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Una pasión

Una pasión

Esta es una historia especial, apasionada, ni buena ni mala, solo una historia especial.

La primera vez, uno piensa en lo que va a recibir y pocas veces lo que va a dar, siempre se recuerda lo que sentimos cuando vamos a realizar algo por primera vez, el entusiasmo, los nervios, pensando en lo vamos a brindar y a recibir, como nos vamos a comportar.

En está historia pasa algo similar, hubo un acuerdo hablado, ambos expusimos lo que pensábamos.

Yo le dije lo que buscaba, y ella estuvo de acuerdo, le interesaba probar la propuesta.

Al principio no se si me interesaba que dijera que si, más bien esperaba un “no” como respuesta, era meramente miedo, miedo a lastimar a alguien que me interesa y que quiero.

La cosa es compartir pasión y amistad, nada más.

Yo soy un tipo que cree que hay ciertas cosas entre amigos que no pueden suceder, o mejor dicho no es bueno mezclar, pero como todo el mundo, a veces me equivoco. La vida esta hecha de momentos, y esto comenzó así, un momento.

Recuerdo bien aquella tarde, todo era un juego entre amigos, sentados en los almohadones sobre la alfombra, hablamos en un tono de compinches, ella me contaba sus cosas y yo las mías;

No se bien porque, pero me ponía de los pelos que ella se riera y no me dijera el porque, yo estaba en un estado de algarabía, alegre, y no le di mucha bola a lo que pasaba, me gustaba y eso era todo lo que me importaba, el momento.

Comencé a hacerle cosquillas, como para obligarla a que me dijera el motivo de su risa, además me gustaba sentirla, tocarla, así que forcejeo va forcejeo viene, la cosa es que se me fue la mano y terminamos revolcándonos entre besos y abrazos, ahora pienso que pude haberlo evitado, pero porque no pare no estoy seguro, creo que ambos queríamos probar más, ir más allá.

A ella hace un tiempo ya que la conozco y nos fuimos haciendo muy buenos amigos, pero ahora parece que había algo más,

Ella me parase atractiva, no tan obsesivo con lo físico, sino químico, tiene algo que me atrae como imán, ella es de contextura delgada, mediana, rubia mas bien castaña, de tez blanca, de buen carácter, recatada y algo seriecita, una mujer hecha.

En ella lo que vi es a una gran amiga, alguien a quien contar mis rayes, si bien reconozco alguna vez tuve fantasías con ella, pero nunca me había imaginado que podría llegar a concretar alguna con ella.

No me interesa estar en pareja, pero, si busco algo estable con una mujer, vengo del un noviazgo frustrado por la fatalidad, y tal vez halla creído que esconder mí corazón detrás de una aventura me ayudaría a seguir.

En síntesis lo que andaba buscando era una mujer con quien compartir lindas cosas, no estaba preparado para un nuevo romance, buscaba algo no furtivo, algo estable y sin compromisos, todo en un marco de respeto y amistad, no buscaba un deposito de semen, por así decirlo, sino alguien con quien compartir más que gratos momentos de placer, algo sin comprometerme demasiado, y si comprometer a la otra persona, como cuando salí con una mujer casada, Pero jamás se me hubiese ocurrido proponérselo a una amiga, menos a ella, bueno tal vez si, pero nunca me anime a poner en riesgo una buena amistad por una calentura.

Con muchas de mis amigas existió esa atracción, y jugamos, alrededor de eso, si bien creo, muchas veces esperaron que yo diera el primer paso.

Con Karem paso, casi, sin querer, si ese casi hubiese sido más fuerte no hubiese pasado, pero paso, no me arrepiento de lo ocurrido y ella tampoco, la cosa es que desde el vamos todo iba mal, al menos para mi, este matete rebotaba continuamente en mi cabeza, la primera vez fue un flash, luego de las cosquillas y los forcejeos, terminamos en la cama, esa noche no paso nada serio, sólo franela.

No se quien beso a quién, pero allí estábamos besándonos, acariciándonos en la cama, si bien estuvimos cerca de continuar a lo más serio, todo quedo allí, menos mal, porque sino si hubiésemos hecho cagada, pues yo no tenia con que cuidarme, así que lo dejamos para otra oportunidad.

