Síguenos ahora en Telegram! y también en Twitter!

Los pesares de Giulia

No sé si grité ni cuanto grité, pero esa sensación de dolor desapareció y esa esfera tocó mi punto G y me hizo colapsar en un orgasmo bestial, no sabía si moriría o me volvería totalmente loca, jamás en mi vida me había corrido así de fuerte, aún ahora tengo escalofríos al escribir sobre ello.

Primera vez con un perro

Un día apareció un pastor alemán de unos dos años por el barrio donde yo vivía, siempre fui muy amigo de los perros y rápidamente no convertimos en buenos compañeros de juegos, incluso le puse nombre, Capitán, al que el obedecía como si siempre lo hubiese tenido.

Mi Darky

Hace apenas unos meses que inicié en el fascinante mundo de la zoofilia con ayuda de un amigo muy especial -a quien le tengo mucho cariño y siempre le estaré agradecida- y de Darky, mi pastor alemán -a quien le tengo aún más cariño...