La lluvia no cesaba cuando Tatiana luego de terminar con sus ejercicios escucha el timbre de su casa y al mirar por las cámaras de vigilancias logra ver que la persona que toca es Damián el amigo de su padre. Entonces la joven veinteañera se disponer a atender.
T – hola – con una sonrisa angelical
¿D – hola como estas? – pregunta el moreno corpulento de 40 años
¿T –bien, vos? – sosteniéndose de la puerta
D – bien, vengo a ver a tu papá – dice vestido con jean y camera rompe viento roja
T – no, no está mi papá – le dice – viene en un rato más o menos en una hora –
D – uh que cagada –
T- queres pasar igual –
D – si está muy frio –
T – si pasa que está muy frio –
¿D – y la verdad que si – mientras ingresan a la vivienda – te puedo pedir un vaso de agua? –
T – sí, ¿por supuesto ahí te sirvo – mientras le sirve el vaso (ya ambos en la cocina) – tenías que hablar algo urgente?
D – era por un tema del laburo –
T – yo también quiero un poco de agua –
D- yo tengo la garganta seca –
T – si no te molesta tomamos del mismo – dice la hermosa rubia
Él se queda sorprendido por el comentario
D – bue, no no me molesta –
T – capaz tenías problema en compartir saliva no se – se acerca a el con el vaso
Lo cual le pasa el vaso a su invitado, el cual él bebe
T – de nada – reclamando las gracias que no dio
D –gracias bebe –
Entonces ella vuelve a tomar agua
D – igual me parece raro, ¿tu papá sabe que compartís vaso con sus amigos? –
T – tranka que mi papi no sabe que estas acá –
D – ok, bueno mmm avísale por mensaje porque no me gustaría que supiera que estar compartiendo saliva del de el vaso de –
T – bueno, pero escúchame – lo interrumpe y le saca el vaso – podemos hacer algunas cosas hasta que él llegue – mientras le frota el hombro
D – no para – la aparta con sus brazos – me parece que no da, porque soy muy amigo de tu papi. A vos te conozco desde chiquitita y que justo llegue y nos encuentre en una situación rara –
T – dale no seas malo y va tardar en llegar – e intenta besarlo
¿ D– para para – aparta la cara – que queres hacer? –
T – que me cojas –
D – jajajajaj – se reí nervioso – pero yo vine a ver a tu viejo y si me ve me mata –
T – llega a las 9 y son las 7 que hay –
D – hay que yo lo conozco de chico, a vos te conozco de chiquitita –
T – pero no voy a decir nada, hasta vas a tener tiempo de bañarte – él se queda pensando – dale veni
Al llegar la puerta de la habitación de Tatiana Damián atrapó, y se besaron con pasión y ella se comenzó a bajar la calza haciendo caer al suelo, risa brotó incontenible por su cómica situación; No le importaba, nada le importaba a Tatiana, se sentía fuera de toda norma; Recordó una intensa emoción al despojarse del sujetador frente a Damián; Enseguida la sensación de aquellas manos hambrientas apretando sus pechos y la falta de delicadeza al bajarle la tanga; Luego, como en una nube, se sintió transportada hasta la cama y, al caer en ella, aquella sensación de satisfacer su fantasía de estar con el amigo de su padre ; Parecía hundirse hacia atrás como si deslizase por una acusada pendiente cada vez con mayor velocidad al mismo tiempo que sentía lejanamente como Damián separaba sus piernas y hurgaba en su concha antes de comenzar a penetrarla sin más preámbulos ya que este se bajo el pantalón mostrando su enorme pija, en ese momento temió sentir dolor, siempre necesita unos preliminares que la exciten y la ayuden a dilatar, por eso le extrañó estar tan lubricada que apenas le costó recibirle en su interior; Notó, eso sí, la forzada dilatación de su concha al recibir un grosor mayor del esperado aunque no le llegó a doler gracias a su excitación.
Damián comenzó a moverse y Tatiana detectó los estímulos que le recordaban que aquella pija la deseaba hace tiempo, otra forma de moverse, una mayor longitud que rozaba zonas muy profundas de su útero, una curvatura distinta que frotaba con más intensidad la cara superior de su vagina… Damián la besaba ya sin remera mientras ella pasivamente abría la boca ante la presión de la lengua invasora; poco a poco su cuerpo fue reaccionando y sus muslos se movieron solos hasta rodear la cintura de Damián, su vagina, obligado a adaptarse al diámetro de aquella polla le hacía sentirse llena, Roberto se movía vigorosamente en su interior provocando los primeros brotes de placer, sus brazos acariciaron la espalda de su amante mientras éste besaba su cuello disparando la incontrolable excitación que esa caricia siempre le provoca.
Damián bombeaba con fuerza y ella se sentía por fin tranquila, sin temor, sin tensión, apreciando la novedad de coger con ese hombre. Se sorprendía de su reacción, pero no la juzgaba, pensó que aquello no era tan malo, estaba sucediendo y no era tan terrible como había supuesto, a partir de ahora sabía que aquello formaría parte de su vida, un polvo cada cierto tiempo con Damián, al menos ya podía descansar y dejar de luchar.
T – aaaahahahah aaaaaaaaammmm siiiiii –
¿D – esto querías hija de puta? –
T – si esto quería papito hermosoooo!!!! Mmm –
Damián había seguido acariciando su clítoris y los primeros signos de placer comenzaron a aparecer, se sentía como fuera de su cuerpo. Damián giró hasta situarse encima y Tatiana respondió como estaba acostumbrada a hacer con sus novios, rodeó su cuello con sus brazos y flexionó las piernas para recibirle, la estaba besando y ella respondía a sus besos, lo deseaba, lo amaba, su cuerpo y su sexualidad funcionaban sin el menor desajuste.
