Capítulo 4
- Humillé a mi ex con ayuda I
- Humillé a mi ex con ayuda II
- Humille a mi ex con ayuda III
- Humillé a mi ex con ayuda IV
-Paola. -Hola cari -me hizo reír- me parece bien, mañana a las nueve estoy en tu casa…
-Pipi. -Vale te dejo que el calzonazos me está llamando.
-Lástima que mañana trabajes Tere, pero en cuanto acabes vete para su casa, vamos a añadir otra perrita al grupo.
-Tere. -Puedo…
Así terminó el último capítulo…
Para ser sincero no sabía a qué se refería con ese “puedo”, poco me importo…
-Puedes.
-Tere. -Gracias AMO, ufffff la PUTA esta me ha puesto…
Acercó sus manos a unos de los platos que había puesto en la mesa que tenía varias clases de patés y sin usar un cuchillo, llenó sus dedos de un paté, se separó de la mesa lo justo para pasarse sus dedos llenos de paté después de separarse las bragas, por el coño…
-Tere. -A que esperas PERRA…
Lo que estaba claro es que Paola una vez que estaba excitada, le podías pedir lo que quisieras, que lo aceptaba de muy buen grado y cuanto más humillante fuese mejor, que mejor. Se tiró de rodillas y abriéndole los muslos todo lo que daban de si, llevó su boca al coño lleno de paté.
-A esta PUTA le gusta ser humillada, jajajaja.
-Tere. -Siiiii, AMO, y como lo aggggg, come, la muy PUTA, ufffffff me voy a correrrrrrr aggggg, ¿puedo?
-Es toda tuya.
La cogió con fuerza del pelo, pegándole la cara y restregándosela por el coño…
-Tere. -Agggggg me corroooooooo, ufffff, PUTA, sigueeee.
Ver la cara llena de los jugos de Tere y de pate, de Paola, me hizo reír a carcajadas, y más cuando la muy puta al sentirse libre de las manos de Tere, se dejó caer en el suelo y llevándose las dos manos a su coño, y por encima de su braga tratar de evitar correrse, o mejor dicho mearse, que fue lo que le pasó, tuvo un orgasmo tan fuerte que terminó en meada.
-Tere. -Que GUARRA, AMO, lleva razón, como le gusta.
-Vamos a la cama, deja a esta PERRA que recoja.
-Paola. – -Casi sin poder hablar- ¿Puedo dormir con usted?
-Jajajaja, no GUARRA, al sofá.
No me fijé en su cara y tampoco hubo respuesta, solo vi la cara, de orgullo, de victoria en Tere. Cogiéndola de la mano y besándola, sabiendo lo que le iba a molestar a Paola, nos fuimos al dormitorio.
-Tere. -Mañana me voy a las ocho AMO, usted se puede quedar con la GUARRA, hasta que desee.
-No PERRA, nos iremos contigo, lo mismo da llegar antes a casa de tu cuñadita.
-Tere. -Como desee, AMO, supongo que si les ha dicho a las nueve es porque el cornudo se ira antes.
No hubo más palabras, se pegó a mí, no tardando nada en quedarnos dormidos. A la mañana siguiente, sentí ruido en el dormitorio y vi a Tere moviéndose de un lado a otro, ya vestida para ir a trabajar, me fijé en que eran las siete y media pasadas…
-Buenos días PERRA.
-Tere. -Buenos días AMO, lo iba a despertar ya, su otra PERRA, le está preparando el café, le he puesto su ropa en la silla y toallas limpias en el baño. ¿Quiere que llame a la PERRA de Paola?
-No, voy a darme una ducha rápida y bajo, ¿Esta ya vestida?
-Tere. -Si AMO, las dos estamos preparadas para cuando usted diga, yo me iré en el autobús…
-No, te acercamos nosotros, por eso no te preocupes, vamos con tiempo de sobra.
La dejé salir y me metí en la ducha, no tardando en estar abajo junto a Paola y Tere, esta última llevaba leggins y camiseta. Paola con la misma ropa que ayer, aunque como pude comprobar más tarde se había puesto un conjunto de lencería que llevaba en el bolso, así como las medias que al ser negras lo mismo que las que llevaba, no distinguí.
-Tere. -Nos tendríamos que ir ya, AMO.
-Si, vámonos, y tú ve escribiéndole a tu “cari”, jajajaja, dile que te avise cuando se vaya su cornudo, que estas cerca.
Íbamos de camino a dejar a Tere, y Paola me leyó el whatsApp que le había puesto a su amiga, quería agradarme, se lo había escrito tal y como se lo dije, recalcando la palabra cornudo escribiéndola en mayúsculas.
-Paola. -Jajajaja.
Su risa llamó la atención de Tere y mía. Nos mostró la contestación “No lo sabes bien, jajajaja, hace rato que se ha ido”
-Jajajaja, dile que te espere bien PUTA, que deje la puerta abierta y que te espere de rodillas en su dormitorio.
