Hace mucho tiempo iba caminando por Santiago, y de pronto encontré a un chico, que estaba siendo golpeado por otros más grandes que él, yo me metí en la pelea para defenderlo, no sé por que lo hice pero debe haber sido por que se veía muy indefenso, eran dos tipos que lo golpeaban y yo desobedeciendo completamente a mi sensei comencé a golpear a los tipos que veían que no iban a poder conmigo.

Cuando me acerque hacia el chico que tenia como 17 le pregunte si estaba bien y me dijo gracias por ayudarme y yo le pregunte que por que razón lo golpeaban y él me dijo que siempre se aprovechaban del para sacarle dinero y yo le dije:

– por que permites eso

y él me dijo:

– por que o si no me golpean y hoy no traía el dinero suficiente y por eso me golpearon

Lo ayude a pararse y ahí comenzamos a hacer una bonita amistad.

Después él me dijo que en que lugar estudiaba karate y yo le dije y el también se inscribió en mi dojo y yo como en ese tiempo era cinturón azul era superior que él así que de vez en cuando me tocaba enseñarle algunas cosas, un día nos quedamos ambos solos en el dojo practicando (el realmente se esforzaba mucho) y mi sensei (profesor) me dijo vaya estas muy bien, practicando mucho y yo le conteste que quería subir de grado y sensei me contesto tengo que salir pero si quieres puedes seguir entrenando yo te dejo las llaves y tu después cierras todo, eso si que tendrías que venir mañana temprano a dejarme las llaves antes que yo habrá el dojo y yo le dije gracias sensei por confiar en mi y nos despedimos.

Mientras nosotros Cristian y yo seguimos entrenando un buen tiempo más hasta que el cansancio nos derroto y nos tendimos ambos en el suelo que esta alfombrado con rafla (es de esos pisos japoneses tradicionales) y con el silencio que había en el lugar lo único que se oía eran nuestras agitadas respiraciones y luego solo se sentían las mías hasta que hubo un silencio total.

Después sentí un impulso y me acerque a Cristian que tenia los ojos cerrados (ya anteriormente lo había besado sin que el se diera cuenta por que estaba dormido) y comencé a hacerle cariño en su rostro y su cabello lo cual luego comenzó a transformarse en pasión y lo bese y Cristian abrió los ojos y me correspondió el beso que le había dado después seguí besándolo, lamiendo y mordiendo su cuello y seguí bajando hasta su pecho y este me dijo que haces y le conteste que no te gusta y el me dijo continua…

Así que comencé a desabrochar su kimono y sacarle los pantalones y comencé a besarle el abdomen mientras le tocaba su verga por encima de sus boxers (que no estaba nada mal para la edad que tenia 17) y Cristian estaba muy excitado.

Comencé a bajar sus boxers y luego tome su pene y lamí su glande como si lo hubiera hecho siempre después baje por su pene hasta llegar a sus testículos y los lamí con mucho deseo, tenia a Cristian por las nubes, después no aguante más y me saque los pantalones junto con los boxers y me puse en 69 y le dije a Cristian quieres probar y este engullo como hambriento.

Mientras yo estaba en lo mío hasta que comencé a meterle un dedo por su ano y Cristian se retorció de la ola de excitación que le cause y al sentirlo, sentí que me venia así que me di vuelta y lo puse en cuatro, escupí con saliva su culo y comencé a penetrarlo lo hice muy bruscamente por que estaba demasiado excitado además era mi primera vez y Cristian grito salvajemente por el dolor que le cause y le corrieron las lagrimas después comenzó a gozar con la embestida que le estaba dando mientras seguía penetrándolo y a besarlo por el cuello y le dije que lo amaba mucho hasta que me corrí dentro del, y este se salió para probar un poco de mi leche y comenzó a mamármela exquisito después ambos fuimos bañarnos y continuamos en la ducha.

Tuvimos una relación de un año pero el se fue a EE.UU. con sus padres y nunca volvió a verlo.