos dentro del escroto.
Al mediodía llame a Laura si tenia algún problema de pasar este fin de semana juntas, como buena amiga , su no te preocupes voy para allá, me calmo, cuando la jornada estaba en su meridiano no me extraño su llamada desde mi departamento (ella tiene llave) a partir de ese momento estaba segura que algo se nos ocurriría , entre dos es más fácil.
Después de acariciar los pechos tiró de los pezones con fuerza lo cual hizo gritar a la mujer y retorcerse en el columpio.. El negro no hizo caso y continuó con sus toqueteos.
Antes de subir a mi piso llame a mi vecina, que me presto un pantalón y una camisa, guardando mis ropas sucias en una bolsa, me preguntó que había pasado, yo solo la pude decir que había sido maravilloso, que mañana la contaría, prometiéndome ella contarme que tal la había ido con su chico.
Cuando Diego salió del vestidor me sorprendió, no se que habrá pensado pero como la bata le llegaba a la altura de los muslos, pude ver que no traía pantalón ni calcetines. Eran las piernas. Más peludas que había visto.
Ella esperaba que la suspendieran pero tal fue la sorpresa cuando su profesor le da unas pequeñas palmaditas bien dadas en sus nalgas, para que aprenda que no se debe copiar lo que le produce muchísimo placer.
La idea al principio me dio un poco de risa, pero después ella dijo que cuando los hombres lo hacen por primera vez son tremendamente dóciles y hacen todo lo que tu les digas, y además tienen una gran energía para realizar cualquier actividad sexual, termino la charla de café y me fui a mi casa y estuve pensando en lo que esta mujer había dicho y que me había dejado tan intrigada.
Me miró y yo le asentí. Movió su miembro cerca del ano de Mar, rebozándola contra sus nalgas y por los labios de su coño, para a continuación abrirlo y de una manera suave, limpia, entrarla completamente. Este movimiento hizo que Mar volviera a tensar sus piernas al mismo tiempo de separarlas más y emitir un sonido casi de admiración.
De la palma de la mano que acariciaba la vulva se separó el dedo corazón que se dedicó a castigar el clítoris. Pronto la niña estaba lista para otro orgasmo pero de pronto todo se paró. Las manos que la hacían tan feliz abandonaron su cuerpo y aquel orgasmo que estaba a punto de disfrutar se desvaneció y esto no le gustó.
Al preguntarse por su situación recordó que iba de camino hacia el instituto y de pronto una mano con un pañuelo le tapó la nariz y la boca y ella peleó para liberarse pero no lo lograba. Esto es lo último que recuerda. Su cuerpo se estremeció al constatar que estaba secuestrada. Instintivamente de cubrió con la manta
Cuando estaba totalmente limpio Linda volvió a tomar a MinLi y recostándola en el sofá abrió sus piernas y comenzó a comerla chupando sus labios y atrapando su clítoris haciéndola retorcer de gusto. Yo las observé mientras recuperaba el aliento tras tan explosivo orgasmo que me habían causado esas dos bellas mujeres.
Ante esta situación me sucede bastante seguido que me caliento y mi polla enseguida se queda erecta, a tal punto que una noche tuve que ir al baño y masturbarme violentamente. Error de mi parte, no era el lugar indicado. Ya lo se. Cuando termina la hora, salgo de la escuela rumbo a mi casa y me encuentro con un alumno que amablemente me ofrece a llevarme en su moto.
Elisabeth regreso a la casa de invitados. Era tarde y la habitación estaba silenciosa. Este ultimo acto y lo pasado durante la noche la habían dejado turbada y decidió darse un baño caliente. Estaba tumbada, con los ojos cerrados, permitiendo que el agua le relajase. El agua caliente sobre su piel termina por relajarla a fondo y distraídamente se lleva la mano hasta su pecho
Kim tenia un porte atlético, no había terminado la secundaria y presentaba antecedentes de haber consumido drogas, MinLi tenía una figura muy femenina, con curvas pronunciadas en su cuerpo, su rostro era muy dulce y de aire tímido, había acabado la secundaria y era servicial y hogareña, según los antecedentes, y en destacado respecto a su Estado: VIRGEN. No quise pensar más y me decidí por ella.
La obediencia y sumisión de todas las hembras es absoluta, ya que ante la más mínima desviación la aplicación de correctivos psíquicos y castigos físicos es implacable. Estos se desarrollan en una sala especial, dotada de los más apropiados y sofisticados aparatos, como de potros y sistemas de suspensión, así como de todos los instrumentos necesarios e inimaginables.
Seré cortés y servicial con mi amo. Cuando él decida, compartiré con otros mis habilidades y conocimientos, si él considera que esto le va a causar placer. Seré paciente con las sumisas nuevas que mi amo quiera que ayude a entrenar.
