La sumisión ha sido un tema que me ha cautivado desde hace algún tiempo. Ni yo misma sé cómo comenzó este gusto, he llegado a la conclusión que es algo con lo que se nace, un instinto que es más poderoso que la razón misma.
Las relaciones comunes y corrientes nunca se me dieron, siempre note que había algo diferente en mí, como que nunca encaje en la cotidianidad de la vida común. Como que necesita algo más, y ahora estoy segura que ese más es LA SUMISIÓN.
Desde que empecé a internarme en este mundo siempre me despertó una gran curiosidad conocer la esencia de las relaciones Dominación/sumisión, saber sus reglas, conocer su estructura, en fin, todo acerca de ellas.
Y conforme iba sabiendo más y más, mucho más me gustaba y despertaba un profundo deseo en mi de ser una sumisa y de tener un Amo y Señor a quien servirle.
Y debo decir que a pesar de que mis deseos se enfocan a la sumisión, no soy precisamente una chica tan calladita y tranquila, si bien en mi vida diaria no soy muy sociable con cualquier persona y solo cuando me siento en confianza se me quita lo tímida y fluye mejor la personalidad, también tengo una carácter algo fuerte y siempre defiendo mis ideas y suele ponerme rebelde cuando no quiero hacer algo, además de que siempre tomo el control de mis equipos de trabajo y siempre hago valer mis opiniones.
Pero por alguna extraña razón eso cambia en cuestiones más íntimas, como en mis relaciones con el sexo opuesto, ahí me gusta ser sumisa, me gusta que alguien más sea quien lleve el control de mi, obedecer y servirle a esa persona, hacerla feliz.
Como todo en la vida, en el mundo del sado también hay extremos, desde el sado excesivamente ligth, que cae en lo ridículo, por que no son más que meros jueguitos donde se piensa que lo único que se hace es jugar con esposas y látigos, hasta el sado extremo en donde hay cosas verdaderamente extremas, que a mi gusto ya cae en perversiones que no puedo comprender. Pero bueno eso es otro tema…………
Hice esta aclaración para explicar lo que el sado significa para mí, a mi punto de vista yo creo que me encuentro en un punto medio, por que ni veo al sado como un jueguito de niños ni como una bestialidad extrema. Para mi una relación Dominación/sumisión es una entrega total, en cuerpo y alma que hace una persona (sumisa) a otra persona, la cual posee los conocimientos necesarios para educarla y enseñarla a servirle y satisfacer sus deseos y cuidarla como su pertenencia (Amo)
Esa es la clave del bdsm, ENTREGA, sin eso no hay nada. Pero para que ésta se de, necesita haber algo más, CONFIANZA, lo cual es más bien tarea del Amo, por que si el Señor no proporciona la suficiente confianza para que una sumisa se entregue, difícilmente se da. Y por último, un tercer elemento, pero no por eso menos importante es el AMOR, siempre se debe de sentir un cariño muy especial hacia la persona a la cual uno sirve, aunque creo que eso es casi automático…….. La forma de ser de un Señor siempre cautiva a su sumisa y hace que se sienta algo muy especial con tan solo verlo, despierta cariño, deseo, pasión, respeto y muy probablemente miedo, pero todo eso se conjunta y hace sentir un sentimiento muy especial hacia el Señor y Amo.
Entonces una entrega total con plena confianza en el Señor y Amo, cargada de un amor, que involucre un cariño y deseo muy especiales es lo que se necesita, a mi punto de vista, para que una relación Dominación/sumisión funcione.
Para mi es algo excitante sentirse dominada, a mi me produce una serie de sensaciones que me hacen obedecer y desear entregarle mi placer, mi deseo, mi dolor, mi humillación, querer darle todo de mi a mi Señor.
Muchas mujeres se ofenderían si sus parejas las llamaran putas o perras, pero cuando se es sumisa uno comprende que es eso lo que uno es, y a mi en lo personal me gusta sentirme perrita y estar a los pies de mi Amo en espera de hacer algo para darle placer y hacerlo feliz
Es increíble como el placer del Amo se transforma en el placer propio, una sumisa nunca podría estar contenta si no ha podido o a fallado en darle placer a su Señor……. Por algo se nos llama perras, por que nuestros instintos se explican como los de estos animalitos.
