La madura que me volvía loco en la playa nudista

Hacia tiempo que iba a esta playa nudista de la capital tinerfeña, solo para ver a una mujer de aproximadamente 45 años, muy bien de cuerpo, unas tetas blancas (se notaba que hacia poco que empezó a hacer nudismo) grandes y muy bien puesta para su edad, con unos pezones rosaditos, culo firme, chocho depiladito haciendo un triangulo con pelos.

Yo soy alto 1.85, moreno d piel (no hago nudismo), ojos marrones, pelo castaño de puntas, ni flaco ni gordo 70 Kg.

Y todo empezó fumándome un cigarro y ella me pidió uno (después de tantos días loco por ella, me habla sin yo atreverme a decirle nada) le di el cigarro y empezó a hablar conmigo mientras nos fumábamos el cigarro, me habló que estaba separada y el porque se había separado, estaba con su hijo que se fue antes de la playa porque había quedado con la novia.

Entonces le pregunté que si se quería bañar conmigo, me afirmó con la cabeza y fuimos al agua, había muchas olas y con el disimulo le toque varias veces las tetas, una de las veces se dio cuenta y me dijo que le había echo daño, con todo el valor del mundo le pregunté que si quería un masajito, me dijo que si, pero que si mi novia era celosa???, le dije que no tenia novia y me dijo de ir mas para lo hondo porque la gente nos podría ver, empecé a manosearle los pechos, los pezones los tenia duro por lo fría que estaba el agua, ella se subió rodeándome con las piernas por la cintura, en ese momento se me empezó a poner dura, ella me dijo que por qué no hacia nudismo, le dije que me daba vergüenza, me dijo déjame ver que tienes ahí escondido, me bajó los pantalones y los slip y me cogió la verga, con cara de asombro me dijo:

– No se por qué no haces nudismo, porque para tu edad estás muy bien dotado, mi ex-marido la tiene mucho mas pequeña y menos gruesa…

Me empezó a hacer una paja mientras que yo le tocaba los pechos, bajé a la entrepierna y empecé a tocarle el clítoris, ella me susurraba al oído que hacia mas de 13 años que no era penetrada y que se moría de ganas…
miré a la playa y solo quedaban 2 ó 3 parejas, eran las 20:30, me dije a mi mismo, esta es mi oportunidad, ella seguía con los pies en mi cintura y le quité mi rabo de su mano y ella me miró, le dije:

-Lo siento, no me la toques mas..

-pero,… ¿qué te pasa? – me dijo

– no me la toques porque ahora la vas a sentir dentro -le respondí

Sonrió y se la intente meter y me era difícil(y eso que estábamos en el agua), la verdad que se notaba que hacia tiempo que no era penetrada, parecía que era virgen, poco a poco se la fui metiendo hasta que entro toda, ella suspiró y dijo que por qué no me había pedido el cigarro antes, que la follara hasta que amaneciera…

-ahhhh, …., ummmmmmmmm, que grande la tienes…

-sigue, fóllame como quieras, mientras que yo seguía con el mete y saca… le pregunté que si el culo de ella era virgen, estaba cachonda y me responde:

-siiiiiii, pero desvírgamelo, el cabrón de mi ex la tenia muy pequeña y se corría rápido y nunca disfruté, ahora lo estoy haciendo por todo lo que no he gozado en mi vida, estoy dispuesta a ser desvirgada por ti…

Se la saqué del chocho y se la fui a meter en el ano y no le entraba, se la metí otra vez por el chocho y le empecé a meter un dedo en el ano, ella gemía…

-ahhhh, jódeme, fóllame, no te corras nunca para estar follando toda la vida…

Mientras me decía esto le metí el 2º dedo en el ano, ella dio un grito dolor-placer, yo me viré y ya no había nadie en la playa, le dije -vamos para la orilla que ya no hay nadie, me dijo si me follas por el culo si…

Fuimos nadando y se acostó en la arena, la abrí de piernas y le metí la verga por el ano, ella grito, le dije te duele???
me dijo si, pero sigue que estoy cachondísima, había tenido ya 4 ó 5 orgasmos, me la seguí follando por el culo un buen rato y le dije me voy a correr, me dijo pues métemela en la concha que quiero sentir tu semen  dentro de mi concha, dicho y echo, se la metí por el chocho(ahora si entró fácil), después de 4 mete-saca me corrí, ella por lo visto también porque grito muy fuerte, quedamos agotados en la arena, al rato nos vestimos y me dijo que ahora tenia que coger un taxi, le dije que yo la llevaría, que tenia moto, me dijo que vale.

Cuando llegamos a la casa me dio su número de teléfono y yo le di el mío, mañana quedé con ella para ir a la playa, pero eso es otro relato.