-Paola. -No creo que eso le guste AMO, pero ahora mismo se lo escribo.
Así lo hizo, poniéndose roja al recibir la respuesta.
“Uhmmm que PERRA me acabas de poner, aceptó, siempre que después me obedezcas en todo”
Tras leerlo y comprender que le gustaba mandar, le asentí.
“De acuerdo”
-Tere. -Ufffff AMO, ya se me nota la humedad a través de los leggins.
-Jajajaja, en cuanto termines llama a esta GUARRA y te dará instrucciones.
La dejamos en la puerta de su trabajo, que no estaba muy lejos de la casa de Pipi y en menos de diez minutos estábamos en la puerta…
-Pregúntale si está preparada.
Le pregunto, recibiendo la respuesta afirmativa en dos segundos…
-Paola. -AMO, ya está preparada, uffff estoy nerviosa y muy cachonda…
-Jajajaja, tranquila PERRA, de una forma u otra todo va a salir bien, y creo que va a ser a nuestro favor.
No hubo palabras, tuvimos suerte de aparcar justo en la puerta, seguí a Paola dándole un poco de espacio por si no estaba como le había indicado. Nos encontramos la puerta abierta, solo tuvo que empujar un poco. El silencio era sepulcral y la luz muy tenue, casi a oscuras, solo se veía una luz en lo alto de las escaleras, que supuse y acerté que era de la habitación de Pipi. Dejé subir a Paola y esperar a que abriese del todo la puerta de la habitación, y tras comprobar que estaba en posición con la mano me indico que subiese. Al entrar en la habitación y situarme junto a Paola, la vi de rodillas, llevaba un corsé de cuero negro, a juego con las medias y los zapatos y el tanga negro que llevaba del que solo se le veía la tira que se incrustaba en su culo bastante gordo, tenía las manos atrás y para nuestra sorpresa se había puesto una máscara que como pude comprobar solo tenía el hueco de la nariz y la boca, por lo que estaba totalmente cegada y casi no podía oír y un collar del que pendía una cadena.
-Pipi. -Hola, uhmmmm te huelo, espero que te guste esta sorpresa al igual que espero que tú luego cumplas.
Paola que ya venía aleccionada, al verla con la máscara se quedó un poco parada. Me acerqué a Pipi y viendo el tipo de máscara me pegué al oído de Paola…
-Cierto que te ha olido, supongo que ha oído tus tacones, sigue con el plan.
Asintió, cambiando un poco con lo que le había ordenado, ya que cogiéndola de la cadena.
-Paola. -En pie PERRA -noté como Pipi se estremeció al sentir esa palabra- quítate el tanga ¡¡¡ya!!!
Con una destreza asombrosa se sacó el tanga, dejándolo caer al suelo, sintiendo como Paola tiraba de la cadena y la arrastraba hasta la cama…
-Pipi. -Uhmmm viene con ganas la SEÑORA.
Paola me miró como no entendiendo nada, se desnudó quedándose con un conjunto de braga y sujetador precioso de encaje negro, sin poder evitar que se le notara su excitación a través del sujetador, sus pezones estaban tan duros que atravesaban el encaje de este. Se tumbó en la cama y tirando de la cadena…
-Paola. -Así me gusta PERRA, que seas obediente, cómeme el coño…
Paola lo hizo bien, se colocó de tal forma que para comerle el coño, su postura era obligadamente a cuatro patas, dejando su culo, totalmente expuesto y perfecto para ser usado.
-Pipi. -Uhmmm, este coño está chorreando SEÑORA, tantas ganas tienes de…
No pudo seguir al sentir mis manos agarrar con fuerza sus caderas.
-Paola. -Te la debía ZORRA.
-Pipi. -¡¡¡Qué!!! ¡¡¡Quién!!!…
-Paola. -Calla PUTA…
Aprovechando que no podía moverse, Paola la tenía fuertemente agarrada de la cadena y yo de las caderas, llevé mi polla a su coño. Hubiese preferido el culo, que uffff, pero no quería tensar mucho la cuerda…
-Uffff, esto por usar a mi PERRA sin permiso GUARRA.
Que estaba cachonda era evidente, mi polla se deslizo en su coño sin ningún tipo de dificultad.
-Pipi. -Agggggg, -retirándose lo que Paola la dejaba- no sabía que esta PERRA, tenía AMO, aggggg, siiiii, ufffffff, como me gusta ser usada, aggggg, me corrooooooo.
Paola me miraba extrañada, de ver y oír a su amiga, sin poder evitar…
-Paola. -Aggggg, sigue PUTA, traga, traga, aggggg.
No sé si se lo estaba haciendo muy bien o si la situación la tenía así, el caso es que soltó un squirt con tanta fuerza que casi ahoga a Pipi, que como pudo se retiró, haciéndome reír al ver como parte de la corrida chocaba en la máscara y rebotando iba a caer en el cuerpo de Paola.
-Ufffff, vaya para de GUARRAS, limpia a mi ZORRA.
