Mi cariñosa familia paterna
Esto me paso hace tres semanas al viajar a la Ciudad de México para pasar mis vacaciones.
En México se encuentra toda mi familia; la de parte de mi papa y la de mi mama.
Siempre que voy, prefiero estar en casa de la familia de mi mama, hay mas ambiente, mas posibilidad de reventón, etc.
Pero que se le va a hacer, hay que visitar a la otra familia también.
Llegue a casa de mis abuelos paternos y varios tíos y primos ya estaban ahí.
Comencé a saludar gente y vi a una prima que tenia años de no ver.
Nos abrazamos muy efusivamente y sentí su cuerpo muy bien formado: un pecho grande, no excesivo y un trasero firme.
La comida transcurrió sin novedad. Al terminar yo encendí un cigarrillo y me metí en una pequeña cancha de squash que tiene la casa para poder bajar la comida sin el tumulto de la toda la gente.
En eso oí la puerta de entrada a la cancha y entro mi prima, diciéndome que por que era tan antisocial.
Yo argumente que no era antisocial, que simplemente no tenia ganas de oír el parloteo de tanta gente.
Ella me dijo que en la parte de arriba habían instalado un pequeño cuartito, con su cama y todo, que por que no íbamos allá a ponernos cómodos.
Así lo hicimos y al llegar al mencionado cuartito, me suelta de golpe que tenia meses que fantaseaba conmigo, yo le trato de quitar seriedad diciéndole que ni siquiera nos hemos visto, a lo que contesta que precisamente por eso es.
Dicho esto, se despoja de su blusa, mostrándome un pequeño sostén de tela prácticamente transparente, y con voz morbosa y coqueta pregunta que si quiero ver mas. ¡Por supuesto! Y comienza a hacerme un baile erótico quitándose lentamente la ropa.
Cuando esta completamente desnuda, se recuesta sobre la cama boca arriba y se hace la dormida, yo me desnudo a velocidad supersónica y dudo un momento: en la cocina, a menos de 20 metros, se encuentran sus papas, mis papas, todos nuestros tíos y hasta los abuelos, pero solo dudo un segundo antes de comenzar a besarle los pechos, ella comienza a empujar mi cabeza hacia abajo, hasta llegar a la entrada de su vagina y enseguida comienzo a comérmela.
Mi prima esta que arde, cierra sus piernas apretando mi cabeza contra sus labios vaginales, mi lengua se mueve como loca dentro de ella, provocando que sus gemidos suban de intensidad.
Separo sus piernas de mi cabeza y ahora soy yo quien se tiende en la cama, ella tarda un momento en incorporarse y se baja de la cama.
Empieza a besar mis pies, subiendo lentamente por mis piernas, pasando su lengua por ellas.
Nunca me habían hecho algo así, es una sensación increíble.
Al llegar a mi miembro se lo mete de un solo golpe hasta la garganta, al menos así lo siento yo, y empieza a darme una mamada increíble.
Siento que no aguanto mas y le digo que me voy a correr, pero lejos de sacársela me la chupa con mas fuerza terminando en su boca.
Se ha tragado toda mi leche y se ha puesto en cuatro patas sobre la cama, yo me acerco y comienzo a comérmela por detrás, al tiempo que comienzo a pasarle un dedo por la entrada de su ano, al ver que lo tiene cerradito, comienzo a comerme su ano, arrancándole grandes gemidos de placer, «sigue»- me dice – «nadie me había comido allí antes».
Mi miembro se ha vuelto a poner duro y de un solo golpe la penetro por la vagina, mientras le meto mis dedos en su boca, no pasa mucho tiempo antes de que se la saque de ahí y la ensarte por el culo, le ha dolido, pero ahora comienza a moverse y a pedirme mas. Le tomo sus pechos mientras sigo bombeando su ano, hasta el punto de que no puedo mas y termino inundándola.
Estamos vistiéndonos cuando una voz nos sorprende: «¡¿Muchachos que están haciendo?!». Es una tía, nos ha atrapado. Comenzamos a balbucir incoherentemente, cuando los dos nos quedamos mudos por sus palabras: «Lo peor de todo es que no me han invitado».
No puedo creer lo que acabo de escuchar. » A ver sobrino, no te vistas y mejor desvísteme a mi.»
Mi tía es una mujer de 40 y tantos años, pero de buen cuerpo, grandes pechos, una cinturita que ya quisieran muchas jóvenes y unas caderas hermosas adornadas con un par de nalgas super apetecibles.
Yo obedientemente, comienzo a desvestirla besándole el cuello, jugando con su cabello; mi prima se ha vuelto a desvestir y ahora esta desvistiéndome a mi.
Cuando los tres estamos desnudos, mi tía me avienta sobre la cama y comienza a comerme la pinga, mi prima no quiere perderse la acción se ha sentado sobre mi cara, por lo que, mientras mi tía me come la verga, yo me como la concha de mi prima.
Mi tía quiere ver que tal soy comiendo conchas, la recuesto, le abro un poco sus piernas y me pierdo en su entrepierna.
Al principio me deprimo un poco, parece que no hago el efecto que mi tía hubiera querido, pero poco a poco, introduciendo mi lengua en su vagina, mordisqueando su clítoris empieza a gemir y resoplar y a gemir de placer.
Me pide que la ensarte.
La pongo de perrito y la ensarto por la vagina, mi prima se abre de piernas frente a ella y mi tía comienza a comerse a mi prima mientras yo la bombeo y repito la operación realizada con el ano de prima, comienzo pasándole un dedo ensalivado, para irlo abriendo y de pronto, la ensarto por el ano hasta que mi cuerpo ha chocado con sus nalgas.
Las dos han gritado, mi tía por la enculada y mi prima por que la ha mordido al sentir mi miembro en su culo.
Sigo bombeando el culo de mi tía, ella me dice que se esta cansando de esta posición, se la saco un momento, la acuesto boca arriba, le levanto las piernas y la vuelvo a encular, aprovecho esta nueva posición para recostarme sobre ella, manándole los senos; mi prima se ha sentado sobre la cara de mi tía.
Lastima que no he visto la escena desde fuera, a de ver sido de antología.
Así continuamos, hasta que mi prima comienza a gemir y a arquear la espalda, mi tía la ha hecho llegar al orgasmo.
Mi prima rueda a un lado de la cama y solo quedamos mi tía y yo.
Se la saco del ano y la vuelvo a ensartar por la vagina, sin dejar de mamar su pecho, besar su boca, mordisquear sus oídos: dentro-fuera una y otra vez, siento que ya no puedo mas.
Me salgo de ella y me siento sobre su pecho, ella levanta la cabeza y comienza a mamármela, hasta que me corro en su boca.
Los tres nos recostamos un rato, besándonos y tocándonos.
Al poco rato, nos aseamos, nos vestimos y mi tía nos ha dicho que es digno de repetirse.
Creo que de ahora en adelante me gustara ir a ver a mi familia paterna.