La segunda vez fue diferente salimos y aproveche para plantearle lo que pensaba, no se si esperaba un si o un no de respuesta, sólo:

dijo “probemos”, para eso yo no sabia donde estaba parado.

No dijimos más nada, el viaje de regreso fue sin planificar ni comentar nada. La llegada, fue ir directamente a mi cuarto, nuestros cuerpos se unieron envueltos en besos y abrazos, nos tendimos en la alfombra y allí comenzó todo, mientras nos besábamos, las prendas fueron saliendo una a una, Karem quedo primero desnuda frente a mí, contemplar su cuerpo fue algo que me maravillo, como al niño que ve por primera vez a una mujer, tan blanca, tan suave, le costo un poco vencer su pudor. me dedique por entero a ella, acariciándola, besándola.

Descendí hasta sus pechos y los bese, pase la lengua lentamente por sus pequeños pezones, mientras acariciaba el otro, seguí bajando lentamente, hasta llegar a su sexo, haa!, la gloria, ella abrió un poco las piernas, y yo me dedique a darle placer, besar, lamer, su sexo me pareció delicioso, ese sabor agridulce, no se como compararlo.

Ella no tiene mucho vello, así que podía apreciar bien su cuevita, apenas una mata de vello castaño la cubría. No se cuanto tiempo estuve así, pero lo disfrute y seguro que ella también.

Nos recostamos en la alfombra, abrasados, ni una palabra interrumpió el momento. Luego fue el turno de ella, nos besamos y ella fue descendiendo lentamente, beso mis pechos, mi ombligo, hasta llegar a mi entre pierna, mi pene no estaba erecto aun, mi intención era dejarlo para después, tomarme mi tiempo para recorrerla, conocer y conquistar cada centímetro de su cuerpo, ella lo palpo e instantáneamente me produjo una erección, no dijo nada se lo introdujo en la boca y lo chupo lentamente, un espasmo recorrió todo mi cerebro, tuve una especie de orgasmo placentero, no acabe, aunque tenia ganas me controle, no se cuanto tiempo estuvimos así, pero se que fue bastante. La cuestión fue cuando nos metimos en la cama, seguimos con lo nuestro, ella ya estaba tan excitada que necesitaba más, hurgué, bese, lamí y chupe su sexo, ella estaba a mil pero yo necesitaba, quería en realidad estirar mas esos momentos, nos envolvimos en una gratificante sección de sexo y erotismo.

Luego nos bañamos juntos, nos reíamos por lo que asíamos, luego del baño de nuevo a la habitación, y dale que va,

Con ella encontré algo nuevo, no es lo que yo buscaba, pero se parece bastante, compartir nuestras cosas personales y tener nuestra intimidad, donde solo estábamos nosotros solos.

Con ella no todo es sexo, compartimos salidas también, paseamos mucho, encontré con quien compartir caminatas, gratas charlas.

Una vez no salimos a ningún lado y nos quedamos todo el día en mi habitación, no tuvimos sexo, solo acostados, besándonos, acariciarnos y dormir juntos, esa noche no me la olvidare jamás. Algo que me fascina con ella es su piel, blanca y tan suave, que con solo rozarme me atrae como un imán, motivándome a full, difícil de describir, algo químico según entiendo.

Las secciones de sexo oral con ella me apasionan, ella chupando mi sexo y yo el suyo, yo estaría horas haciéndolo, nunca le pregunte si lo hace por obligación o por placer, siempre sentí que no le gustaba mucho, pero a mi me encanta, me pone re loco, no le acabo en la boca por que no le gusta, pero me gustaría poder hacerlo algún día.

Muchas veces me pregunte, que piensa ella, o mejor dicho que siente ella con respecto a lo que estamos haciendo, raras veces creo que me engaña, engañarme en el sentido de que soy yo el único que le interesa mantenerlo oculto, no por que me avergüence, nada que ver, sino por mi estilo de vida, a veces siento que todo el mundo esta al tanto de que transamos.

A mi me gustaba recrear toda una fantasía al rededor nuestro.

Cuando estamos juntos me imagino estar en una cabaña, escuchar el agua golpeando la orilla, la brisa soplando, el sonido de los Árboles; la luna entrando por la ventana.

