La llegada de un extraño correo electrónico deja a Eva pensativa y muy caliente.
Esa mañana Eva despertó tarde. No tenía que ir a la oficina ya que no había programada ninguna cita con clientes. Se quedó remoloneando en la cama
A la mañana siguiente ni bien se despertó, en lo primero que pensó es si el Gurú le habría contestado, y qué haría en caso de que no tuviera respuesta...
Eva se decide relatarle al Gurú una fantasía con el ginecólogo que la atiende desde hace muchos años y con el que ella está muy caliente.
Eva decide, con mucha excitación, realizar la primera tarea sexual que le propone el Gurú.