Damián culeaba intensamente, Tatiana bajo una mano, rodeó su miembro, lo situó entre sus labios y lo movió arriba y abajo varias veces para lubricarlo con su propio flujo, luego lo situó en la entrada de su concha, se comportaba como si aquello fuera lo más normal, como si estuviera habituada a coger con cualquiera. Damián empujó y resbaló con facilidad dentro de ella. De nuevo la percepción de no estar habituada al grueso cuerpo que la penetraba la excitó.
T – aahahahah mi amor que buena garchada papito aaahhh aaaaaaaaaaaaaaagggg-
D – visteeemmm los pendejitos de hoy no seben mmm como tratar a una yegua asi mmmm –
Era agradable, pensó mientras la cogía, era más agradable de lo que había imaginado, sus piernas se elevaron y acarició sus nalgas con las plantas de los pies, Damián chupaba su cuello con fuerza, temió que éste le dejara marcas en esa piel tan sensible y planeó usar maquillaje para disimularlas. Curiosamente temió más que esas marcas la delataran ante sus compañeros que ante mí.
Damián estaba ahora de pie al lado de la cama y tiraba de su mano arrastrándola para levantarla. Tatiana quedo sentada frente a él intentando que la habitación dejara de oscilar, la tomó de los hombros y la hizo arrodillarse en el suelo, enseguida supo lo que quería y sorprendentemente no tuvo ninguna intención de negarse.
D – bueno ahora nena me la vas a chupar –
T – mira que soy buena vamos a ver si tenes aguante –
Ahí se acababa su altiva mirada, su gesto de superioridad y en algún sentido se sintió liberada. tomó la erguida pija en una mano y con la otra recogió sus testículos, la tenía cerca, brillando por el flujo de su coño, una gota transparente apareció en la punta, aspiró profundamente y el olor la excitó; Introdujo el glande en su boca y comenzó a lamerlo. De nuevo la novedad de las diferencias: una cabeza más redondeada, más oscura, el borde posterior del glande sobresalía más que el mío; La humedad en su boca se hizo más líquida y un sabor conocido excitó sus papilas, un sabor parecido al que estaba acostumbrada pero claramente diferente, ni mejor ni peor; Se fijó en la acusada curvatura hacia arriba que le permitía lamer el tronco por debajo, recorriéndolo con su lengua desde la base del frenillo hasta la blanda bolsa que colgaba rozando su barbilla, se detuvo ahí, golpeando con la punta de la lengua las dos bolas, aspirando una de ellas con su boca abierta hasta engullirla entera.
D – aaaaaagg aaaaaaaaaaaaammm mira que tengo putitas que me la han chupado, pero nunca como vos nenaaaaaaaaaaaa mmmmm
Ella escuchaba los gemidos de Damián sintió que era ella quien mandaba en ese momento. Recogió en la palma de su mano el escroto mientras volvía a saborear el glande y lo recorría con su lengua, los testículos se encogían y se relajaban en su mano cada vez que sus dientes arañaban con delicadeza la hinchada cabeza y la uña de su dedo medio se clavaba en el periné. Damián mantenía una mano en su cabello y de vez en cuando la forzaba a mirarle mientras se la chupaba. Tatiana mantenía la mano izquierda rodeando el tallo mientras su derecha seguía acariciando sus testículos, bajaba por el interior de sus muslos y retrocedía hasta tocar sus nalgas para luego volver a recoger en su mano la cálida bolsa.
T – gluuupp gluuupp gluuuppp que buena poronga!!!! –
Estaba especialmente excitada, pero si muy relajada, como si se hubiese quitado un gran peso de encima, ponía en práctica con Damián sin ningún remordimiento todas las artes que había desarrollado para hacerme desfallecer en su boca. Sintió el sabor de un nuevo brote de líquido pre seminal en su boca cuando una mayor turgencia tensó la pija en su mano. Damián retrocedió sujetándola por el cabello y la hizo andar de rodillas unos pasos con la boca abierta persiguiendo el esquivo bocado que se le escapaba de los labios, se vio obligada a arrastrarse gateando hasta situarse delante de la luna del armario,se vio en el espejo mamando la pija de Damián, chupando su pija y acariciando sus testículos, no cabía mayor experiencia.
D – aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaagggg ammmmmmmmmm –
Damián comenzó a gemir más fuerte, el sabor se hizo más intenso, otra densidad diferente a la de su saliva comenzó a llenar su boca, la sujetó fuertemente por su melena convertida en una coleta coordinando el movimiento de la cabeza y de su pija y comenzó a bombear como si se tratase de un coño.
El primer disparo de semen llenó el fondo de su paladar y la hizo separarse instintivamente, el siguiente impactó en su rostro, en su mejilla, cerca de su ojo, otro se pegó a su cabello destacando tanto el contraste del blanco sobre el negro que incluso lo percibió de reojo en el espejo, los siguientes fueron a parar a su frente y a su pecho. Damián perdía rápidamente su erección y la acercó a su boca apretando el tallo con dos dedos, Tatiana vio salir el grueso goterón justo antes de abrir los labios y engullir de nuevo su pija, el sabor de su semen no era muy diferente al mío y lo tragó, notó como uno de las manchas de semen se deslizaba desde su frente por el puente de su nariz y otra resbalaba por su mejilla.
D – aaaaahahhahahaahahahahahahahah –
. ella se lo trago todo y dijo _ bueno ahora dúchate que yo tengo que salir –
Así fue. Cuando bajaron a la cocina ella se fue dejándolo solo a la espera de su papá.
Dando a entender que esto no solo se repetiría una vez más si no que varias veces.
FIN