Me despierto aun medio dormido, abro los ojos y ella esta junto a mi, dormida, desnuda envuelta con migo entre las sabanas, me gusta contemplarla, prestarle atención a cada detalle de ella, acaricio lenta y suavemente su rostro, como para que no se dieras cuenta.

Es tan blanca y tan suave, que me fascina, a veces creo que es eso lo que me atrae de ella, pero como no hacerlo, si además es una gran mujer, aunque a veces tiene esos arranques de nena caprichosa.

No puedo creer que este a mi lado, su cuerpo tan tibio, su respiración tan suave, su perfume lo envuelve todo, todo el cuarto esta impregnado de ella; se da vuelta para acomodarse y aprovecho para abrasarla, parece dormida aun, me acurruco más a ella, coloco mi mejilla contra la suya, y compruebo que aun está dormida, su perfume me envuelve, es tan fresco y dulce.

Comienzo a besarla, tan suavemente, la mejilla, luego el contorno de su oído, parece gustarle, “¿que estará soñando?”, sus movimientos me erotizan, comienzo a acariciarte los senos, son tan suaves y tibios, escucho sus suspiros, me intriga saber si realmente estas dormida, siento una erección, aprovecho y coloco mi miembro en el surco de su cola, suspira mas aun, me muevo lentamente, en un vaivén muy lento.

Acaricio su panza y me entretengo con tu ombligo, luego hago lo mismo con su pubis, jugar con sus vellos, con sus labios, comienza a aparecer cierta humedad, fui metiendo mi dedo lentamente, como explorando, que placer!!, que hermoso, sentir esa suavidad, mezcla de humedad y calor.

Ella gira la cabeza, abre los ojos y me mira, sonríe y le doy un beso; el momento es lo mas lindo y acogedor. Extiende su mano por detrás y acaricia mi espalda, a la vez que contornea la cabeza, suspira y me da otro beso, mas apasionado que el anterior, su mano desciende y acaricia mis muslos, mientras que la otra toma mi mano, y la guía a su pecho, me muestra como acariciarla, en forma circular, despacio y ejerciendo cierta presión al completar el circulo.

Yo le beso el cuello y la oreja, la excita mi respiración en su oído, al menos eso es lo que creo. Se da vuelta y se coloca frente a mi me abraza, me besa, nos quedamos un momento así, disfrutando, luego me acaricia el lóbulo de la oreja y me la besa, realiza la misma operación que yo, y eso me pone mas al palo, me toma con su mano del miembro y comienza a masturbarme, lentamente, como para darme placer, la abrazo fuertemente y hago que mi miembro se coloque entre tus piernas, y lo froto contra su vagina, su clítoris a esta altura debe estar a mil, pues siento su corazón contra mi pecho, que golpea y golpea, sus suspiros me dan pauta de que estoy haciendo lo correcto, darle placer;

Con mis manos acaricio firmemente su espalda y voy descendiendo hasta su cola, como me gusta acariciarla, tan suave, tan redonda, tan…, como decirlo, tan placentero?, abro y cierro sus cachetes, los sujeto firmemente, suavemente, recorro con mis dedos el estrecho surco, rozo tu estrecho agujero y se estremece, continuo hasta llegar a tu sexo, y a la vez que me topo con mi miembro, la acaricio, separo sus labios íntimos, y acaricio su clítoris, gime y suspira, y lo hace mas aun cuando introduzco un dedo; las paredes internas se estrechan apretando a mi dedo, intenta hacer algo similar con migo y le introduzco mas aun el dedo, acariciando todo su interior, a la vez que le insinuó un segundo dedo en la entrada de su cola, suspira y me besa desenfrenada, hace que retire mi mano, se bambolea de un lado a otro, como buscando la penetración.

Mi mano vuelve a descender y la vuelvo a acariciar, mientras hago que sus labios se abran bien, las lenguas se entrelazan, como devorando; Respira hondo, se muerde el labio inferior, mi miembro comienza a abrirse camino, lentamente, en su interior, se la meto lo mas profundo que pudo y recién allí, comienzo a moverme, lentamente, como para disfrutar más. Seguimos así mientras nos besamos y nos acariciamos, ella mi espalda y hombros, yo su cola, como me gusta.

