Bruno, el jovencito seducido

Bruno, el jovencito seducido

Cuando me sucedió esto, todavía iba al instituto, tenía novia, aunque nunca habíamos mantenido relaciones sexuales, solamente darnos un beso a escondidas y poco más.

Yo era un chaval morenito, flaco y bien parecido, vamos que no soy ningún adonis, pero creo que no estoy nada mal, unas piernas bien torneadas, un culito pequeño y redondito, y eso sí, bien flaco.

La casa donde vivía estaba pegada al lado de la desembocadura del río Besós. Allí hay un parque público que pertenece a la zona pública de, parque fluvial del Besós.

En dicho parque hay zonas para pasear y hacer senderismo, carril bici, etc. Lo que supe después de lo que me ocurrió lo que voy a contar en este relato, es que, en la zona pública de dicho parque, se suele hacer cruising, cosa que yo hasta ese día desconocía por completo, incluso desconocía lo que significaba dicho termino.

Aquel día, había ido a las 5 de la tarde a pasear por dicho parque. Al poco de estar paseando, con lo que me encontré me dejó flipando, había entre unos arbustos, 2 tíos follando.

No lo podía creer, joder, allí prácticamente a la vista de cualquiera, estaban 2 tíos follando. Uno de unos 45 años más o menos, le estaba dando por el culo a otro que parecía más joven, le calculé alrededor de unos 29 o 30 años.

Me quedé allí mirando, viendo como el más mayor, le daba por el culo al más joven, hasta que pude ver que ellos se dieron cuenta de mi presencia.

Dios, me estaba poniendo palote viendo aquel espectáculo, pero al ver que ellos se habían dado cuenta de mi presencia, me aparté un poco, pero sin perder de vista como le estaba dando por el culo el más mayor al más joven.

El caso es que ellos sabían que yo los estaba viendo, y no pareciera que les importara, más bien parecía que aquello les agradaba por lo que incluso se colocaron de manera que pudiera verlos mejor. Ahora podía ver cómo le enchufaba la polla por el culo, joder era como si quisieran seducirme, y que fuese a participar con ellos.

Al ver aquello no me pude aguantar,

Por lo que, bajándome el pantalón, me puse a pajear. Ellos al verme pajear, me hacían señas para que fuera a participar, incluso el que le estaba introduciendo la verga por el culo, se colocaba dejándome ver como se la metía, el cabrón me estaba seduciendo, veían a un jovencito muy apetecible, y querían seducirme y que me uniera a ellos.

El caso es que al final después de el ofrecimiento que tan insistentemente me hacían, acabé allí delante de ellos.

Al ver que habían conseguido seducirme, cuando estuve delante de ellos, no sé cómo ocurrió, pero el caso es que estaba sin pantalones y bóxer, inclinado, notando como el mayor de ellos, me estaba comiendo el culo.

Ellos al tenerme allí delante, no perdieron tiempo, mientras uno me comía la boca, el otro me fue despojando de toda la ropa.

Empezó bajándome los pantalones que ya tenía medio desabrochados por estar pajeándome, viendo como follaban, luego de sacarme los pantalones junto a las zapatillas deportivas, me quitó el bóxer, quedándome de cintura para abajo, completamente desnudo.

Me hicieron reclinar un poco, ofreciéndome el más joven la polla que se mostraba dura y con el capullo totalmente hinchado y enrojecido, y mientras empezaba a chupar una polla por primera vez en mi vida, el mayor de ellos llevaba su lengua a mi culo, empezando a comerme el ojete.

Dios, que sensación al notar como me estaba comiendo el ojete aquel cabrón, no podía hacer nada más que retorcerme de gusto, notaba su lengua hurgar en mi orificio anal, haciéndome retorcer de gusto.

Mientras uno me comía el culo y yo le chupaba la polla al más joven, este, fue tirando por mi camiseta, dejando mi espalda y torso al desnudo, hasta que terminó por sacarme por completo la camiseta, dejándola tirada junto al pantalón y bóxer, que antes me había sacado el mayor de ellos.

Cuando me vi liberado de la polla que hasta el momento estaba chupando, no pude aguantar más, teniendo que ponerme a gemir a causa del gusto que me estaba dando la lengua del que me estaba comiendo el culo.

¡Ohhh! ¡ooohhh! Gemía retorciéndome de gusto, viendo como mi polla tiesa a reventar, no paraba de soltar líquido preseminal.

Viendo como gemía y me retorcía de gusto, el más joven, agarrando su polla con la mano, me daba golpes con ella en la cara, diciéndome:

Te gusta, ¿eh maricón…? Mira cómo chillas y te retuerces de gusto.