Creí que no lo haría, porque nunca me lo mama después de metérselo, pero estaba irreconocible, lo tomo y lo mamo, como loca, estaba fuera de sí. Lo que siguió no lo podía creer, el más alto le retiro la verga de la boca, y se acomodó detraes de Andrea, ella le dijo; -no, así no. No te preocupes, si te lastimo, me dices. Le toco los labios de la vagina, que se veían empapados, le metió dos dedos, junto a la verga del otro cabrón, y Andrea se movía como loca, le tomo la mano y se la empujaba, para que entrara más.
El azote es el castigo corporal más común. Consiste en golpear una o más veces las nalgas (nalgada), ya sea con la mano (palmada), con un instrumento o con la pelvis, denominado también "azote" o "disciplina" (cuerdas anudadas, látigo, vara, cinturón, fusta -fustigar-, flagelo -flagelación-). El azotado puede ser el mismo que aplica el castigo, que desea infligirse daño a sí mismo por razones sado-masoquistas (sexuales).
Y la solté. Ella dudo un momento pero se miró a su amiga y al verla de rodillas con el chocho depilado y mojado por el agua, si inclino y arrodillo. Yo no me lo podía creer, la polla me presionaba tanto los pantalones que me dolía y solo con verlas a ellas dos de rodillas, una blanca con el culo al aire y otra negra en braguitas casi me corro. Pensaba que era el tío más afortunado del mundo pero no sabía si podría con las dos, así que pensé que tenía que desgastarlas un poco o quedaría muy mal.
Al llegar a su casa, sin decirle nada la tumbe boca abajo en el sofá y se la metí hasta el fondo, la sensación de su coño caliente y las bolas dentro me provocaba un placer infinito, pero estaba dada y yo quería algo más estrecho así que le saque las bolas chinas y le metí el consolador de un solo golpe, al momento ya tenía mi polla en su culo y ella gemía y se revolvía con rabia. Yo le decía: -Joder guarra como me pones, eres la más puta y viciosa que conozco y tu coño sucio me proporciona gran placer.
Me da muy fuerte, muy rápido, por más que me quito, me encuentra, me saca el aire y casi no puedo concentrarme para atender a mi propia mamada de tanta chupada y lamida que me da, he sabido que las chicas levantan las caderas casi ahogando al incauto romeo, pero yo trato de rehuir el contacto, al tiempo que agradezco no ser tan hábil como para hacerlo.
No sé si se lo esperaba o que pero la cuestión es que se sacó la bata, se quedó desnuda, saco un pote de aceite de un cajón y empezó a ponérselo por todo el cuerpo, no solo por los pechos o la barriga sino por todo el cuerpo, pude observar con claridad cómo se restregaba por las piernas, el culo, el coño, la barriga, los pechos, la espalda y los brazos y todo ello lo hizo sin dejar de mirarme nunca a la cara, yo empecé a sudar así que decidí ponerme la ropa de deporte para que luego mi mujer no se diera cuenta.
Entonces yo le dije que se arrodillara y me la chupara. Ante esto, hizo una cara de no querer y entonces apreté mi pija contra su ano pretendiendo metérsela, entonces accedió a mi pedido y arrodillándose ante mí comenzó a chupármela. Al principio lo hizo tímidamente pero luego lo hizo mucho mejor hasta que acabé en su boca.
Le he mamado en múltiples ocasiones la polla a mi marido, a él como a todos los hombres, yo creo, le gusta que se la chupen, nunca me ha gustado que eyaculen en mi boca y las pocas veces que lo ha hecho he tenido que salir corriendo a escupirlo todo. ¿Querrá hacerlo en mi boca?, no, no quiero, si me lo pide le diré que no, pensaba mientras comenzaba a introducir su sexo en mi boca y a subir y bajar la cabeza rítmicamente, mientras se la sujetaba con mi mano derecha.
Me acerco a ella, y me pongo a bailar a su lado, cuando aprovecho al mismo tiempo para lanzarle pequeñas miradas de desafío o de señal de que me he fijado en ella... disimuladamente, saco la lengua y dejo entrever la bolita fluorescente de mi piercing en la lengua. La verdad es que da un poco la nota, mis mechas rubias, mi bolita verde fosforescente en la lengua...
Esta noche se encontraba súper sexy, su dueño llegaba con un hombre duro que no conocía. Estaba asustada porque hablaban de una deuda que tenía su amo y sometida a su poder se convertía en su juguete.
Después de unas cuantas horas, Entraron 5 chicas al cuarto, todas vestidas con cueros negros, botas y todas como las recetaba el doctor, muy bien formadas, una de ellas era la que había aparecido antes en el cuarto, sus formas se resaltaban aún más con el cuero. El cuarto se ilumino por completo y su nerviosismo aumento.
Directamente nos dirigimos a una habitación, yo todavía estaba algo amodorrada por el cercano despertar del sueño y el alcohol, de lo contrario me hubiera preguntado a mí misma que hacía con un hombre casado, de unos 50 años, en una habitación desconocida, en una casa desconocida, dejando que me tumbara en la cama, que me quitara los zapatos y que se pusiera a darme un masaje en los pies.