Me quedo quieto, se acomoda y se coloca sobre mi, y me cabalga, gime, suspira levemente y me dice cosas, cosas lindas, yo acaricio, beso y chupo sus pechos, y eso la pone más loca, parece que esta acabando, me doy cuenta por los gestos que hace, además su interior destila sus jugos a full. Yo estoy cerca también, entonces la acuesto boca arriba, y me coloco sobre ella, le froto mi verga por su vagina, el clítoris, trata de volverlo a introducir dentro suyo, yo se lo impido, me decís cosas, que no sea guacho, que se la meta.

Yo comienzo a besar sus pechos y voy descendiendo, por su panza, juego un momento en su ombligo, sigo mi camino y llego hasta su entrepierna, respiro sobre su vagina y rozó mis labios, le insinuó lo que me propongo y no lo hago, beso su piernas, te acaricio con mi lengua, la chuponeo un poco, la miro a los ojos y esta expectante, me quedo quieto un instante y…

Arremeto con mi cometido, comienzo chuponeando, luego hurgando con mi lengua, con ayuda de mis dedos tomo prisionero su clítoris, ahora es mío, lo beso, se lo lengüeteo, lo acaricio, y lo chupo, gime y suspira, dice cosas pero no le doy bola, yo sigo con lo mío, abro mas sus labios e introduzco mi lengua en tu interior, y hago lo mismo que antes, esta tan mojada que tengo la boca empapada, con mi pulgar sigo jugando con su clítoris, además aprovecho para lamer el orificio de su cola, esta por acabar y me pide que la penetre nuevamente. Le pido que me la chupe un momento, que me estimule un poco, como para sacarme de este control que llevo, Lo hace, un escalofrió me recorre la espalda y se incrusta en mi cerebro, me coloco de lado y vuelvo a chuparle la concha, nos prendemos en un sesenta y nueve de locura,

Abre bien las piernas para recibir el placer que le quiero brindar, a la vez que lame, chupa y besa mi verga, me masturba un poco, se apodera de la cabeza y lo tratas como si fuera un helado, le pido que se detenga que sino le acabo en la boca, no me hace caso, me pongo de rodillas y la miro, me sonríe y a la vez que dice: “-Ves yo también puedo ser mala”, -Así!, le contesto,-Mira entonces, me coloco en su entrepierna, tomo mi miembro con la mano y se lo froto por toda la concha.

Me pongo loco porque no puedo meterla, no encuentro el agujero!!, abre con sus dedos su sexo y mi glande, encontró el afanado canal, y comienzo a penetrarla, con fuerza hasta el fondo, me quedo quieto un instante como para que se acostumbre al látex y comienzo a bombear, hacia afuera casi sacándola y hacia adentro hasta el fondo, que placer, sentir su calor interno, siento como si tocara el fondo de ella, los suspiros de ambos se mezclan, no sabemos quien suspira más fuerte.

Gime y gime, esta desbocada, esta acabando, bombeo un poco más, quiero acabar con ella, ya es imposible contenerme más y acabo, acabo envuelto en un pequeño ataque de locura y placer…

Terminan los espasmos uno a uno y sigo acariciándole los pechos, y darle pequeños mordiscos y chupones a su cuello. Su perfume sigue impregnado en el cuarto, pero ahora hay otro olor, típico después de esto, los labios los tengo secos, no abro los ojos, esta tan calentita la cama…

Cierto malestar me agobia luego de cada encuentro, no se como describirlo, me siento mal, pero no es algo físico, mas bien interno, mental, la pregunta del millón, ¿Porqué?.

A veces creo que es por ella, hay algo que ella me oculta, y creo que se lo que es, eso me aterra, hay veces en la que le quiero decir que no se enamore de mi, al menos por ahora, yo creo que ella es una gran mujer, seria fantástico que yo la amara, pero no puedo, y no se por que, trate de obligarme a amarla, pero así no funcionan las cosas, no quiero perderla, me fascina tanto que no quiero dejarla, estuve pensando en dejar todo esto y cortarlo acá, pero no quiero, es una actitud egoísta de mi parte, solo pienso en mi, creo que tendría que hablar con ella, yo todo lo que busco ya lo expuse, y además lo que me interesa es su placer, que disfrute como yo, bueno mejor.

