Un e-mail muy cachondo

Esta historia me sucedió hace poco, para ser más exacta el sábado pasado, y todo partió por un mail… te cuento… Cuando mandé el relato del profesor de historia, recibí muchos mail interesantes y obviamente excitantes, especialmente uno de un tal keko, sus mail eran muy calientes, y siempre que los leía terminaba mansturbándome… en fin, un día me manda un mail preguntándome si me gustaba el sexo oral, anal, etc. yo le contesté que el sexo oral me encanta sobretodo sentir esa lechecita calentita cuando emana de esa fuente de virtud, pero que el sexo anal no es de mi total agrado, de hecho lo he hecho muy pocas veces, porque a parte de dolor, no siento nada más, todavía nadie me ha hecho acabar con el sexo anal, ni ha logrado que me excite con él, pero para que les quede más claro les mando el mail que me llegó y mi respuesta…

«keko escribió: mi excitante Carolina soy de Calama, te consideras una mujer liberal, te gusta excitar a los hombres y como te gustan en aspecto físico, me refiero a bien dotados. te gusta el sexo anal y bucal y porque? Chao espero tu ansiada respuesta. > > Siempre tuyo > > Keko , tus besos los recibí, muchas gracias espero más, y por favor responde a la brevedad.»

Mi repuesta fue: «Hola mi querido Keko, te cuento: me consideraba liberal,… hasta que tuve a mi hija, que actualmente tiene 3 años y medio. aunque debo reconocer que como estoy estudiando en la universidad, todavía me doy mis gustitos y lo paso re – bien, cuando puedo….. con respecto al sexo anal,… lo he practicado, pero no es completamente de mi agrado, todavía no encuentro al hombre que me haga acabar con el sexo anal… ahora bien, el sexo oral. ME ENCANTA… sobretodo el sabor a la lechecita calentita cuando emana de esa fuente de virtud que me gusta más todavía… también me gusta que me lo hagan (el sexo oral), aunque no me lo han hecho>muchas veces, pero en fin. >también me encanta excitar a los hombres, es genial cuando te piden que se los mames, o que los deje introducir su miembro dentro de una de mis cavidades….en fin creo que todo quedó claro, pero cualquier duda házmela saber. Ahora ya no te mando un beso, sino una genial mamada con una brutal acabada dentro de mi boca….. >Carolina. (Me calentaste… voy a tener que desquitarme con algo o alguien)»

