Tres amigas pasan una noche inolvidable
Me llamo Mireya, soy de Bilbao (España).
Lo que os voy a contar me ocurrió hace unos días, y fue inolvidable.
Espero que os guste.
Bueno yo vivo sola, tengo 18 años, soy modelo y soy lesbiana desde los 17 años.
Soy rubia con el pelo largo, tengo los ojos azules y unas bonitas piernas.
Mis medidas son 92-61-89 y mido 1,79. mis pechos son redonditos con unos hermosos pezones.
Mi coñito lo tengo rasurado y es una de las partes que más me gustan de mi cuerpo.
Lo que os voy a contar ocurrió hace unos días.
Resulta que salí con dos amigas de fiesta Maria y Silvia.
Maria tiene los pechos redonditos y grandes una 100, su culito es muy bonito y redondo, tiene los ojos azules y el pelo rubio, la otra tiene los pechos más pequeñitos pero es muy guapa y tiene una coñito precioso.
Después de estar de fiesta fuimos a mi casa, y al final se quedaron a pasar la noche.
Ellas no sabían que era lesbiana pero en esa noche algo tenia que ocurrir.
Estuvimos hablando un rato de nuestros ligues, y en un momento vi como se daban un beso apasionadamente, yo me excite mucho y me quede sorprendida.
Luego me dijeron que eran lesbianas, a lo que yo les dije que también era lesbiana.
Las dos me miraron y me besaron a la vez, estábamos dándonos un beso las tres juntas.
Luego empezamos a desnudarnos, haciendo un striptease cada una, primero Maria luego yo y al final Silvia.
Yo empecé a chuparle las tetitas a Maria mientras que Silvia me daba besitos en el cuello.
Yo estaba súper húmeda, así que empecé a chuparle el coñito a Maria, y Silvia me lo chupaba a mí y Maria a Silvia, haciendo como un triangulo amoroso.
Su coñito sabia a gloria, se lo chupe por todos los rincones lamiéndole el clítoris, sus gritos de placer se ahogaban en el coñito de Silvia.
Después empecé metiéndole un dedito por el culo, todas hicimos lo mismo, empezamos a gemir asta que nos corrimos casi a la vez haciendo una ola de flujos sabrosos, tragando todo lo que pude de aquel delicioso néctar.
Luego yo y Silvia empezamos a coger a Maria, Silvia le chupaba sus pezones mientras que yo le metía un dedito por el culo, Maria empezó a arquearse de placer mientras que yo le metía otro dedito mas moviendo y girándolo, mientras que por el coñito le metía otros dos dedos, sin gemido eran fuertes.
Luego se pusieron las dos en contra mío, no se como pero Maria tenia un consolador en el bolso (lo tenían planeado las muy putitas) y me lo hizo chupar, luego me lo metió por el culito, lo sacaba y metía rápido, yo gemía y Silvia empezó a darme besitos suaves en la boca hasta que al final de tanto placer tuve un orgasmo inmenso.
Luego nos fuimos a dormir y dormimos las tres juntas, y dándonos caricias.