Mi negocio se había fundido y debía ya dos meses de alquiler y ya no sabía que hacer, por que no me alcanzaban las horas del día para trabajar y reunir el dinero que necesitábamos. Un amigo me comentó que yo podía obtener buenas sumas de dinero pero tenía que dar algo a cambio.
Después de su marcha, llené el bloc con bocetos de su rostro, que me había quedado grabado a fuego, en todas las formas posibles: seria, sonriente, visto desde la derecha y la izquierda. Ninguno me satisfacía. Eran sus facciones, desde luego, pero carentes de algo que se me escapaba.
Continua el fin de semana, nuestras protagonistas están todavía muy calientes y con ganas de seguir follando.
Fui y golpeé su puerta, me atendió vestida con un conjunto pijama de pantalón largo y chaqueta, en ese momento no sé si fue mi imaginación o una premonición de lo que vendría pero creí ver, por la forma en que colgaban sus tetas bajo el pijama
Llegar y encontrar a tu chico desnudo y caliente... qué gran oportunidad para gozar ambos de una relajada pero intensa sesión de sexo...
Un joven, recién separado de su pareja, se encuentra con una gorda muy caliente que desea ser follada por el primero que se lo pida.
En la playa se hacen buenas amistades, como le ocurre a nuestro protagonista que acaba gozando por igual de madre e hija, a cual más caliente y fogosa.