Como era costumbre me encontraba conduciendo por la ciudad, trabajando en plataformas de transporte para poder aumentar mis ingresos, suelo trabajar de noche, donde el tráfico es menos traumático y se facilita el poder conducir; eso si, hay que tener cuidado con los borrachos, la inseguridad, las peleas de pareja entre otros temas.
Esta noche, la noche de celebración de Halloween opté por iniciar trabajo un poco tarde, alrededor de las 23 horas, como es de costumbre en la ciudad, llueve de forma continua y ligera. El trabajo se desarrolla normal, eso si, pudiendo disfrutar de la vista cada vez que paso por una zona de fiesta de disfraces, donde si bien se simulan brujas, gatas, conejas, todas están disfrazadas de putas, mostrando sus tetas y culos hasta más no poder.
Siendo las 3:00am ya me siento un poco cansado, manejar bajo la lluvia no es fácil, creo que debo irme a mi casa a descansar. Mientras voy conduciendo el celular me anuncia un servicio, es cerca de donde estoy, una zona de bares y discotecas y el destino lo conozco y queda en dirección a mi casa…. Una última y me voy, pienso y acepto… la aplicación me dice que el servicio es para Camila.
Al llegar a la zona, la cantidad de personas es impresionante, hay de todo, ebrios, disfraces, peleas, conduzco con cuidado hasta ver una mano que se agita llamando mi atención, la lluvia no me deja ver bien, pero detengo el auto y para mi sorpresa la puerta del copiloto se abre y entra una jovencita maldiciendo, con los ojos rojos en muestra de haber llorado, cierra la puerta con fuerza y suspira.
- Discúlpeme, no fue mi intención golpearle la puerta, no estaba pensando.
- No pasa nada señorita… Camila verdad?
- Si, si señor soy Camila. Suspiraba para no volver a llorar.
- Se encuentra bien señorita? Necesita algo?
- No, tranquilo, simplemente necesito llegar a mi casa.
- Perfecto, iniciare la ruta.
Paradójicamente no me había cuestionado porqué se había sentado adelante del auto, tampoco me fije en su físico, cuando salimos de la zona de bares y logré poder conducir mas tranquilo me fijé. Era una jovencita preciosa, con un disfraz que simulaba el de una asesina de película de terror, pero como todas, con una connotación sexual. Medias en maya hasta el muslo; botas de cuero negro y tacones; un corset gris que oprimía unas hermosas y firmes tetas; su rostro bañado en sangre artificial donde se evidenciaba una boca hermosa; para finalizar llevaba un machete de juguete en la mano.
Con ánimo de romper el hielo le hablé:
- Si estuvo buena la cacería?
- desentendía me mira con cara de no entender mi pregunta
- Me refiero a la cacería de personas, veo que su machete ha tenido trabajo hoy…señalando el juguete y generando una sonrisa amigable.
- JA JA JA si, he cazado varias almas hoy
- Espero que sean suficientes, no quiero llegar sin alma a mi casa.
- Nuevamente una hermosa y sonora risa… puede creer? Es la primera vez que rio esta noche…
- Pero si es una noche de celebración, cómo así? No estuvo buena la fiesta?
- Ni lo sé, le puedo hacer una pregunta?
- Claro que si señorita, dígame
- Camila, me puede decir Camila… si su novia le planea una fiesta de bienvenida, que da con la celebración de Halloween, usted prefiere pasar la noche con ella o emborracharse con sus amigos?
- Pues señori… Camila, pues Camila, si por “mi novia” se refiere a usted, yo no cambiaría nada en el mundo por un rato con usted y menos con ese disfraz que lleva… al punto que arriesgaría mi alma…
- JA JA tiene usted ingenio… pues imagínese, esa fue mi noche, mi novio se emborrachó se quedó bebiendo, cuando le dije que me iba me insulto y por eso salí así, incluso dejé mi abrigo en el bar y ahora me sigue insultando por el celular.
