Esta es la historia de una familia desecha y completamente infeliz, y de cómo según he ido creciendo he descubierto como el sexo nos ayuda a sobrellevarlo.

Mi padre había hecho mucho dinero de joven gracias a que tuvo buena vista para los negocios, pero siempre peco de ser demasiado bueno.

Por eso su entorno de “amigos” le recomendó buscar matrimonio en una de las típicas familias con apellido para lustrar el futuro de sus hijos.

Así conoció a mi madre, en una cena de gente adinerada de esas que tan poco le gustaban. Mi abuelo materno insistió mucho par que se casaran y así fue.

Mis padres se casaron con 29 años mi padre y 19 mi madre. A los dos años de la boda nací yo.

Mi educación en un principio corrió a cargo de mi padre, que no quería que me convirtiera en la persona estirada y pija que era mi madre, con la que ya entonces no tenía relación matrimonial.

Ahora han pasado 17 años y mi abuelo materno (15 años mayor que mi abuela) se ha divorciado de mi abuela a los 71 para irse con una joven que trabaja en una empresa de mi padre, por donde mi abuelo últimamente se pasaba demasiado a menudo.

Mi abuela, de 56, quedó hundida en la miseria, con la idea de que ya no vale nada, pero tras un dineral gastado por mi padre en psicólogos y cirugía para verse mejor por fuera, ha recuperado toda su vitalidad.

Mi vida también es triste, ya que mi padre cedió a las presiones de mi madre y acabe haciendo equitación, jugando al polo…

Estudio fuera y decidí no contarles a mis padres que volvería un día antes para sorprenderlos y así empezar el verano con buen pie.

Llamé y me abrió el jardinero, que me recibió con un abrazo.

Subí al piso de arriba y no encontré a mi padre ni a mi madre, así que decidí mirar en el salón privado de mis padres.

Según me iba acercando tuve un mal presentimiento, pero al acercarme y escuchar gemidos no pude evitar ilusionarme pensando que mi padre y mi madre habían arreglado sus diferencias.

No resistí la morbosa tentación de mirar por la puerta y vi a: ¡¡¡¡¡¡MI PADRE Y MI ABUELA FOLLANDO!!!!!!. Intente calmarme y ordenar mis ideas, después pegue una oreja a la puerta:

-Oh, Patricia que sería de mi si no estuvieras aquí….Arghhhh!

-Lo mismo digo Luis, no habría superado mi depresión…..mmmmhhhhhh!

-Debemos aprovechar porque mañana llega José y podría descubrirnos-dijo mi padre-.

En ese momento no pude resistir más y me fui a mi cuarto a ordenar mis ideas.

Me tumbe en la cama y pensé en lo que había pasado: 1º-mi padre engañaba a mi madre con su madre(de ella), 2º-mi abuela estaba buenísima, pelo largo rubio, esos labios carnosos, y lo mejor es que la operación le había hecho desaparecer la barriga y había mantenido e incluso mejorado esas tetas que tenía antes(grandes, con unos pezones marrones enormes), por no hablar de la cintura que ahora tenía, lo que hacía destacar aún más su gran culo; por el contrario mi padre estaba gordo y era bajito y su pene dejaba mucho que desear, lo que me hizo pensar: si mi abuela se follaba a mi padre por simple compañía, conmigo lo haría por placer!

Pasé unas 2 horas en mi habitación dándole vueltas al tema, cuando mi padre entro corriendo:

-José, qué tal estas?!-dijo mi padre ilusionado-

-Muy bien papá, tenía ganas de veros.

-¿Llegaste hace mucho?-preguntó mi padre nervioso-

-Si papa, 2 horas más o menos, pero no te encontré.

-Lo siento hijo, estaba… en el despacho

-Ok papa, me ducho y deshago las maletas y nos vemos en la cena.

-De acuerdo José

-Oh por cierto papá, ¿y mamá?

-Tu madre está trabajando, creo

-¿Seguís teniendo problemas?-dije apenado-

-Si hijo, pero es la historia de siempre. No te preocupes.

-Papá, deberíais hacer algo por solucionarlo, no sé, iros de viaje.

-Se me tirarían al cuello los accionistas de la empresa si falto dos días.

-¡Pues no se lo digáis a nadie!. Hacedlo por mí, papá. Siempre desee una familia normal

-De acuerdo, hablaré con tu madre.

-¡Muchas gracias, papá!