Te gusta espiar y ver como follábamos, ¿eh?

Menuda putita que hemos encontrado, ya verás cómo disfrutas más con la follada que te vamos a dar, que estar de voyeur pajeándote, mirando como follábamos. Verás como lo pasas mejor así, pequeña zorrita.

Después de pasarme la polla por toda la cara dándome golpes con ella, habiéndome llamado de todo, sujetándome por la barbilla, me ordenó abrir la boca, y mientras yo obedecía abriéndola, este se inclinó un poco, soltándome un lapo cayéndome dentro de la boca. Así maricón, ahora chupa de nuevo, me decía metiéndome de nuevo el rabo en ella.

Bufff, yo estaba que no daba crédito a lo que me estaba pasando, de tener novia y no haber follado en mi vida, ahora estaba en medio del parque que había junto a mi casa, completamente en bolas, con una polla en la boca y otro tío comiéndome el culo, para seguramente darme lo que iba a ser mi primera follada. Me habían seducido, y ahora me iban a desvirgar dándome la primera follada de mi vida.

La verdad es que hasta ahora lo que me estaban haciendo, me gustaba. Me estaban haciendo gozar y disfrutar como jamás había soñado.

Estaba tratando de no abrirme en arcadas con la polla que estaba chupando, cuando de repente, siento como la polla del mayor que hasta entonces había estado lengüeteándome el ojete a la vez que iba metiendo sus dedos en mi orificio, como empieza a introducirme su polla por el culo, ¡ohhh! ¡ooohhh! ¡ooohhh ohhh! Empecé a gritar, notando cómo iba introduciéndome la polla por el culo.

Dios que sensación tuve al sentir como iba entrando aquella verga por mi culo, era algo extraño, noté como mi culo se abría dejando que aquella verga fuese entrando en mí.

Cuando me quise dar cuenta, ya tenía metida toda aquella polla en mi culo. Era la primera vez en mi vida que me daban por el culo, acababan de desvirgarme, y lo que había sentido no me había desagradado, al contrario, aquello me estaba gustando.

Ya maricón, ya la tienes toda dentro, decía el que acababa de desvirgarme. Así, así, ¡ohhh que gusto! ¡ooohhh que gusto! Gritaba empezando a mover mis caderas, haciendo que su polla se fuese deslizando dentro mía.

Ufff, maricón que culito más apretadito tienes, joder que gusto me da, decía empezando a bombearme como si fuese una marioneta, moviendo su pelvis a la vez que movía mi culo, tirando por mis caderas.

Yo que no lo podía creer, abría los ojos como si fueran a salirse de mis orbitas, sin poder dejar de soltar gemidos, mientras aquel maduro me estaba dando por el culo, por primera vez en mi vida.

Notaba como aquella verga que me estaba taladrando el culo, rozaba mi glándula prostática cada vez que se introducía en mí, haciendo que una sensación de hormigueo, fuese recorriendo todo mi cuerpo. Joder aquello se sentía muy rico.

Gimiendo de gusto mientras estaba siendo follado por el culo, el más joven de ellos, sujetando mi cabeza por las orejas, me estaba follando la boca a saco.

Metía su verga a fondo en mi boca, haciendo que me fuese cayendo las babas por la barbilla y comisura de los labios.

Tenía los ojos llorosos, notando como cada vez que tragaba aquel rabo, sus pelotas pegaban en mi barbilla, que no dejaba de chorrear las babas que me iban cayendo, y sus vellos púbicos, rozaban una y otra vez mi pequeña nariz.

Así putita, así, abre bien esa boca y traga, trágala toda, come polla maricón, come, gritaba metiéndome una y otra vez la polla en la boca.

Así me tenían aquellos 2 hombres, dándome rabo por el culo y boca, cuando de repente noto como el que me estaba dando por el culo, empieza a apurar más sus envestidas y siento como su verga empieza a llenarme el culo de leche, a la vez que gritaba que se corría, me corro, me corro, ¡ohhh que gusto! ¡ooohhh que gusto! ¡ooohhh ohhh! Gritaba dejándome preñado el culo de semen, por primera vez en mi vida.

Mientras se recuperaba de la follada que acababa de darme, dejando que su polla fuese saliendo poco a poco de mi recién estrenado culito, iba acariciando con sus manos mi vientre y abdomen, diciendo mientras recuperaba el resuello:

Dios que culito más rico tienes maricón, joder vaya follada, decía acariciándome el vientre y abdomen.