Un perro es una mascota fiel que solo esta feliz cuando su dueño esta con el y le da cariñitos, y el animalito siempre busca la manera de que su dueño este contento con el y siempre quiera tenerlo a su lado. Así es una sumisa, una perrita fiel a su dueño, que es su Señor y Amo
No es fácil ser una buena sumisa, hay muchas cosas que aprender, muchos conocimientos que entender, hay que pulirse y perfeccionarse en el camino. No es cosa que un día para otro, requiere de un periodo de doma, en que la esclava es moldeada a los gustos de su Amo, para que su esclavitud sea más optima y acorde con los deseos de su Señor
Yo apenas comienzo el camino, se que tendré que esforzarme mucho, pero tengo un profundo deseo de hacerlo, por que quiero ser una buena sumisa para mi Señor y que siempre este feliz conmigo y que nunca le falte nada, quiero entregarme a mi dueño……….
Desde que tenia 18 o 19 años, empecé a adentrarme en el bdsm, a través de los relatos de varias páginas de Internet, mi mente empezó a imaginar miles de fantasías relacionadas con el sado, me excitaba con tan solo leerlas e imaginarme en las mismas situaciones que la protagonista. Desde ese momento supe que era lo que quería, era algo a lo que no pensaba renunciar.
Muchos piensan que el bdsm es algo malo, o algo demasiado perverso, lo cierto es que ésta es una práctica de mutuo acuerdo entre dos personas, y que nadie es obligado a participar en ello, una sumisa se entrega a su Señor por voluntad propia y sabe que al hacerlo tendrá que pasar por cosas que tal vez no le gusten, pero que son necesarias para su formación como buena sumisa; y un Amo acepta por voluntad propia a una sumisa para educarla, formarla y cuidarla.
No veo entonces la razón para ser tachado como algo malo, estoy de acuerdo que no va con los convencionalismos de la sociedad… ¿pero desde cuando lo que diga la sociedad ha sido lo correcto?…… desgraciadamente aún abundan mitos y tabúes que impiden a la gente pensar libremente y atan sus impulsos y deseos a la aburrida cotidianidad.
Yo no creo que lo que me guste sea algo malo y nunca me he sentido mal por ello, no le hago daño a nadie, además de que tampoco es algo que se anda publicando para que todo el mundo lo sepa, si no que es, como todo relación, algo íntimo entre dos personas.
Me pregunto cuales serán las cosas que mi Señor me pedirá, cuales serán los castigos que me aplicara y cuales las recompensas que obtendré por mi comportamiento…….. ¿Será que mi Señor me conoce mejor que yo?, ¿Cómo se da cuenta de cómo soy?…..
Siempre he pensado en que en cada Amo hay un psicólogo, sea o no que haya estudiado esa carrera, todos llevan uno dentro, por que de alguna manera aprender a conocer a su sumisa y saben que es lo que ella necesita, mucho antes de que una misma se de cuenta.
Creo que por eso una sumisa siente tanta admiración por su Señor y Amo, por que el siempre sabe lo que es correcto, de alguna manera siempre tienen la razón y muy raras veces se equivocan. Aunque también se que debo cooperar con mi Señor diciéndole todos mis pensamientos, para que el aprenda a conocerme y corrija todos los pensamientos malos o erróneos que pudiera yo tener.
Se que al ser una sumisa debo aceptar hacer las cosas a como mi Señor crea prudente, y eso incluye cualquier actividad que yo realice, como por ejemplo el comer y dormir en el suelo, tener una cadena y usar un collar, en resumen el ser tratada como perra, pero aunque en un principio resulte un poco difícil de aceptar, te das cuenta de que eso es lo una sumisa es, una perrita que no es ajena a ese trato.
Aunque claro que si existe un buen comportamiento y hacemos feliz a nuestro Señor, recibiremos premios por ello, además de la satisfacción de ver a nuestro Señor contento con nosotras, y eso nos invadirá de una gran felicidad.
Todo depende de nuestro comportamiento como sumisas, por que a través de este es como llegaremos a ser buenas sumisas o ser pésimas y causar la disolución de la relación.
