Maestra caliente

Maestra caliente

Yo soy estudiante de biología, y estoy seguro que nunca olvidare la clase de fisicoquímica, cuando entre al salón de clases me sorprendí mucho, ya que la profesora que ya andaba pasando los treinta era muy guapa, pero lo que mas llamó mi atención es que tenia unas nalgas enormes y bien formadas, extrañamente al seguir el curso del semestre siempre había tenido diez en todos los exámenes, a pesar de que todo el tiempo me la pasaba soñando con poder jodérmela por detrás..

El semestre por fin termino sin mucha emoción, sin embargo ese día (por mis buenas calificaciones) la profesora me había invitado a su laboratorio para ayudarle con una investigación, cuando llegué al laboratorio ella estaba mas sexy que nunca, traía una bata blanca desabrochada y debajo un vestido azul muy corto, me saludo y fuimos a observar una muestra al microscopio, cuando se sentó cruzo las piernas dejándome ver uno de sus hermosos muslos, ella hablaba de algo pero yo no la escuchaba, solo pensaba en acariciarla, ella ya lo había notado y quiso saber el motivo, yo dude, pero al fin dije -sus piernas me están volviendo loco- ella no dijo nada, solo tomó mi mano y la puso suavemente sobre su rodilla.

El contacto con su suave piel hizo que de inmediato mi verga se pusiera tan dura que me dolía yo… ¡no podía creerlo! Ella comenzó a mover mi mano sobre su suave muslo cachondo, solo la mire con ganas de metérsela en ese instante, entonces se subió el vestido y me llevo hasta su cosita entonces tome confianza, ahora el control era mío, le metí bien adentro mis tres dedos haciendo a un lado su tanga rosa que ya estaba muy mojada, ya cuando estaba apunto de venirse la puse de pie, desnudándola completamente mientras frotaba su cuerpo con el mío, ella me quito la camisa, le ayudé con el pantalón, yo estaba recargado en una mesa del laboratorio, creo que se sorprendió un poco al verme, porque siempre he sido un chico atlético, no aguanto la tentación y mordiéndome el pecho froto su cosita con la mía, ambas estaban ardiendo ya, debió gustarle mucho porque se la metió bien adentro de un solo golpe (yo sentí que me venia).

No resistí mas, quería que me la chupara ya y separándome de ella la conduje por mi abdomen ella seguía lamiendo y mordiendo hasta que sus labios rozaron mi glande y en una reacción espontánea la chupo, primero se fue metiendo la punta y después toda, ella comenzó a subir y bajar moviéndose como loca parecía que hubiera sido fuertemente estimulada por un potente neurotransmisor fue el placer mas grande que halla tenido jamás, estuvo así un rato hasta que ya me iba a venir recordé que aún me faltaba hacer realidad mi sueño, (follarla por detrás) así que la separe de mi cosa la cual no quería soltar.

Limpie una mesa tirando todo matraz y tubo de ensayo, la subí, yo también me subí y gentilmente la puse en posición, con su enorme culo hacia mi.

Entonces yo de rodillas separe sus carnosos y empapados labios y le metí solo la punta, la tome con fuerza de la parte superior de sus nalgas, la jale hacia mi y le la metí toda de un golpe como ya sabia que le gustaba así seguí jalándosela, sacándosela y metiéndosela, ver y sentir el choque de sus glúteos tremendos contra mi pelvis resulto mucho mas placentero que en mi sueño.

Ya cuando se estaba viniendo gritaba difícilmente porque no podía respirar, era un ha,,,,, ha! Ha, ha…..que estremecería a cualquiera, tal vez por esto yo también tuve uno de los mejores orgasmos de mi vida.

Espero poder hacer pronto una nueva visita al laboratorio.