Nada más apartarse el mayor de ellos y dejar mi culo libre, el joven que me estaba follando la boca, sacando la verga de esta, se colocó detrás mía, y sin esperar nada, introdujo su polla por mi culo, volviendo a estar de nuevo y por segunda vez en mi vida, ensartado en una polla.

¡Ohhh! ¡ooohhh! ¡ooohhh ohhh! Gemí notando como volvía a ser sodomizado. Giré la cabeza para ver como el más joven de los 2 empezaba a culearme, cuando de pronto me fijé, que allí alrededor de los arbustos, había un corrillo de gente. Joder, había por lo menos 4 personas viendo como me follaban.

No sé el tiempo que llevarían allí, pero estaba seguro de que ya habían visto como el hombre mayor me había dado por el culo mientras el más joven me follaba la boca, y ahora estaban mirando como me estaba dando por el culo.

El más joven, nada más enterrarme la polla en el culo, empezó a follarme a saco, mi culo ya bien lubricado por la corrida que me había inyectado el maduro, facilitaba la penetración, además de que mi culo ya bien abierto tragaba aquella verga sin problema alguno, hasta se podía escuchar el sonido que producía su polla al entrar y chocar sus pelotas y pelvis en mi culo, chof, chof chof chof, chof, chof chof chof, cada vez que su polla entraba por mi culo.

Mi cuerpo se bamboleaba adelante y atrás mientras me daban por el culo, pudiendo ahora ver como aquellos que nos estaban mirando seguían allí viendo como me follaban y como gemía mientras estaba siendo follado. Tenía la polla que no dejaba de soltar líquido preseminal, dejándome la polla toda pringada y por las piernas me iba escurriendo parte del semen de la primera follada que me habían dado, mientras el hombre más joven no paraba de envestirme salvajemente.

Toma polla maricón, toma, toma toma, gritaba una y otra vez metiéndome la polla por el culo.

Este no aguantó tanto como el primero, y enseguida empezó a gritar que se corría, ¡ohhh! Me corro, me corro, ¡ooohhh que gusto! ¡ooohhh que gusto! ¡ooohhh ohhh! Gritaba descargando toda su corrida dentro de mi culo, dejándome preñado por segunda vez en mi vida.

Cuando este terminó de descargar todo su esperma dentro mía, dejándome preñado con su leche, sacando su polla de mi recién estrenado culito, me dio una palmada en el culo, diciéndome:

Buen culito maricón, te has portado muy bien putita, y allí me dejó, con el culo lleno de leche, caliente como una burra en celo y la polla que no dejaba de gotear líquido preseminal.

Viendo como un hilito de esperma caía desde mi polla al suelo de aquel parque, y viendo el grupito de gente que estaba haciendo corro desde los arbustos, viendo como me habían follado de nuevo, me giré poniendo el culo hacia el camino, a la vez que me ponía de rodillas a 4 patas, agachando la cabeza y pecho contra el césped, dejando mi culo en pompa, para que cualquiera de aquellos que estaban mirando, quisiera seguir follandome.

Y claro que quisieron y siguieron follándome, el primero en atreverse, fue un maduro de cerca de unos 60 años, que me dio una follada espectacular, luego pasaron 2 chavales jóvenes, que mientras uno me dio por el culo, el otro se corrió en mi boca, luego me estuvo follando un viejo que usaba bastón, luego lo hicieron 2 corredores, y por último me estuvo follando el basurero del parque, mientras otro chaval me pedía que yo me corriese en su cara, cosa que hice, cumpliendo su deseo.

Cuando por fin pude vestirme y salir del parque, iban dar las 9 de la noche. Había estado desde las 5 de la tarde cuando había ido a pasear, y ahora me iba para casa, con el culo reventado y desvirgado, con semen en mi culo y estómago. No había paseado nada, pero iba agotado como si hubiese participado en unas olimpiadas.

Por supuesto seguí acudiendo al parque aquel que había pegado a mi casa, volviendo a ser follado. Siempre hay viejos bien calientes que están deseando llenarme el culo y yo deseando ser preñado por ellos. Evidentemente dejé a mi novia, y me dediqué a lo que me gusta y atrae.

Esta es una historia real que me contó un joven lector de mis relatos, como me gustó y me dejó bien caliente, no dudé en escribirla y dejar que vosotros también disfrutaseis de ella. El relato lo he escrito como él me lo contó, solo que no he puesto el nombre de él, le he llamado Bruno.

Que envidia me dio cuando me escribió, relatando este encuentro sexual donde fue desvirgado, como me hubiese gustado ser yo el protagonista de esta orgía de nuestro joven amigo.