Yo a ella le confesé algo que no tenia en mente hacerlo, que es verdadero, le confesé que era la primera mujer con la cual tenia algo especial, se rió, y hasta ahora no me cree, si bien e tenido sexo con otras mujeres no se pueden comparar con esto que tenemos.

Con ella tengo sueños más que delirantes, si antes tenia algunos ratones y fantasías, ahora es un criadero, no pasa noche en la cual no sueñe con encamarme con ella o como hacerle el amor. La otra noche tuve un sueño que, a parte de gustarme, será por eso que lo recuerdo:

No se que será pero el día se veía extraño, el cielo esta anaranjado, el sol se ve rojizo, como cuando atardece, el clima es bueno, no hace ni frio ni calor, tampoco hay humedad, solo una brisa tibia corre en el aire, entonces decido salir a correr, porque me gusto la idea y además porque mi amante se queja de que estoy fuera de estado, y en realidad es así. Lo extraño además es que no hay nadie en la calle, como si fuera un feriado, pero todo se ve como deshabitado, ni autos, ningún negocio abierto, ni una persona, ni un miserable ruido a vida.

Me topo con un perro que persigue a un gato, el gato trepa a un  Árbol y desde la seguridad de las ramas mira, casi burlándose, del perro que ladra, como si sus ladridos pudieran atrapar al gato.

Cuando llego hasta la plaza a la que suelo ir a correr, alcanzo a divisar a la primer y única persona que parece habitar el mundo a parte de mi; casi no la veo, pues esta sentada en uno de los bancos del centro de la plaza, casi oculto por las plantas. Me acerco para ver bien quien es y que hace, sigilosamente, sin hacer ruido llego hasta las plantas.

Es Karem, mi amante, esta sentada, leyendo una revista; esta vestida muy sexy, minifalda negra, un TOP haciendo juego, un chaleco y lleva medias, de esas tipo bucaneras. Me quedo quieto y observo lo que hace, esta muy concentrada en lo que lee. De tanto en tanto se frota los labios con la yema de sus dedos, también hace lo mismo con sus pechos, suspira y eso despierta mi curiosidad; me asomo más y veo que de tanto en tanto mete su mano por debajo de la falda, -“Caramba, mira vos” -digo para adentro se esta haciendo una paja. Ella no podría imaginarse que muy cerca de ella estaba yo.

-¿Qué haces?, no sabes que es más lindo de a dos. Le digo en voz alta. Ella levanto la cabeza y quedo sorprendidísima al contemplar mi verga, señalándola, con su cabezota roja y brillosa. No dijo nada, ya que cuando quiso reaccionar la tenia dentro de su boca y me estaba dando una chupada increíble. -Así, linda, chupa, chupa como me gusta que lo hagas hasta que te llenes de leche… Ella engullía mi muñeco, acariciándome los huevos, palpando la cantidad de leche que le llegaría.

-Hermoso, precioso!! Como la chupas…! ­Me gusta tanto…! Poco tardo Karem en sentir el chorro caliente en su boca. Una salida incontenible de leche hizo que el jugoso liquido resbalara por sus labios.

-No me podes dejar así… Quiero, necesito que me penetres, dale estoy tan caliente, no resisto más sin que me cojas. Raro en ella expresarse así. Ella sin esperar a que tuviera tiempo de recuperarme, me sentó en el banco y se puso en cuclillas sobre sus muslos y se ensarta en mi pija, de tal manera que su cola quedo apuntando a mi, que no dude en lamerle el calo

-Metela guacho… así, métela que ya se pondrá dura dentro de mi concha Y tenia razón, en cuanto entro la cabeza, la verga reacciono y comenzó a endurecerse. En esa postura, ella podía gozar de la visión del mete y saca de mi verga en su vagina. Una vagina húmeda, pegajosa y calentita, la que tanto me gusta.

-Seguí… bésame la espalda, así… Nos recostamos en el banco, sin separarnos, ambos boca arriba, yo abajo de ella. Con una pierna apoyada en el suelo, las nalgas de Karen se abrieron para facilitar las penetración. Mi verga entro hasta apoyar a mis huevos contra sus suaves nalgas, y comenzamos un bombeo casi frenético, Jadeábamos y nuestros poros destilaban el sudor del placer y la excitación. Fueron unos minutos en ambos nos vimos cara a cara.