En fin, ese día al responder el mail, quedé muy excitada, recordando las veces que había tenido sexo anal y las distintas partes en que había tenido sexo oral, ya que me encanta y lo hago donde sea, incluso lo he hecho en alguna sala de clases desocupada de la universidad, en el bus, en el cine, en una plaza pública, etc… y aunque me masturbé reiteradas veces, no era suficiente, justo ese sábado me vino a buscar un amigo que conocí a través de Internet, se llama Eduardo y tiene 35 años, en fin, nos fuimos a su casa, y aunque debo reconocer que mi intención no era acostarme con él, después que leí el mail y escribí la respuesta me calenté caleta, así es que cambié de opinión. Pasamos a comprar unos traguitos y algo pa’ engañar el estomago y cuando llegamos puso justo la música que me gusta a mí (rock de los 70’s), nos acomodamos, nos relajamos, ya que era la segunda vez que lo veía, pero me relajé rápidamente, conversamos, se acabó la música y puso unos videos de sus tocatas, pero fue super ad-hoc ya que nos quedamos a oscuras solo con el reflejo de la pantalla, me invitó a sentarme a su lado, comenzamos a besarnos, en realidad él me besó, pero con lo caliente que estaba, se lo di a entender rápidamente a través del beso que nos dimos, y lo mejor de todo es que entendió rápidamente..(por eso me encantan los hombres relativamente mayores), luego comenzó a descender por mi cuello con unos besos geniales, siguió descendiendo hasta llegar a mis pechos, los cuales ya lo estaban esperando con los pezones muy duros, comenzó a chuparlos como nadie me los había chupado antes y me hizo retorcer de placer, luego me desabrochó el pantalón y me los bajó de un sopetón, pero me dejó con la ropa interior, que para la ocasión y como te dije antes ya lo tenía pensado, era de encaje negro, comenzó a pasar su lengua sobre el calzón, a la altura de mi vagina, y me tenía realmente excitada, luego sin sacar el calzón, lo corrió hacia un lado y me abrió bien de piernas para poder oler y lamer a su antojo mi realmente humedecido chochito, su lengua era realmente experta y recorrió todo de arriba abajo, de lado a lado, de tope a tope, por dentro y por fuera, (me acuerdo y me mojo), quería que parara y me cogiera pero al mismo tiempo quería seguir sintiendo su lengua experta en los placeres del sexo oral, cuando me tenía realmente excitada hice que se sentara (estaba hincado frente a mi), comencé a besarlo entero (lo que más pude) luego le bajé los pantalones y todo… y comencé a mamársela, primero humedeciendo mis labios con su líquido, y luego, pasando mi lengua>sobre su linda y suave cabecita para ir reconociendo el terreno, hasta que me la metí poco a poco, entera en mi boca , mientras me introducía el pene en la boca él me apretaba la cabeza contra él haciéndomelo tragar todo y cuando sentía sus gemidos de placer, más me excitaba y más rápido se la chupaba, me hubiese encantado que acabara en mi boca, pero a cambio, hizo que me sentara sobre él, dándole la espalda (me encanta esa pose) y comenzó a moverse lentamente, y realmente lo sentía a tope, no sé si por la excitación o porque realmente el tipo se las traía, pero en fin, luego yo comencé a moverme circularmente mientras acariciaba mi clítoris, al parecer eso lo excitó mucho, porque comenzó a gemir, mientras me daba cachetadas en el culo y me decía cosas que hacían que me pusiera a mil, luego me movía hacia delante y hacia atrás rápidamente porque quería excitarlo (en agradecimiento a la chupadota que me dio antes), cambiamos de posición y me sentó sobre él, pero frente a frente, era genial poder ver su cara de excitación, ver la cara de un hombre excitado o escucharlo gemir o decir cosas excitantes me pone a 1000, así es que aumenté mi ritmo y tuve un orgasmo genial, el placer que sentí fue exquisito, al parecer se dio cuenta que yo había acabado ( y como no, después de todo el escándalo que hice), y me puso de costado para poder penetrar mi traserito, al principio le dije que no, pero supo convencerme diciéndome «esta noche te vas a entregar entera», me gusto el tono de voz con que lo dijo, pero fue muy difícil, ya que yo estaba super tensa, hacía años que no lo hacía por ese caminito (lo que a él le pareció genial), pero me acordé del mail que había recibido ese día y me relaje un poco para poder disfrutar, por lo que le propuse otra posición, le dije que a lo mejor era más cómodo si yo me hincaba y apoyaba mi pecho sobre el sofá y él trataba de penetrarme por atrás, resultó genial, al principio me dolió un poco, pero estaba decidida a seguir adelante y aceptar consecuencias, comencé a sentir el roce de la punta de su pene en mi trasero, buscando su objetivo, cuando lo encontró, comenzó a meterlo lentamente, pero con mucha fuerza, y mientras más le decía que me dolía, más fuerte lo hacía, hasta que me relajé por completo y mis gemidos comenzaron a ser solamente de placer, nuestros movimientos comenzaron a aumentar, nuestras respiraciones se hicieron más aceleradas, hasta que sentí unas embestidas que hicieron que me diera cuenta de que él estaba acabando, por lo que comencé a contraer mi recto para poder extraer toda su lechecita y no quedara nada en sus huevos, quería que me la diera toda, y lo conseguí, luego él cayo rendido sobre mi espalda, poco a poco fue saliendo, nos besamos, nos miramos y no pudimos contener una risa un poco nerviosa, luego nos abrazamos y nos quedamos sentados en el sofá, acariciándonos, y disfrutando de ese precioso momento. ahora añoro el día que lo podamos repetir. es que realmente me dejó satisfecha…