Prostituí a la puta de mi madre
La cogí tanto que ya no me causa morbo y cojo con sus amigas,con mi tía y sobrinas. Ahora la puta es una escort.
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74 relatos
De putas
A mi edad, por aquel entonces tenía 20 años, aún me resultaba conflictiva la experiencia que había tenido con mi pareja y el conserje, pues hasta antes de aquella si bien había tenido una vida bastante liberal en el ámbito sexual, siempre me había relacionado con personas que conocía socialmente, es
Explicaciones de una callejera
No todas las historias que les cuento me han ocurrido ahora último, muchas ya han acontecido hace un tiempo, creo necesario hacer esta aclaración, pues de otro modo, ustedes pensaran que paso fornicando.
Eva, ¿Ingenua o puta? Centro de salud
Mi pobre novia es engañada por unos compañeros de trabajo y penetrada repetidas veces aprovechándose de su inocencia.
Mi puta madura
Una de las mejores cogidas que he tenido.....
Una madura muy rica
Una madura muy rica, muy puta y sumisa, lista para disfrutar de una buena verga, dominarla como le gusta y satisfacer todos mis antojos y exigencias.
Me gusta que me follen bien el culito
Con el chat gay puedes conocer a gente y aunque hay de todo y hay gente que solo esta para pasar el rato pajeando sé también hay gente que quiere sexo, y yo soy de esos, a sí que me puse a buscar pollas por el chat. Mi nick para que me folles.
El cornudo II
La puta de su mujer lo lleva a la única solución cuando se está enamorado y herido en su honor.
En mi oficina con una mujer madura de tetas enormes
Aquella mañana mi jefe me había anunciado que vendría a verme una clienta a la que el no podía atender por que tenía que hacer gestiones fuera del despacho. No le di mas importancia, ya había ocurrido otras veces; pero esta sería diferente.
Mi amante es un hombre fascinante II
Sigue la fascinación de la adúltera por su amante, quien la va conduciendo gradualmente a admitir cualquier perversión.
Sylvia
No tengo reparos en que Francisco me las vea y me imagino que alguna vez se habrá masturbado pensando en mi lo que por un lado me alaga, pero de un tiempo a esta parte le veía cada vez mas obsesionado con el tema del sexo.
Puta por un día
A pesar de ser una mujer casada y sexualmente satisfecha, debo reconocer que, pero en el fondo muchas veces me asalta la idea de ser puta por un día.
Sylvia me la chupó
Y Sylvia decia, no me extraña ya que con esas tetazas se la debe poner muy dura al guarrindongo de mi marido (y lo decia sonriente una tía que es una celosa de cuidado, pero se estaba calentando). Sylvia me miraba el rabo de una forma muy caliente.
La vocación de mi esposa
Una mujer casada tiene una fantasía y con la ayuda de su esposo la lleva a la realidad, lo que le permite descubrir su verdadera vocación.
Ely y la fiesta de Halloween
Una chica acepta un aventón a una ciudad cercana para una fiesta, y acab agradeciéndolo con mucho sexo.
Esclava puta-cerda609. Mi Historia IV
Porque aunque de cara a la galería, éramos novios, y se suponía que dormíamos juntos en una hermosa cama de matrimonio que tenía en su piso, en la intimidad yo no era más que su puta, su fulana, y sobre todo su esclava, y por tanto me reservaba un cuarto, pequeño y oscuro para que durmiera.
Fiebre
Sus veintidós años, reflejados en su cuerpo, con senos más grandes que los de hace dos años, su mirada al ver su andar sensual indicaban que las ganas de avanzar sin contemplar diferencias de edad, por las curvas de esa hermosa mujer, decían a gritos que la relación no había sido por amor
La golfa
El sudor escurría por mi frente y mi trasero, el cual sentía yo perfectamente pegado a él; su verga hasta el fondo, sus manos gozando de mis nalgas y yo por mi parte, debo confesarlo, muy feliz.
Sylvia la puta de Gijón y el desconocido
Mi figura es delgada, culito pequeñito, pechitos firmes, pelo negro, ojos marrones oscuros, labios finos, carita ancha, y piernas largas y delgadas.
Soy la puta de mi suegro
Ahora te cuento, como me convertí en la perra del padre de mi esposo, soy la puta de mi maravilloso suegro.
¿Solo una puta?
Entonces ella empezó a desnudarme a mi, ahora sus diestras manos abrieron los botones de mi camisa, sus maquillados labios besaban primero mi largo cuello, luego mis hombros y por fin bajando los tirantes de blanco sujetador mis anhelantes pechos.
Sus primos le dieron lo que quería
A mis catorce años las vacaciones eran la principal fuente de contacto entre los primos. Siendo chico recordaba mis juegos, desde introducirme cosas en mi ano, las pajas desde que me empezó a saltar semen...
María Jesús la puta de grandes tetas
María Jesús la puta de grandes tetas, tiene un buen par de tetas, en realidad aunque es guapa de cara, lo mejor son sus dos tetazas, sus melones gordos, grandes, llenos, globosos.
Le di por culo a Sylvia
Es una cachonda y me calienta, pero solo quiere follar a la manera tradicional, se excita mucho pensando en que vamos a jugar pero a la hora de la verdad no se atreve.
Helena
Porque su esposo no llegó el día que ella lo esperaba, se convirtio en bailarina y prostituta, después que fue invitada por una amiga a una supuesta despedida de solteras.
Yo soy una de las putas de mi hijo
Una prostituta recibe con excelente disposición la noticia de que su propio hijo se ha hecho cargo de su explotación comercial.
La puta de Sylvia cumplió objetivos III – Final
La parte final de esta apasionante historia con la puta de Sylvia, la guarra y zorra de mi tía.
Me tiré a la puta de mi suegra
Empezó a acariciarla en redondo, arriba y abajo, con las dos manos, moviendo suavemente sus dedos bajándome la piel del capullo y dejando el glande a la vista, gordo y rosado, con una gotita de liquido preseminal en la punta.
La puta de Sylvia cumplió objetivos I
Soy morena, pelo liso por encima de los hombros, delgada, cara ancha, ojos grandes y oscuros, pechos pequeños pero bien firmes, piernas largas y finas, culito respingón y prieto que suelo lucir en la playa en tanga y en la oficina con minifaldas muy cortitas, ajustadas o de vuelo.
Puta por una noche
Más tarde me explicaría que si me hubiera dicho la verdad desde el principio, yo jamás habría aceptado, y puede que tuviera razón. Lo peor de todo fue que su cliente, enseguida se dio cuenta de que, como puta, yo tenía bastante mejor apariencia que su acompañante y, claro está, puesto que el cliente siempre tiene razón, se encaprichó enseguida conmigo.