Capítulo 1

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El siguiente relato contiene referencias al consumo de Dr0g@s y toca el tema del In¢€st0 y situaciones se#u@les explícitas.

Si eres una persona sensible mejor evita la lectura.

Mis padres se separaron cuando yo era joven aún fue una época muy difícil de mi vida aunque tanto mamá culpaba a papá y viceversa la verdad es que ambos tenían una conducta reprobable, ambos se habían sido infieles mutuamente y ambos llevaban un estilo de vida que incluía fiestas y mucho descontrol.

Así fue que papá se fue de la casa y con el pasar de los años cada vez eran menos las veces que nos veíamos.

Por otro lado tuve que acostumbrarme a esos largos fines de semana en casa cuando mi mamá hacía sus locas fiestas y escuchar como sus gemidos recorrían toda la casa cuando mantenía relaciones con alguno o varios de sus invitados.

Al ser una joven de un desarrollo físicamente precoz no faltó mucho para que sus invitados se fijarán en mi y me hicieran comentarios pasados de tono, mamá encontró solución a esto encerrándome en mi habitación cada que tenía sus fiestas y pase a ser una rehén en mi propia casa.

Así fue pasando el tiempo y muy pronto me uni aunque por separado al mismo estilo de vida de mis padres, si bien no descuidaba mis estudios disfrutaba mucho de salir de fiesta con mis amigos, ir a lugares donde no podía entrar y pronto empecé a consumir alcohol y otras sustancias y si bien era moderada en el consumo me alocaba bastante cuando lo hacía.

Cierto fin de semana una amiga me invitó a pasarlo con ella, y aunque mamá ya sospechaba de mi estilo de vida estaba más feliz de tener la casa para ella sola un fin de semana.

Ya estaba esa tarde rumbo a casa de mi amiga cuando ella me llamo para decirme que habían tenido una situación de emergencia y no podría recibirme, no quería regresar a casa pues seguro a esas horas mamá ya estaría a plena fiesta así que decidí buscar de momento un sitio para divertirme a solas, había escuchado de un sitio por mis amigos un sitio con un buen bar y pista de baile y si bien no tenía el cover para entrar sabía que no habría problema por ello.

Entre a un baño público y me cambie el atuendo juvenil que llevaba por uno más revelador, una falda corta de cuero negro un par de tacones y un top straples blanco sin nada debajo vaya ese straples me había abierto muchas puertas en el pasado y seguro que esa vez no fallaría.

Ligeros toques de labial y maquillaje ligero y dejar mi melena suelta hasta mis hombros completaron el conjunto.

Para sorpresa mía el tipo de la entrada me pidió una invitación pero lejos de ponerme nerviosa use esa táctica que ya tenía dominada metí mi mano en mi top fingiendo buscar haciendo que la tela de este se deslizara mostrando parte de mis buenos atributos.

El sujeto miro bastante bien luego sin más me dejó pasar una vez más el straples había cumplido su misión.

Había mucha gente y el lugar era muy grande, tenía una enorme barra y dos niveles con una buena pista de baile cada uno.

Había gente de todas las edades y parejas muy diversas también algunas chicas iban más tapadas que yo otras menos vaya sin duda un ambiente propicio para para el desplaye.

Recorrí el lugar un poco para ir viendo el ambiente y asegurarme de atraer algunas miradas entonces una voz y una presencia tomaron toda mi atención.

—Vaya sorpresa nunca imaginé encontrarte en un sitio como este—

Apenas y reconocí a mi padre vistiendo un pantalón elegante algo ajustado y una camisa con solo la mitad de sus botones cerrados vaya vestía un aspecto juvenil que para su edad le quedaba bastante bien, ya no tenía esa barriga que yo le recordaba y al parecer a igual que a mamá el divorcio le había quedado bastante bien.

—Papa bueno a mí no me sorprende encontrarte en un lugar asi—

Respondí desafiante, pues después de casi un año de no verme el se veía tan tranquilo

—No es lo que crees trabajo aquí hija—

Hice una mueca al escuchar la palabra hija

—Creo que no deberías estar aquí según se aún no tienes la propia invitación—

—De verdad recuerdas cuántos años tengo—

—No la verdad no lo recuerdo—

Respondió tan relajado como si nada pasara

—Bueno mamá tenía una fiesta y no quería quedarme a escuchar sus gemidos de placer—

Dije de manera artera, el me miró algo sorprendido por las palabras que use y luego echo los hombros atrás relajado

—Si tu mamá es muy gritona—

Me invitó a la barra donde pido un par de tragos y me ofreció uno

—Bueno tal vez podamos pasar tiempo de calidad—

Decidí seguirle el juego pues así tendría bebidas gratis.

Para mí sorpresa al segundo trago ya no me sentía molesta y de echo papá era muy divertido y agradable, por el siguiente par de horas estuvimos charlando y bebiendo.

Me invitó a bailar y vaya que resultó ser muy bueno en la pista.

Me sentí un poco mareada y me llevo a un balcón a tomar aire, el alcohol ya empezaba a hacerme efecto.

