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Los pies de Carmen

Los pies de Carmen

Mi nombre es Ermenda, tengo 16 años y soy un loco de los pies de las mujeres.

El relato que les voy a contar sucedió hace 2 semanas ocurrió así:

Fui a casa de una amigo ha hacer un trabajo, después de un rato planeando como hacerlo lo escribimos en el ordenador y lo fuimos a imprimir, pero nos dimos cuenta de que no había papel.

Mi compañero me dijo que saldría un momento a por folios que lo esperase y que su hermana Carmen estaba dentro.

Al irse le dijo a su hermana que me quedaba y ella salio.

Yo ya conocía a Carmen, al verla me di cuenta de que tenia un pie vendado a causa de un esguince así que pude verle los dedos y eso me excitó mucho.

Yo estaba sentado en un sillón y ella vino hasta el se sentó y ni corta no perezosa puso su tobillo vendado encima de mis pantorrilla, pero si animo de excitarme aun más.

Después de un rato, no pude contenerme más y empecé a pintarle sus deditos con caritas a ella le hizo cosquillas pero no se opuso, eso si me dijo que después los borrase.

Después de un rato decidí borrárselos y ella me indico donde encontrar unas toallitas húmedas las cogí y le borre las pintadas, yo ya no podía más de excitación y comencé a chuparle el dedo pulgar, eso le molesto y retiro sus pies, pero conseguí convencerla de que me dejase que no pasaba nada, al estar chupando con sumo cuidado me di cuenta de no llevaba braguitas y que su pantalón estaba mojado por la parte de su vagina, al ver esto decidí parar pero ella me dijo q siguiera pero con el otro pie, en este caso el pie estaba descalzo y aparte de los dedos le chupe toda la planta, el empeine…, llego al tal mi excitación que no pude disimular un bulto en mi pantalón, ella lo vio y me dijo que si le dejaba hacerme una paja con los pies, eso me extraño pero me dijo q lo había visto en una peli porno de su hermano, yo accedí y ella empezó a pajearme con los pies, al poco me corrí encima de la venda y del otro pie.

Lo del pie descalzo no le importo p q enseguida se limpio, pero la venda era más difícil así que tuvimos q coger una y vendarla de nuevo, cierto es que nos quedo muy bien, antes de vendarla también le chupe el pie, esta vez fue ella la que se corrió y dejo el pantalón perdido, se cambio en mi presencia lo que hizo que casi me volviese a correr porque me mostró su chochito y como se metía un boli.

Después no tranquilizamos y pusimos la tele, y yo le masajeaba el pie, al rato vino su hermano y nos dijo que se había entretenido hablando.

Después de esta experiencia cada cierto tiempo no encontramos y le chupo un rato los pies y ella me hace una paja.

Es una chica maravillosa y aunque no es de las más guapas tiene los pies más provechosos que yo haya visto nunca.

¿Qué te ha parecido el relato?


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