Un Amo me inspira respeto, temor, pasión, amor, deseo, excitación y una gran emoción. Me imagino en una habitación a los pies de mi Señor a la espera de recibir órdenes, de su imponente voz, para inmediatamente cumplirlas. Sentir su mirada sobre mi debe ser algo intimidante, algo que me haría temblar de inmediato…. algo me haría desear poder mirar sus ojos observarme, pero se que seria una mirada, que de estar en posibilidades de hacerlo, no podría sostener………..
Siempre me he imaginado, atada, sin poder moverme, expuesta e indefensa ante mi Señor, totalmente a su merced…. me lo imagino follándome así…….. Y me hace sentir mil cosas, la sensación de estar indefensa y el saber que el tiene todo el poder me excita de sobre manera…….
También imagino sus manos, tocando mi cuerpo, unas manos fuertes, transmitiéndome un calor acogedor, lo imagino tocando las partes más íntimas de mi ser, se que su solo contacto me estremecería………….
Imagino a mi Señor disfrutando de mi cuerpo, como desearía escuchar el sonido de su placer invadir mis oídos, a la espera de obtener su autorización para obtener mi propio placer, es una escena por demás excitante y apasionante.
Otra fantasía que irrumpe en mi mente es el momento en que mi Señor me conceda el placer de chupar su polla, me visualizo hincada entre sus piernas con su polla ante mí, será un momento muy emocionante, saborear el sabor de mi Señor en mi boca y tener el placer de recibir su semen en mi boca debe ser algo increíble, algo maravilloso.
Solo espero hacerlo bien y no decepcionar a mi Señor, espero que mi falta de experiencia en ese terreno no me ocasione castigos, yo pondré todo mi esfuerzo, mi único deseo es que mi Señor y Amo quede complacido.
Creo que casi todas las prácticas del bdsm me parecen interesantes, excepto las más extremas, pero casi todas despiertan una gran curiosidad en mi por experimentarlas, en ese sentido aún no tengo claros mis límites en cuanto a lo que me gusta o no, de lo único que estoy 100% segura es que no quiero nada que me lastime permanentemente o que dañe mi integridad física o mental.
Soy una persona muy curiosa, y aunque dicen que la curiosidad mató al gato, yo creo que esa es una de las cosas que me ha llevado a adentrarme en este mundo, la curiosidad por experimentar…. claro, además del profundo deseo de ser sumisa y servir a mi Señor y Amo
Me han dicho que tengo lo que se necesita para ser una buena sumisa y no quiero desaprovechar esa oportunidad, quiero explotar todo mi potencial y ser lo mejor que pueda llegar a ser y siempre perfeccionarme para hacer menores mis defectos y resaltar mis cualidades.
Se que debo dejar de lado mi rebeldía y mi carácter, por que si no lo único que conseguiré será castigo tras castigo y que mi Señor termine hartándose de mí, y ninguna sumisa desearía que eso pasara. Debo admitir que a veces me cuesta trabajo, porque soy muy rezongona, pero poco a poco voy dejando esas conductas por que se que no me traerán nada bueno.
Deseo profundamente agradarle a mi Señor, y se que eso además de mi conducta, incluye mi aspecto físico, por lo que ahora me preocupo más por mejorar mi figura y verme siempre atractiva para mi Señor, porque se que es a él a quien siempre debo parecerle bonito y que debo gustarle para que me desee tanto como yo a él.
Debo admitir que esta entrega también me da miedo, miedo a hacerlo mal, y también por que no se con exactitud todo lo que pasara, y esa expectativa me despierta un temor, que sinceramente lejos de ser algo malo me resulta interesante…….
Siempre me he preguntada que despertó en mi este gusto, me han dicho que puede deberse a una falta de autoridad en mi niñez, aunque yo me imagino que debe haber muchos más factores que me hacen ser feliz siendo una sumisa al servicio de mi Señor y Amo.
Espero ansiosa el día de hacer esta entrega real y estar ya en la presencia de mi Señor y Amo, porque aunque se que soy de su propiedad desde el momento en que acepte ser su sumisa, creo que el momento cúspide de la relación es cuando esta entrega se hace real y las palabras se transforman en hechos y los deseos y fantasías en realidad.
Descriptivo y me hubiera gustado más narrativa con hechos.