Esa tarde estaba excitado porque me cruce en el ascensor con mi vecina del departamento de arriba, un chica morocha, verdaderamente impactante, su buenas tardes, me pareció, extremadamente sensual y al decirle un piropo (obligado) me lo correspondió con una sonrisa y me dijo soy Clara y vos?, TU ESCLAVO MIGUEL , le pregunte si aceptaba tomar un café conmigo, pero disculpándose que tenía una entrevista, me soltó con una sonrisa, pasa a las 20 y salimos, cumplí con mis tareas de retirar el boceto del libro, me fui al departamento a esperar esa cita, a eso de las 19, sentí ruidos y me dije a mi mismo , que ya estaba, a las veinte como un señorito, me fui casi corriendo por las escaleras, toque el timbre, me atendió un muchacho de unos veinticinco años, fornido, al preguntar por Clara, me dijo, si quería esperarla que no tardaría que él era el hermano que pasara , eso hice, nos pusimos a charlar, me pareció una persona extremadamente culta, a la misma vez con un dejo de hombre rudo, no me equivoque en esto último , cuando me dijo su nombre , un algo paso en mi ser, que en ese momento no entendí , le comente que Clara, me había citado para salir, me extraño al expresar que por él, si se querían quedar no había problemas.
Seguimos charlando, Clara llamo , me dio con ella, insinuando una disculpa, me dijo que no iba a ir, que fuera mañana, le pase el teléfono a Esteban, al cortar, me invito con un café, soy relativamente flaco mi cuerpo no posee músculos , como no tenía que hacer, eso hicimos, en el living, prendió el televisor y puso una película, porno gay, cuando fui a la puerta me di cuenta que estaba encerrado, fui a la cocina, se había sacado la camisa, mostrando lo que imaginaba, un hermoso cuerpo trabajado, le dije que me quería ir, con cara de extrañeza, dirigió la vista a los cafés servidos, fuimos al living, no podía hablar del miedo, abrió el dialogo, diciendo que por favor me calmara, que disfrutáramos de la película, estaba viendo mi cuerpo a la merced de ese hombre, no sé si sus palabras, o el recuerdo de mis relaciones homosexuales como pasivo en las que había gozado, la imposibilidad de salir de ahí, sin un escándalo, o todo eso junto, creo me resigno, me saco la camisa, me beso en el cuello, entramos en clímax, nos desnudamos, me llevo al baño, nos bañamos duchándonos juntos sentí afinidad entre nuestros cuerpos, , me puso una enema, evacue todo (que era bastante), en el botiquín había vaselina, el cual se puso en sus dedos, haciendo que dilatara mis esfínteres , al ver su hermoso pene, sentí las ganas de ser penetrado (como cuando lo hacía con mi primo), no me sentí violado, puesto que goce, cuando su leche lleno mis intestinos, me indujo a arrodillarme y lamer su pene, poniendo mis labios, como protección de la dentadura, lo mame hasta que acabo nuevamente, nunca lo había hecho, Esteban me levanto entre sus brazos, me llevo a un banco donde se sentó, me acomodo sobre su falo y una vez más me penetro, mientras me besaba y apretaba mis tetillas, me sentía todo lleno de él.
Me puse la ropa y me fui, cuando me pego una nalgada, realmente me sentí feliz, recién me acorde de Clara al otro día cuando llamo, (le pidió el número al portero), fue ella que dijo de pasarme a buscar, ante esa posibilidad me salió un te espero, su grácil figura me gustaba, fuimos a un café, charlamos de todo, sus expectativas de viajar, mi di cuenta que tenía más afinidad con el hermano. Me dio su teléfono, su hermano se quedaría dos semanas, antes de viajar a San Francisco donde vivía , su trabajo de secretaria, empezaba el lunes, de 9 a 19 en Martínez, a treinta minutos del departamento, El lunes a las 10 de la mañana, le hablé.
Esteban, no tengo horarios en mis trabajos, en que horario podes jugar conmigo?
A las 11 empezamos, las mejores dos semanas de sexo, que he tenido en mi vida, en cada relación (Gay por supuesto) no puedo dejar de recordarlo, Clara, siempre me da noticias y cuando venga, me va avisar.
Siempre le pregunto por él.