—Te puedo pedir un taxi si quieres—

Me dijo el

—La noche es joven papa pero parece que ya estoy algo mareada—

—Bueno pues que se le puede hacer—

—Yo se que podría tal vez me puedas conseguir algo—

El me miró con duda

—Algo—

Preguntó con tono de sorpresa

—Si papá algo tu sabes a qué me refiero—

El llevo la mano a su bolso y sacó una bolsa pequeña con ese polvo dentro

—Algo como esto—

Lo mire asintiendo

—No no lo creo mejor llamo un taxi—

—Vamos papá un año sin verme no sabes mi ni mis gustos y ahora te preocupas—

Papá dudo un momento pero después sacó de su bolsillo una bandeja pequeña sobre la cual preparó la dosis y la acerco a mi rostro, yo me incline y aspire todo de un jalón.

—Y tú — le pregunté

—Nena yo suelo perder el control cuando consumo—

—Vamos Javier será un tiempo de calidad para ambos—

De nuevo lo ví dudar pero al final también tomo una dosis para el.

El efecto fue casi instantáneo, regresamos a la barra tomamos unos tragos y regresamos a la pista.

Está vez bailando más intenso y más desinhibidos sentía como el me sujetaba fuerte de mi cadera y subía sus manos por mi cintura a lo que yo respondía contoneandome sobre el.

No sé si en verdad era efecto de la c0#@ o si en verdad el deseo se iba apoderando de ambos, con el morbo de lo prohibido y los sentidos agudizados pero decidí dejarme llevar.

Pronto yo me giraba y al sentir sus manos sobre mis nalgas yo le ponía la mano sobre su bulto sintiendo como se endurecía de a poco.

Notaba el deseo en su mirada y como a él también el parentesco parecía no importarle yo por mi lado no sabía que tan lejos estaba dispuesta a llegar.

Por un momento creí que buscaba besarme pero solo se acercó a mi oído y susurro que necesitaba otra dosis.

Salimos al balcón de nuevo está vez me recosté en en un camastro mientras él preparaba una dosis, se acercó con la bandeja hacia mi yo de nuevo aspire profundo.

Mi vista se nublo un poco antes de mirarlo y sonreír

—Y tu —

El me sonrió, puso su mano en mi cuello y empujó hasta hacerme acostar, de un tirón bajo mi top dejando mis t3t@$ libres y procedió a preparar una línea sobre ellas, entonces aspiro mientras me apretaba mis t3t@$,

Lamio mi cuello y sin dejar de presionarlas empezó a chupar y mordisquear mis p3z0n3z

Yo sentía tanto placer que solo cerré mis ojos y me deje llevar en estado de éxtasis y muy húmeda comencé a gemir ante sus caricias.

Pronto sentí como algo húmedo y caliente rozaba mis labios, sabía lo que era y disfrutaba de como se rozaba por toda mi cara y me la iba llenando de un caliente líquido viscoso.

Abrí mi boca por instinto y sentí como el grueso miembro de mi padre entraba por ella deslizándose sobre mi lengua y deformando mis mejillas a su paso.

Él repitió el movimiento varías veces mientras yo succionaba y se lo apretaba con mis labios.

Entonces el paso de movimientos lentos a empezar a f0ll@r mi boca empujando su miembro con fuerza y rapidez hasta asfixiarme y deformar mi garganta marcando su bulto.

No sé si normalmente yo habría podido con eso o sería por la ayuda del polvo mágico pero pude soportar el castigo haya que sentí como mi garganta se llenaba de espeso y caliente s3m3n el cual tosi violentamente mientras el terminaba de 3yacul@r sobre mi rostro quedando este lleno de su espesura.

—Mierd@—

Dijo el al verme, yo solo me gire y me puse en en cuatro sobre el camastro ofreciendo me totalmente sumisa a él.

Sentí como mis interiores eran desgarrados y mi falda era levantada, gemí con fuerza después de un par de azotes y después sentí como mi intimidad se llenaba de ese miembro que entró enorme de un solo empujón.

El empezó a bombear empujando con fuerza dentro de mi en un placentero vaivén con una mano aferrándose a mi cabellera y la otra azotando con fuerza.

Yo sentia como mis t3t@s rebotaban con fuerza y mis gemidos de placer se iban con el viento junto con los de el.

Perdí la noción de cuantas veces me hizo terminar y así mismo cuántas ve es el lleno mi intimidad de su cálido y espeso $em3n.

No le llevaba mucho tiempo recuperarse y empezar a f0llarm3 de nuevo en una posición diferente.

Para cuándo regresamos al interior del club este estaba casi vacío y por suerte seguia muy oscuro.

Yo iba aún llena de fluidos estilando de mi cara y de mi intimidad y mis prendas eran un desastre.

Papá me llevó a su departamento donde nos duchamos y nos acostamos a dormir un poco.

Yo desperté primero la mañana siguiente con una buena resaca pero el recuerdo de lo echo las horas previas fue lo peor, él estaba aún profundamente dormido y yo quise evitar a toda costa la incómoda platica, así que me puse en pie busque entre sus cosas un abrigo para cubrirme y sali de su departamento sin despedirme, con suerte él recordaría estar con otra chica que no fuera yo.

Llegué a una farmacia para comprar la píldora y luego fui a casa donde por suerte no le tuve que dar explicaciones a mamá pues ella aún dormía desnuda e igual que yo horas antes llena de fluidos s3x#0$0s.

Subí a mi habitación y dormí pensando qué le diría a mi padre la próxima vez que lo viera, por suerte pasaron varios años para que esto pasara pero esa ya será otra historia.

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