Verdaderamente, mi padre era un calzonazos. Solo porque yo se lo pido, va a intentar arreglar las cosas con una esposa a la que engaña con su suegra.

Es absurdo. Pero en mi cabeza se empezaba a fraguar un plan.

La cena se desarrolló normalmente, y al acabar mi padre me llamó aparte para decirme que había hablado con María (mi madre) y que habían decidido intentarlo, pero que debía quedar en el mayor de los secretos, ya que solo yo lo sabía y no querían que nadie les dijera que era absurdo.

Se irían por la mañana del día siguiente a la casa de la sierra.

Me levante tarde y desayune tranquilamente, para ir después a bañarme a la piscina del jardín.

Mi abuela estaba allí tomando el sol y describirla es difícil: ponerse un bikini así con 56 años debería ser pecado, sobre todo si tu nieto puede verte: era rojo y la tela de la parte de arriba se veía tensa de contener tanta carne, unas tetas que se veían bronceadas como el resto de su cuerpo; lo de abajo ya era de morirse, era un tanga también rojo de esos como de hilo dental que se metía entre sus cachetes, que eran…

Yo tenía una erección impresionante solo de haber visto eso, así que me zambullí en el agua. Mi abuela al oír el ruido se sobresaltó, y al no poder ver por el sol, preguntó inquieta de quien se trataba:

-Soy yo abuela. ¿A quién esperabas?- pregunte con toda la malicia del mundo-

-A nadie, tesoro. ¿A quién debía esperar?- respondió perturbada-

Yo no conteste y me limite a tumbarme junto a ella en una tumbona, dejando mi erección visible.

-Pensé que tal vez esperaras a mi padre, que tendrías algo que decirle.

-Noo…Por cierto, ¿dónde está? No le he visto en toda la mañana

-Es un secreto, no puedo contarlo.

Mi abuela empezó a inquietarse, se incorporó y clavo su mirada en mis ojos, no sin detenerse antes en mi paquete, que estaba a tope:

-Dime dónde está, yo también soy parte de la familia y tengo derecho a saberlo-dijo ya enfadada-

-No te enfades abuela, te lo diré-dije con sorna- se fue con tu hija a ver si se reconcilian. Volverán pasado mañana.

-Ahh…..-dijo mi abuela intentando mostrar alegría- eso es fantástico, ¿no?

-Abuela-dije con tono serio- no finjas estar contenta por eso.

-¿Cómo?!!!

-Se lo que te traes con mi padre. Os vi ayer cuando llegué en el salón de mis padres.

-OH DIOS MIO!. No es lo que piensas….

-Si muy típico abuela, pero no cuela. ¿Por qué lo haces? No le diré nada a mi madre.

-Me siento avergonzada…..

-Dímelo o no tendré más remedio que contárselo-la amenace-

-Está bien- dijo entre sollozos- tu abuelo siempre me trato como una basura, en todos los planos, incluido el sexual. Cuando conocí a tu padre me vi identificada con él, los dos teníamos matrimonios de conveniencia, y yo sabía que él no sería feliz. Cuando tu abuelo me abandono, él me apoyó mucho, más que mi hija. Y un día surgió la pasión, el sentirme deseada me llevo a entregarme a él.

-Ese no es motivo abuela, ¿simplemente lo haces porque él te desea?

-Creo que sí.

-¿Y si te dijera que yo también te deseo?

Me lo había jugado el todo por el todo. No sabía por donde podría salir esto. Mi abuela me volvió a repasar de arriba abajo y esta vez detuvo su mirada con lujuria en mi paquete.

-Eso depende lo que tengas para ofrecerme-dijo con un tono que casi me hace romper el bañador-

-Tengo lo que quieras-dije sabiendo que lo tenía al alcance de la mano-

Mi abuela me agarró de la mano y me llevó a una de las arboledas del jardín.

-Aquí no nos verá nadie-me dijo- Espero que no eches por los suelos las esperanzas que me ha dado el volumen de tu bañador.

-Compruébalo tu misma

Mi abuela se acercó y metió su mano sudada del sol en mi bañador. He de decir que mi polla es de una longitud normal, pero es muy gorda.

-Por ahora me gusta lo que palpo, José-

Mi abuela había empezado a cascarme una paja increíble, y yo no podía apartar la mirada de esas tetas, que más que tetas eran ubres.