No podía creerlo, era una mujer hermosa, triste, despechada, por mi cabeza pasaron miles de pensamiento, no sabía qué hacer… guardar silencio? Darle la razón? Cuál era la mejor opción?
- Bueno, por lo menos la he hecho reír y la llevo con tranquilidad a su casa.
- Sabe algo? No sé si quiera ir a mi casa…
- A dónde quiere que la lleve entonces?
- No sé, pero quiero pensar, relajarme.
- Conozco el lugar preciso y hasta estamos cerca, si me permite cierro la aplicación y vamos
- Si, por favor, yo luego le recompensó el tiempo y su trabajo.
Sin responder, tome el volante, aproveche que ya no llovía y las vías estaban solas, me dirigí a la montaña, a un mirador que dejaba vislumbrar la inmensidad de la ciudad… pocos minutos después llegamos
- Mire señorita, acá suelo venir cuando necesito pensar.
- Camila, le dije que me hablara por mi nombre… esta hermoso, me puedo bajar del auto para ver mejor?
- Claro.. pero no sentirá frío?
- No, no pasa nada
Ambos bajamos del auto, la brisa era fresca, un lugar en el que normalmente se encuentran muchas personas, esta vez estaba solo. La ciudad estaba hermosa, las luces denotaban su inmensidad… ya estando de pie y pudiéndola mirar mejor Camila estaba hermosa, una mezcla de cara de muñeca y un cuerpo de modelo, su falda corta solo me hacía pensar en qué tipo de interiores llevaba, estoy seguro de que no llevaba brasier, el frío hacía notar sus pezones a través del corset… pasaron unos minutos en silencio hasta que escuché.
- Muchas gracias, muchas gracias por traerme acá
- No pasa nada, ya sabe que cuando necesite pensar, este es el lugar.
- Si, ya he pensado, mi vida necesita nuevos rumbos, lo primero q haré será terminar la relación… es más, a partir de ahora soy una mujer soltera.
- JA JA esto Camila, muy bien.
Camila se movía por todo el mirador, su falda se levantaba con el viento que pasaba, tomaba fotos, sonreía, era otra persona ahora, inspiraba ternura, pero a la vez lujuria.
- Se ve mucho mejor así, sonriendo, ya si se quiere llevar mi alma me iría feliz
- JA JA dejé el machete en el auto… no puedo cazar su alma
- Pero su sonrisa y felicidad si
Me miró con alegría y confianza… se acercó un poco y me dio las gracias, acompañado de un pequeño beso en la mejilla. Estaba tocando el cielo en ese momento.
- Y bueno… q será lo primero que hará ahora que es soltera?
- Mmm buena pregunta, no lo sé, tener más sexo JA JA ya que hace más de un mes que no hago nada
- QUÉÉ? Su novio… ex novio no es solo un atarbán, es un estúpido, como que un mes sin sexo con usted?
- Puede creerlo?
- No… si usted fuera mi novia… perdón no dije nada
Me puse un poco nervioso, me había dejado llevar de la emoción de su risa y su acercamiento.
- Qué pasó? Por qué no terminó la frase?
- Puede que fuera algo grosero, no quiero incomodarla
- No, por favor con confianza.
- Pues Camila es que usted está buenísima, tiene una cara hermosa, unas tetas de ensueño, ni hablar de sus piernas y pues con ese disfraz inspira muchas cosas… si usted fuera mi novia no pasaría más de un día sin que yo estuviera montado en usted…
- JA JA JA pues no me incomoda, antes me alegra, hace mucho no me sentía deseada, usted me ha hecho sentir así.
No sentí negativa al expresarle que me gustaba su cuerpo, que me inspiraba sexo, así que me arriesgué. Me acerque a ella, la tome de la cintura y le di un beso pasional en su boca, su reacción fue inmediata y empezó a comerme la boca… nos besamos apasionadamente, el frio de la noche se convirtió en un calor salvaje que emanaban nuestros cuerpos… no me quería quedar con la duda, así que mientras la besaba me arriesgué y metí mis manos bajo su falda, me topé con unas nalgas duras, una piel suave y una pequeña tanga.