-¿Porque te pajeabas?. Le pregunte

-Por lo mismo que lo hace todo el mundo, Porque estaba caliente, excitada y quería hacerlo. La bese, nuestras bocas se unieron, frenéticas, como para demostrar lo bueno que era el momento. Nos reacomodamos, ella se coloco apoyando sus manos en el respaldo del banco y con las piernas bien abiertas y la cola bien parada. Le bese sus nalgas, abrí bien sus cachetes e hice lo mismo con su ano, luego seguí con su vagina, ya estaba muy cerca de acabar. La penetre suavemente, como para acostumbrarme a su temperatura interior, que calentita que es… La bombee un rato en esa posición a la ves que le acariciaba los senos, me gusta esta posición porque tengo más posibilidad de movimientos, a la ves que le daba pequeños mordiscos en la espalda. Sin separarnos nos sentamos y continuamos así, ella me cabalgaba y yo le marcaba el ritmo, agarrando sus nalgas y su cintura, ella subía y bajaba disfrutando de cada envestida.

-Mejor. ahora la siento mejor, cada vez mejoras mejor. Cógeme boludo que ya acabo!. Me viene, si me viene..! No pares, no la saques…

­ÀOoooh… Siii!, ­Siii, si…!, Dios… que hermoso…! Cuando ella alcanzo la cúspide, su cuerpo se tambaleo, se ladeo y, sin que la pija se le saliera un milímetro de su concha, ella seguía removiéndose como ida, su desesperación estaba más allá de sus limites.

-Seguí, seguí cogiéndome más. toda. Le levantaba las piernas para hacer la penetración más profunda y aguda, despacio, acompañando sus espasmos. Cuando ya no aguante más, comencé a moverme más frenéticamente, creo que hasta llegue a morderle la espalda Dios no aguante más y acabe!, ­ÀAaaaaaah… Aaaaahhhh! ­Le Petit Mort.! Le acabe por dentro y por fuera, y aun así seguía bombeando, ella me pajeo un poco hasta que salió la ultima gota de mi leche. Yo humedecí las yemas de mis dedos en mi liquido de vida y se lo frote en los pezones, que estaban duros, como para aliviarla un poco, ella tomo mi mano y beso mis dedos, su corazón comenzaba a recuperar su ritmo, pero su respiración aun era entre cortada, nos quedamos así un rato, luego ella se volteo y me dio un beso de aquellos, sonrió y me dijo:

-“que guacho que sos!”, me volves loca.

-Y vos a mi. Le conteste. Apoyo su cabeza en mi pecho y nos quedamos así, recostados en aquel duro banco de plaza. Mire el cielo y no me había percatado de lo rojizo que estaba, la brisa ahora era más tibia, y la luna comenzaba a surgir en el firmamento, era toda una escala de colores rojos y naranjas, y no se escuchaba ni un solo sonido más que el de la brisa contra los Árboles de aquella plaza.

Este sueño fue magnifico, se lo conté a ella y a pesar de que le gusto la idea jamás lo llevamos a cabo. con ella la paso de maravilla, aunque todavía sigue sin creerme de que es la primera con la cual me entrego con verdadera pasión, se ríe y no me cree, pero que le voy a hacer, al menos en la cama estamos mejorando bastante.

La otra noche fue fascinante, como siempre caminamos un rato, me vestí bien para ella, creo que se lo merece. Fuimos a la plaza de siempre, comentamos nuestros temas, luego volvimos a mi cuarto, ninguno dijo nada, no hace falta, tan solo cerrar la puerta y dedicarnos al placer mutuo, yo ya no siento la necesidad de matarme para que ella la pase bien, creo que si yo estoy bien ella también. Comenzar a desvestirnos, lentamente, besándonos sin decir nada, guau!!, ver sus senos, no son grandes ni chicos son como me gustan; besárselos, me parecen lo mas dulce que hay, en realidad la armonía de su cuerpo me gusta.

Desnudos, frente a frente, acariciándonos, no se porque trate de penetrarla en esa posición, de pie, tal vez fue el instinto, besar su cuerpo, creo que siento admiración por su cuerpo, besar su sexo, sentir ese dulzor, como describirlo, almíbar y limón, no se parece, pero es algo difícil de describir.

