Capítulo 2

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Chabela II

Hace algunos meses les Conte de esta muchacha, caliente como hierro incandescente.

Después del evento de la sala, pasaron como 2 o 3 meses sin nada de acción; yo estaba totalmente sacado de onda.

Cada vez que intentaba ponerme cariñoso, ella me rechazaba, diciéndome que lo que había pasado era parte del pasado, que no quería que, por el momento, pasara de nuevo.

Ese «por el momento» me ponía loco.

¿Cuánto tiempo era ese «momento»? Pasaron varias semanas así, hasta que un día, me habla por teléfono, diciendo que tenia mucha tarea y que si podía ayudarla.

Yo, sinceramente no tenia muchas ganas, pero como siempre, el mandilón ahí va.

Llego a su casa y la veo sentada frente a la computadora.

La saludo, me siento a su lado y comienzo a dictarle mientras ella teclea.

Ella comienza a pasarme una mano por mi pierna, subiendo casi hasta tocar mi miembro por encima de la ropa; yo la detengo diciéndole que si su familia nos ve, estamos perdidos.

A lo que responde que estamos solos, que su familia salió de viaje, y que no regresan en 3 días.

Con que esto era ese «momento» de que hablaba. Me dice que siga escribiendo, que va a cambiarse la ropa que trae puesta.

Se ha metido a su recamara, yo he comenzado a alucinar con su cuerpo desnudo, sus grandes pechos descubiertos y su enorme trasero al aire.

Ha salido con un «babydoll» rosado, sin sostén y con un pequeño tanguita. Me toma de la mano, me sienta en la sala y se sienta sobre mi. Mi verga se esta poniendo super dura.

Nos besamos, mientras comienzo a meterle la mano por debajo de su babydoll, acariciando esos pechos que tanto me gustan.

Me saca de un tirón la playera que traigo y comienza a besarme el pecho, bajando por mi estomago, hasta llegar a mi pantalón, el cual abre, desesperadamente, mi pinga sale como resorte y sin mas se la mete a la boca.

Es una mamada deliciosa.

Cuando siento que ya no puedo mas, ella se levanta y sale corriendo hacia su cuarto, yo termino de quitarme el pantalón y quedando totalmente desnudo camino detrás de ella.

La he buscado en su cuarto, pero no esta, volteo hacia el de sus papas y ahí esta; recostada boca abajo sobre la cama de sus papas, sin mas prenda que un diminuto tanga.

Me acerco y comienzo a quitarle su tanga y a comerme sus nalgas, la volteo, y le introduzco mi lengua en su vagina, ella comienza a contorsionarse y a apretar mi cabeza contra su concha.

Ya no puedo mas, me incorporo, la abro sus piernas y la ensarto sin ningún miramiento hasta el fondo.

Comienzo a moverme, dentro-fuera, dentro-fuera, al tiempo que mis manos se asen de sus pechos.

Me recuesto totalmente sobre ella, continuando con el mete-saca, pero aprovechando esta posición para poder mamar su pecho.

Ruedo, quedando abajo, ella ha comenzado a cabalgarme a un ritmo increíble, mientras yo aprieto con un mano su pecho y con la otra sus nalgas.

Así continuamos hasta que alcanza un orgasmo increíble, prácticamente se acuesta sobre su espalda, poniendo los ojos en blanco y cae rendida sobre mi pecho.

Pero yo no he terminado, la volteo y la ensarto por detrás, mientras paso mis manos por debajo de ella, para asirla por la cadera.

En esta posición me ha quedado un botecito de crema al alcance, lo alcanzo y comienzo a untarle crema en el ano, en el siguiente movimiento, se la saco de la vagina y la ensarto por el culo.

Ella se ha quejado, ha intentado salirse, pero, apoyando todo mi peso sobre ella la he aprisionado contra la cama y, arrodillado sobre ella sigo penetrándola por el culo.

Ella se las a arreglado para meterse un dedo por la concha.

Yo siento que ya no puedo mas y, sacándosela, termino sobre su espalda.

Nos acostamos y me dice que la próxima vez tendrá que ser algo diferente.

Ya les contare que se me ocurrió.

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