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Mi hermana se acostó con mi esposo

Mi hermana se acostó con mi esposo

Esta historia que van a leer va a ser contada por mi hermana ya que ella fue una de las protagonistas de la misma junto con mi esposo hace ya como 5 años.

Por supuesto que me entere unos meses después y a pesar de eso me encanto y por lo tanto hoy le pedí a mi hermana que les contara la historia para que todos ustedes puedan disfrutarla tanto como yo.

Hola me llamo Agustina soy hermana de Marta, tengo el cabello castaño oscuro, mido 1,65mts. de altura y 95-60-92 son las medidas de mi cuerpo. Marta y Claudio están casados desde hace 6 años.

En sus primeros meses de casados en mas de una oportunidad me quedaba a dormir en su casa ya que trabajo a 6 cuadras de allí.

Normalmente alrededor de las 7PM yo llegaba a casa de ellos y podíamos conversar con mi hermana de nuestra vida y cosas de familia hasta las 8:30PM que llegaba Claudio del trabajo.

Todas las noches me bañaba antes de cenar ya que a mi me gusta hacerlo por las noches, después de eso más de una vez como me olvidaba mi camisón mi hermana terminaba prestándome alguno, el problema es que todos sus camisones son de seda y algo transparentes para ponérmelos delante de mi cuñado.

Con el tiempo fuimos perdiendo la vergüenza ya que la primera en soltarse fue Marta debido a que ella no tenía porque tener vergüenza ni de mi ni de su esposo.

Claudio también comenzó en mas de una oportunidad a quedarse en calzoncillos y remera, con lo cual yo me despreocupe de las transparencias de mis camisones.

Alrededor de las 9PM cenábamos los tres juntos y luego compartíamos algún juego de naipes o simplemente nos contábamos anécdotas laborales o personales, siempre me encanto y disfrute de conversar con ellos por largos momentos.

En más de una oportunidad me di cuenta que mi cuñado me miraba con más detenimiento mi cuerpo a través de la transparencia de mi vestimenta nocturna, lo sorprendí un día mirándome fijamente mis pezones que se notaban detrás de la fina seda de mi camisón.

Confieso que al principio me molestaba un poco pero termine acostumbrándome y hasta me gustaba que él hiciera eso.

Los días Lunes, miércoles y Viernes mi cuñado se iba al gimnasio hasta las 10PM por lo tanto en esos días aprovechaba con mi hermana a acostarme en su cama y mirar algún programa o película en televisión.

Cuando Claudio llegaba se metía en la cama con nosotros y terminábamos de ver la televisión los tres juntos, luego de eso yo me retiraba a mi cama en otra habitación a dormir.

Así como Claudio me miraba de una manera especial yo comencé a hacer lo mismo y descubrí que por el bulto que generaba su calzoncillo el estaba muy bien dotado.

En las noches en las que no me podía dormir tan rápido escuchaba como Marta y Claudio se hacían caricias y se daban besos hasta que esos ruidos se convertían en una pasión descontrolada en la cual escuchaba gemir a mi hermana y sentía el choque de sus cuerpos en pleno silencio nocturno hasta que acababan con sus orgasmos de una manera que me daba cuenta que esa situación me excitaba al notar que mi tanga se mojaba.

En más de una oportunidad estando todos demasiado cansados nos dormíamos los tres en la misma cama y mi hermana por supuesto en el medio.

Al día siguiente Marta como entraba temprano a trabajar se iba de la casa a las 7:15 hs. y tanto Claudio como yo salíamos a las 8:45hs recién para nuestro trabajo, por lo tanto nos quedábamos en la cama hasta las 8hs. que recién nos levantábamos para desayunar y cambiarnos para salir.

Cada vez que Marta se levantaba ella se ocupaba de que quedáramos bastante bien separados en la cama, a pesar de que ella confiara muchísimo en nuestra relación, pero por las dudas trataba de que no nos acerquemos demasiado.

Una mañana mientras Claudio se bañaba encontré que la puerta del baño estaba un tanto abierta, creo que lo hizo sin querer o no lo sé, pero la realidad es que mientras el se enjabonaba su cabeza y al estar con los ojos cerrados pudo descubrir su figura ya que la bañera tenía una mampara de vidrio transparente con lo cual pude confirmar que su miembro realmente era digno de desear.

La próxima vez que me quede a dormir lo hicimos los tres en la misma cama, Marta se levanto como de costumbre y la hora de siempre se fue a trabajar, era verano y yo tenía puesto un camisón de seda blanco muy transparente con una tanga cola less increíble para esa ocasión, en un momento me di vuelta y note entre dormida la presencia de Claudio que estaba muy cerca mío y al mirarlo note su miembro quizás más grande que lo normal.

Al rato comencé a sentir el calor del cuerpo de Claudio muy cerca de mí, su respiración se hacia notar en mi cuello hasta que al darme vuelta me encontré con su boca a punto de besarme, nos miramos y sin decirnos nada comenzamos a besarnos de una forma increíble.

Ya un poco tarde para arrepentirme de lo que iba a pasar a medida que nos besábamos comenzaba a excitarme y a sentir sus caricias en mi todo mi cuerpo.

Por momentos mi sensación era indescriptible, me olvide de donde estaba y con quien y me dedique plenamente a gozar.

Sin darme cuenta me saco el camisón y comenzó a besar y acariciar mis tetas, a tal punto que mis pezones comenzaron a pararse, con lo cual Claudio comenzó a mordérmelos y chupármelos de una forma que me encanto.

Nos abrazamos y besamos hasta que me subí encima de Claudio y comencé a cogerlo con todas mis ganas, mientras lo hacia, pensaba, te voy a coger como nunca lo hicieron…..!!!!, claro que el pensó lo mismo.

Me empecé a mover tratando de lograr sentir su verga desde su base hasta su cabeza sin que se saliera de mi concha, esto logro poner loco a Claudio y lo que hizo fue darme vueltas en la cama y subirse encima mío.

En ese momento por primera vez pude notar el tamaño de su verga y me asombro, tenia un tamaño que realmente nunca yo había visto, su cabeza era increíble y se veía como sedienta de sexo.

Decidí abrir todas mis piernas y entregarme toda por completo, con lo cual el comenzó a moverse y a chupar mis tetas con locura. Esto hizo que comenzara a acabar una, otra y otra vez, sinceramente hacia tiempo que no tenia tantos orgasmos y con tanto placer.

Ya cansada de soportar a mi cuñado encima y habiendo perdido la cuenta de mis orgasmos decidí comenzar a chupar esa impresionante verga, comencé agarrandola con mi mano y la chupe con mi lengua como si fuese un helado, pasaba mi lengua y me la metía en la boca, así sucesivamente hasta que paso lo esperado mi cuñado acabo dentro de mi boca y para complacerlo decidí tragarme toda su leche sin desperdiciar ni una sola gota.

Luego de semejante pasión y desenfreno nos bañamos y nos fuimos a trabajar, después de unos meses decidimos de común acuerdo una noche contarle esto a mi hermana.

Nuestra sorpresa fue que ella no se enojo y al contrario le encanto la idea de hacerlo juntos.

Pero estas nuevas historias las vamos a contar en otro momento.

¿Qué te ha parecido el relato?