- Camila que rica estas, que culo, que boca…
- Si? Le gusta?… mientras decía eso, se aparto y levantó completamente la falda, mostrándome ese culo, esa tanga pequeña
- Me encanta, que delicia… mi cuerpo temblaba de la excitación, mi respiración se cortaba.
- Pues ve, es todo tuyo por esta noche.
Al escuchar esas palabras no pude más, salté como un animal, la tomé con mis manos y la acomodé en el capot del carro, baje su tanga con desesperación y firmeza, me arrodillé y empecé a lamerle el clítoris, a comerme el coño más delicioso que me había pasado por la vida, mi lengua jugaba con su clítoris mientras dos de mis dedos entraban en esa concha húmeda y caliente. El silencio se cortó con un gemido, sus piernas se movían, las manos de ella apretaron mi cabeza para que la lamiera hasta el fondo. Así estuve unos minutos, hasta q mi calentura no pudo más.
Me levanté, verla con las piernas abiertas y los ojos brillantes de placer fue la señal que me hacia falta para bajarme el pantalón y embestirla con mi verga dura, lo intenté hacer con tranquilidad, pero no pude, estaba muy caliente, esa concha estaba que quemaba, la embestí con fuerza y rapidez, sus gemidos, sus caras de placer me dieron la autorización para seguir, acomodé mi mano derecha cerca a su cuello.
- Ahórcame por favor.
Escuche entre gemidos, mi mano se acomodo en su débil y elegante cuello, apreté ligeramente, pero ella me pidió que lo hiciera con fuerza.
Seguí, pero quería ver ese culo empinado. Me separé y la levanté, la giré con rudeza, sus piernas en el suelo y manos apoyadas en el capot me dieron el camino para poder penetrarla a mi libertad, alternaba las embestidas con nalgadas, mis manos buscaban las tetas que torpemente había sacado del corset, la tomé del pelo, así podía embestirla mejor, mi cuerpo no dio más y acabé llenándola de semen, nunca había expulsado tanta leche en mi vida, gemí de placer, no quería salir de ahí, pero el cansancio me hizo caer al suelo… miraba el cielo lleno de estrellas, hasta q su hermosa cara se postró ante mi y me besó.
- Gracias, hace mucho no me cogían con tanta pasión, me volví a sentir mujer.
Me levanté, le ayudé a acomodarse su poca ropa, le limpié la tierra de la ropa, me acerqué al auto y le entregué una botella de agua, se la tomó casi completa, con lo último se limpió las manos y las piernas, me miraba y sonreía. Volvimos al auto en silencio
- Recuerdas mi dirección?
- Si claro, incluso es muy cerca a mi casa -mientras iniciaba el recorrido
- Que bueno, estoy agotada – me dijo con una sonrisa picara que inmediatamente me generó otra erección
- Wow, se te volvió a parar?
- JA JA perdón… es que insisto que usted está buenísima.
No había terminado la frase cuando sentí su mano en mi pantalón, me abrió el cierre y sacó mi verga, que efectivamente estaba muy parada, la acarició, me empezó a masturbar y bajo su linda boca, empezó a mamármela, la chupaba delicioso, la escupía, se atragantaba, me masturbaba… solo pude aguantar unos minutos, era incalculable el placer, estallé, llegué al orgasmo, me corrí mientras la tenia adentro… ella aguantó unos segundos, luego se levantó, su boca se encontraba limpia, se había tragado toda mi leche, incluso una última gota que quedaba en la punta de mi verga, fue limpiada por su lengua.
Llegamos a su casa, me compartió su número celular, me dijo que la llamara al día siguiente, me dio un pequeño y sutil beso en la mejilla y salió del auto… Sé que la llamaré, incluso debo llamarla ya que no me pagó el servicio… pero qué importa el dinero, había tenido la mejor noche de Halloween de mi vida.