Esta vez incorporamos algo diferente, lo hicimos en una silla, yo sentado y ella sobre mi.

Se sentó en mi regazo y comenzó a frotarse contra mi, me gusto y me éxito mucho, creo que le dimos al clavo. Ella estaba tan mojada, yo acariciaba su cola e insinuaba mis dedos en su sexo, pero esta vez lo quería hacer diferente, tome mi verga y comencé a frotarla contra su sexo, que sensación, chiposrroteos de electricidad llegaban y se incrustaban en mi cabeza, comencé a sentir una erección y comencé a penetrarla, me costo un poco, todavía no mejoro mi puntería.

Me puse al re palo, parecía que la pija se me iba a reventar, comenzó a cabalgarme a la ves que yo le besaba los pechos, dios que locura, apenas si podía pensar, hice que se retirara para poder colocarme un forro, y volvió a su trabajo, yo estaba a mil, quería besarla, tocarla, acariciarla, me salía de control, no me contuve más y me desbordé en su interior.

Ella siguió con lo suyo, hasta que acabo. Nos quedamos así, abrazados un largo rato, luego nos metimos a la cama. Descansamos un poco, mientras nos acariciábamos y besábamos; Mi ritmo cardiaco se relajo, mi corazón comenzó a latir con fuerza, pero pausadamente, la tome entre mis brazos y la bese, fue un beso intenso, sin tiempo, suave, con pasión, me acomode bien entre sus piernas y comencé a frotar mi sexo contra el de ella, eso me pone al palo.

Apunte y me hundí lentamente, disfrutando el momento, Que sensación!!!!, bombee, estaba relajado, pero ella estaba a mil, eso ayudo más, no se cuanto acabo ella, pero yo al fin tenia el control, no tenia la necesidad de acabar, además logre controlar mis músculos, eso si, estaba cansado, sin ansias pero a la vez motivado.

Levante un poco más sus piernas, como para hacer más profunda la penetración, en realidad mi intención fue colocar sus piernas en mis hombros, pero no lo logre, fue porque no me di a entender lo que quería hacer, bombee un poco y una sensación de calor envolvió mi miembro, eso hace que me ponga loco, como si mi pija se convirtiera en una campana, en un instante recordé que no me había puesto el forro, pensé en ir a buscar uno, pero de seguro ella me hubiese matado, así que remedio, habrá que acabar a fuera, y lo mismo de siempre.

Aunque me hubiese gustado acabar dentro no quise y acabe sobre ella, me tendí sobre ella y de nuevo los espasmos de placer, son como un ataque epiléptico, no puedo controlarme, como describirlo, es hermoso, beautiful, belo, bom, belle, la petit mort… Aquella noche me hubiese gustado retenerla, más tiempo, seguir así todo el resto de la noche y el día siguiente, pero siempre le hago lo mismo, y siempre le hago líos en la casa, y eso no es bueno. pero los momentos que paso con ella son estupendos, y no solo en la cama obviamente.

Con respecto a nosotros algo que me molesta un poco es el hecho de que ya no es más un secreto, ya lo saben sus amigas, voy a proponerle que volvamos a lo de antes, a lo furtivo, no es por nada, pero si tenemos que hacernos cargo, va a ser más jodido, pareceré un cretino, pero no sirvo para simular algo que no soy, el motivo es que no quiero simular frente a sus padres y hermanas, me falta tiempo para acostúmbrame al papel de novio, tampoco se bien que somos, como definirnos, no somos novios ni amigos, no se algo así como amigovios, yo nos considero amigos y amantes, solo eso, dos seres dispuestos a disfrutar uno del otro, pasarla bien, sin compromisos,

Yo por mi parte le soy completamente fiel, podría salir con otras mujeres, pero para que, si con ella estoy bien y la paso fantástico. También creo que lo que hago es medio cruel, cruel porque siento que le hago ilusiones, por un lado me siento bien porque si no sufro como antes, sintiéndome solo, pero lo feo es que no me siento incompleto, como que algo me falta, y se nota en como actúo y eso me jode un poco, al principio no lo notaba, pero analizándolo se marca más aun mi cambio…

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