El mejor polvo de Amorina

Fue Amorina la que finalmente contó lo que era un secreto a voces, me reconforta escribir estas líneas y al mismo tiempo recordar su cara descargada de la tensión, más cuando se enteró que todas conocíamos cómo se llevaba con el padre, su cuerpo perfecto estaba en ese instante como reflejando el goce que ella sentía en este amor incestuoso.

«Ya hacia tres años que se me había iniciado en el sexo, fue mi padre, quién al verme totalmente pasiva en mi primer relación, directamente me cortejo y me llevó a gozar del sexo, fueron muchos días los que busque y nos buscamos para estar juntos, pero aprovechando que mi madre fue a lo de la abuela, nosotros nos fuimos como pareja, perdiéndonos dentro de la marea de gente en los boliches de San Telmo, parecíamos turistas, al llegar al Hotel, un hotel Internacional que no hace muchas preguntas, yo tenia 18 años, mi cara era aniñada, mi padre había encargado un champagne rosado bien dulce como siempre me gusto, quizás fue eso, esa copa que actuó como disparador de mi desenfreno, nos duchamos juntos cuando me empezó a enjabonarme empecé a sentir mis flujos en mi vagina, sintiéndolo dentro a su falo apoyando su ingle en mis cachas entre en esa lubricada cueva, me apoye instintivamente con mis brazos en la cerámica y el chorro de su semen entro en mi cuerpo, ese fue el principio, al tomar la segunda copa mi calentura se juntó con mi total desinhibición, jugando con esa barra dentro mío, hacía ejercicios para un lado y otro, hasta recibir esos chorros que hipersensible sentía en las paredes de mi vagina, un deleite indescriptible, un entre y saca infernal montada sobre él en cuclillas, me dejo sin fuerzas, ya separados me dormí besándolo, toda la noche soñé con él, a la mañana lo sentí que se fue al baño y al llegar devuelta a la cama, fui yo, pense que tenia que seguir, estaba envuelta en ganas sexuales, volví para mamarlo, poco a poco se fue poniendo erecto su falo lamiéndolo, envolviéndolo con mi lengua, saboreaba ese instrumento, el se revolcaba de placer, pidiéndome que jugara en cuclillas, eso hice una vez más, su cansancio era proporcional, a su cara de alegría, era nuestra primer noche en un hotel, juntos como amantes, como pareja, nunca podré olvidar esa noche, esa fue la vez que más goce no solo por la cantidad, sino por las ganas que ambos teníamos, otras veces hemos repetido las salidas, pero me quedo con ese día, solo al recordarlo, mojo mis bragas en líquidos y me dan ganas de llamarlo para que me penetre en la ducha, arriba de el, mamarlo, gozarlo, es mi amante, es mi padre, es único, fue el quién me rescato de los estúpidos que acaban y se van, fue y es mi mejor amante, hacedor de mi mejor polvo»

Amorina, todos sabemos de tus andanzas con tu padre, tus goces, pero no sabíamos que habías llegado a ser su amante viajando con él, noches enteras, creíamos que todo era a la disparada, mintiendo ambos para pasar un buen rato, verdaderamente tienes un gran problema, se ve que estas enamorada de tu propio padre.

Pero entre todas creo te podremos ayudar, ahora que lo has contado, estamos más cerca de salir, ya te has confesado y si bien por ahora gozas, el tiempo va a correr, sin lugar a dudas encontrarás algún chico que te haga sentir el sexo, como lo que eres, una Diosa.

Dentro de carriles normales, fuera de este fuego, que creíamos más débil.