La gran experiencia de su primera vez con una mujer
Te quería contar de mi primera experiencia con una mujer.
No se como quedara, pero tratare de ser lo mas clara posible.
Esto me sucedió poco tiempo atrás.
Nada hacia presagiar que mi yo interno me dijera que mis gustos estaban dirigidos hacia personas de mí mismo sexo.
Tenia mis amigos, pero ninguno me atraía como para pensar que me enamoraría de alguno de ellos.
Varias de mis amigas, tenían sus novios, pero a mi no me quitaba el sueño tenerlo.
Esto, no sé si por que estaba demasiado ocupada en mis estudios o simplemente no me había dado cuenta de ello.
La verdad es que, con tanto estudio a veces me daba por salir a caminar otras veces me iba a casa y escuchaba música o bien me iba al cine a ver alguna película en alguno de los cines locales.
Cierto día, caminaba por el centro de la ciudad, y me di a mirar la cartelera de un cine. La película parecía interesante.
Compre mi entrada e ingrese. Aun no comenzaba. Las luces estaban encendidas por lo que me di a buscar una butaca para ver cómodamente.
Al rato las luces se apagaron. Primeramente empezaron a mostrar comerciales.
En la fila en que me encontraba, no había nadie más. Hacia adelante había por lo menos tres filas y hacia atrás otras tantas que estaban desocupadas.
Ya estaba por comenzar la película cuando se sentó una señora en la misma fila en que yo me encontraba. Se sentó un asiento mas allá de donde yo estaba.
Y puso unos paquetes entre ella y yo. Después de un rato cambio los paquetes de lugar y se sentó a mi lado.
Yo no le di importancia hasta que empezó a poner su brazo donde yo tenia apoyado el mío.
Molestaba en ese pequeño espacio tener las dos el brazo puestos el de ella y el mío.
La miraba de reojo por si sacaba su brazo, pero ella como si nada. Incluso me dirigió su mirada y se sonrío.
Yo estaba muy molesta así que la mire con seriedad. Justo tenia que ubicarse a mi lado, si más allá tenia bastante espacio para sentarse.
Con lo que me estaba sucediendo, casi ni me estaba preocupando mucho de la trama de la película.
Trate de prestarle atención a la película, cuando sentí que esta señora acercaba mas su brazo al mío. Ya estaba a punto de pararme y
cambiarme de lugar cuando sentí que su mano se acercaba a mi rodilla. Me miro y volvió a sonreír.
En realidad en ese momento, me sentí cohibida. No sabia como reaccionar.
Ella tendría unos treinta años o quizás 25 no la podía distinguir mucho por la oscuridad. Acerco mas su mano a mi rodilla y yo trate de alejarme hacia el lado opuesto de ella, pero ella se acerco mas a mí.
Ya luego, mirándome, acerco su mano sin mas y la coloco sobre mi rodilla.
Yo estaba tiritando de temor. Suavemente empezó a subir mi falda y tomo mi rodilla desnuda.
Empezó a acariciarla muy suavemente.
Su mano se dirigió hacia el interior de mi muslo. Sentía su mano caliente. La deslizaba muy despacio hacia mi entrepierna.
Yo estaba muy asustada y no había nadie a quien recurrir que se encontrara cerca.
Estaba temerosa pero tampoco tan, tan asustada.
Quería ver hasta donde llegaba la audacia de esta mujer para tocarme tan impunemente.
Me miro y me sonrió nuevamente.
Ahora paso su mano por detrás y rodeó mis hombros. Al tomarme por el hombro contrario a ella, hizo que me acercara a ella, y con su otra mano, tomo nuevamente mi rodilla y empezó a subir mi falda.
Acariciaba suavemente mi muslo y su mano llegaba ya a mi entrepierna. Yo me estaba empezando a sentir excitada ante semejantes tocamientos.
Su mano llega finalmente a posarse sobre mi gatito por encima del calzón.
Empezó a acariciarlo. Sus dedos expertos, sabían como hacerlo.
Yo miraba la película o trataba de mirarla, pero esos tocamientos lo hacían imposible.
De pronto su mano subió y se metió por entre el elástico de mi calzón y mi estomago.
Sentí su mano acercarse a la entrada de mi vagina. Revolvía mi matita de pelillos púbicos y acercaba su dedo medio a la entrada de mi vagina. Abrió mis labios vaginales y lógicamente se entero de mi humedad. Me miro y sonrío. Acerco su cara a mi oído y me dijo: ¡Acércate mas acá, mi amor!
No sé si me tenia hipnotizada o que, pero le obedecí y me acerque hacia ella.
Su mano rápidamente toma firmemente posesión de mi gatito.
Su dedo medio acariciaba dulcemente la entrada de mi vagina en ingresaba suavemente hacia el interior.
Los jugos de mi vagina hacían que su dedo entrara con mas suavidad. Me sentía transportada hacia otro mundo. Sus caricias me estaban haciendo cerrar mis ojos y apretar mis dientes para no exclamar ningún grito de placer.
Su otra mano bajo de mi hombro y se acerco hacia los botones de mi blusa. Los desabrocho y acerco su mano a mi seno izquierdo, sentía mi pezón duro, excitado.
Mi pecho estaba totalmente excitado, mi corazón estaba acelerado al máximo, por todo ello echaba mi cabeza hacia atrás y me sentía transportada a las más deliciosas sensaciones.
¡Levántate un poco! Me pidió esta extraña. Lo hice y al instante esta mujer, empezó a bajar mis calzones, luego los sacó de mis piernas y quede cubierta sin nada mas que mi falda.
Abría las piernas para que su mano acariciara mas profundamente en mi vagina.
Ya sus dedos llegaban a mi culito. Aprovechando que estaba totalmente mojada su dedo se dio a entrar por allí. Sentía como ingresaba sin mucho dolor.
La extraña no resistiendo mas, se hinco entre mis piernas y se dio a lamer mi gatito.
Su lengua era ardiente. Lamía como una experta. Me recorría entre mi vagina y mi ano. Puso mis piernas sobre sus hombros, lo que le dio mayor visión de mi gatito y culito.
¡Ooooohhhh. que manera de hacerlo…mmmmmhhhhh…..esta tan riiiicoooo…!
¡Lameme mas adentro! Le rogaba calladamente, para no despertar sospechas entre los demás allí en el cine.
Ella no se hacia de rogar y metía casi toda su lengua dentro de mi vagina. Chupaba mis juguitos con sumo deleite.
Se los devoraba.
¡Ahhhhhhggg. Lame… lame… lamelo…..mas….mas…..tomalo..tomalo….ya llega…tómalo…chúpamelo mas fuerte….aaaggggghhhhh……..uuuuuhhhhmmmmm!
Y quede totalmente exhausta, con mi gatito totalmente excitado y mojado.
Luego la extraña, arreglo mi vestido, se ordena ella, se levanto y salió del cine.
Espere unos instantes, y salí también de allí para encontrarme con ella, pero había desaparecido.
Y además se había llevado mis calzones.
Así que tuve que marchar sin ellos.
Muy bueno. Una auténtica experiencia muy bien contada-