-Veo que te gustan mis tetas, tesoro-

-Muchísimo abuela!!!!Son increíbles-

-Pues me las pago tu padre, así que algo de ellas también es tuyo-

En ese momento se quitó el bikini y me dejo ver las mejores tetas de mi vida, sus pezones eran enormes y la aureola tenía un color marrón que…. Me hizo sentarme en una de las mesas de madera que había cerca de la barbacoa y me acabo de quitar el bañador

-Menudo pollón José!! Esto no lo has heredado de tu padre desde luego.

-¿Entonces he cumplido tus expectativas, abuelita?

-Con creces cariño, solo por eso veras que bien te hago sentir

Me senté sobre la mesa y mi abuela se agacho y rodeó con sus inmensas tetas mi polla, haciendo un movimiento de sube y baja delicioso, a la vez que me chupaba el glande cuando sobresalía.

-¡¡¡¡Nunca pensé que fueras tan puta, abuela!!!!

-Si, soy un abuela puta, pero puta-reputa, ¿verdad? Pero como te gusta….

Solo de oírla decir eso me recorrió un hormigueo por la espalda impresionante

-ME CORRO ABUELA!!!

-Pues no vamos a desaprovecharlo…-

Y diciendo esto se metió mi polla en la boca y se lo trago todo, recogiendo con la lengua lo poco que quedaba en mi rabo y en las comisuras de su boca.

-Que rica sabe la juventud….-dijo mi abuela relamiéndose-Espero que aún puedas dar más de sí.

-Por supuesto abuela, si me haces sentir así…..

Entonces se sentó en mi lugar y se quitó la parte de abajo del bikini, haciendo que me arrodillara como ella estaba antes.

-Ahora chúpame bien el coño, eh José-

-Claro abuela-

Empecé tímidamente a pasar mi lengua arriba y abajo por su raja, que estaba muy húmeda.

-Con más salero, hostia José. Préstale especial atención a ese bultito rojo

En ese momento me fijé en su clítoris que estaba muy inflamado, y empecé a besarlo suavemente. Hay mi abuela empezó a gemir ligeramente y continué con mi labor hasta que sus gemidos eran casi alaridos, y tras haberse corrido dos veces.

-Espero que esto te haya gustado José-dijo mi abuela recolocándose el bikini-

-Si abuela, pero quiero más, quiero reventarte por dentro, hacer que me pidas que te parta en dos-

-Pero eso no puede ser José….

-Pero mírame, me duele la polla de la erección-

-Oh, pobrecito mi tesoro…Tienes razón, no puedo dejarte sí-

Y diciendo esto se acercó a mí y me agarró el rabo a la vez que me daba un beso con lengua acojonante. Yo, muy excitado, corrí a un lado la tela de su tanga y puse la punta de la polla sobre sus labios.

-Me deseas mucho, ¿verdad cariño?-dijo mi abuela orgullosa-

-¡Si abuela, estas buenísima!

-Puedes metérmela ya.

La tiré sobre la mesa y le arranqué el bikini. Empecé a comerle esas tetas que me volvían loco a la vez que la penetraba brutalmente.

-SIGUE CARIÑO!! ¡¡¡¡¡¡Fóllate a tu abuela!!!!!!

-OH SI!!!!COMO ME GUSTA!!!!

-Avísame cuando te falte poco para correrte, José.

-YA ABUELA!!!

Entonces se separó de mí y me agarro con mucha fuerza la base del pene, lo que me corto la corrida

-¿Por qué has hecho eso, abuela?!!

-¿Acaso no quieres romperle el culo a tu abuelita antes de acabar?

-Claro!

-Espera que te dos lengüetazos en el capullo para que entre bien.

Me la chupo un poco y después se quitó el tanga y de pie apoyo sus manos en la mesa, quedando su culo en pompa frente a mi polla. Se la introduje de golpe, y noté como todo estaba muy apretado.

-¿Nunca te han dado por culo abuela?-pregunte sorprendido

-Sí, pero solo tu padre, y comparado con esto eso era como tener un palillo en el culo, ¡no me jodas! Bombea rápido que se me pase el dolor.

Empecé a empujar y sus quejidos se convirtieron en gemidos de placer. Al poco me corrí, llenándole todo el culo de semen.

Fue una gran mañana y un gran fin de semana, en el que nos bañábamos desnudos, follábamos por toda la casa, nos escondíamos de los sirvientes mientras ella me la chupaba… El lunes llegaron mis padres y ocurrieron más cosas interesantes…..

Continuará