Me entendieron perfectamente, Paola dejó caer la cadena y Pipi, echó su cuerpo lo justo para que mi polla no se le saliera del coño y con ansia lamio el cuerpo de Paola.
-Me corroooo agggggg, PUTAS…
Al sentir que me corría, Pipi hizo intención de salirse…
-Pipi. -Noooo, no tomo nada, por favor…
No pudo hacer nada, al ver sus intenciones, la cogí con fuerza del pelo y pegué mi polla con dureza a su coño.
-Me corro donde me dé la gana PUTA.
Durante un corto espacio de tiempo se hizo el silencio, solo se oía la respiración agitada de los tres.
-Paola. -Ufffff, AMO, nunca me había corrido así, como me ha puesto ver a esta PUTA así.
Me salí del coño, retirándome lo justo para observarlas y terminar de desnudarme, hacía calor en la habitación. Pipi no varió su postura, hasta que me acerqué y abriendo la cremallera de la máscara se la quité y tirando de la correa, de mala manera la tiré al suelo.
-De rodillas PUTA…
-Pipi. -Le conozco, usted es amigo de mi cuñada…
Se cortó un poco al ver como Paola se colocaba junto a ella.
-Paola. – ¿Puedo hablar, AMO? -asentí- fue mi novio y ahora es mi AMO.
-Pipi. -Ahora me acuerdo y de haberlo visto por el barrio.
-Ya vale, da lo mismo que me conozca o no, el caso es que las dos sois igual de PUTAS. -Pipi fue a hablar- Espera PERRA, ya tendrás tiempo de hablar, ahora me toca a mí, voy a ser claro y directo, si quieres seguir disfrutando de esta GUARRA, tendrás que mostrarme obediencia absoluta, harás y estarás con quien yo decida, respecto al cornudo de tu marido y tu familia, lo respetaremos siempre, nadie que no deba saberlo, sabrá lo PUTA que eres. No sé si hoy te has entregado a Paola porque te gusta o por todo lo contrario, para hacerla tu sumisa. -En ambas vi cara de sorpresa, sobre todo en Paola- Ahora puedes hablar.
-Pipi. -Soy Dominante -levantado la mirada- solo con mujeres, SEÑOR, pero me gusta ser sometida por un hombre o mejor dicho por un AMO, solo que cuando me casé lo abandoné todo, pero algo que usted sabrá mejor que yo, es que al final tanto un lado como el otro vuelve a salir.
-Y con Paola viste la oportunidad de someterla, y de volver a ser tu misma.
-Pipi. -No, SEÑOR, cierto que de siempre he deseado a su PERRA, que no sabía que lo era, pero ya hace tiempo que volví, no a tener AMO, eso es más complicado, el cornudo es muy celoso, pero si el tener sumisa, hace tiempo que mantengo una relación, digamos que estable con dos.
-Vaya, eres una caja de sorpresas, ¿las conoce Paola?
Por primera vez la vi dudar y hasta ponerse algo nerviosa, lo que me dio a entender que Paola la tenía que conocer.
-Pipi. -Una es la hermana de mi cuñada Tere.
-Paola. – ¿Celia? Pero si ella está casada con Mabel…
-Pipi. -Si, de hecho yo le presenté a Mabel, ella trabaja conmigo y fue donde la sometí. Ella está casada con Celia, pero es mía, se casó por orden mía.
-Sigue, no pares ahora, ¿Celia?
-Paola. -Si, porque que yo sepa hablas pestes de ella por ser lesbiana… -al ver como la miré se calló-.
-Pipi. -Todo es un paripé, el miedo a que dirán, ya conocen a mi familia, pero a la vez me ha servido para poder estar con ellas sin sospechas, por trabajo las tengo que ver mucho.
-Madre mía que familia, una PUTA y el hermano MARICÓN.
Eso le pilló por sorpresa, no pudo evitar que se le notara.
-Pipi. – ¿Usted lo sabe?
-Jajajaja, yo y media Graná, y no es que lo sepa es que hasta lo he visto. Pero eso es otro tema, ve a Celia.
-Pipi. -Fue el mismo día de su boda, ufffff, lo recuerdo y me humedezco. En casa de Mabel, yo no fui a la boda, me fui directa a su casa a esperarlas. La boda fue rápida en el juzgado, un día de diario, así que no tardaron en llegar…
La conversación me estaba excitando y tuve que hacer un esfuerzo para no volver a usarlas, pero quería darle tiempo a Tere, sabía que no iba a tardar en aparecer, los celos tienen eso.
Pipi. -Como las dos iban vestidas con traje de pantalón, la que se vistió de novia fui yo, bueno solo me quedé con un conjunto de lencería blanco a juego con las medias y los zapatos, preparé la cama todo lo bien que pude para someterla y por si daba problemas…
Pipi. -Entraron besándose y desnudándose, por orden mía Mabel desde el primer día la fue sometiendo, se fue convirtiendo en la parte dominante de la relación y no crea que no le costó, ella es muy sumisa, diría que más esclava que sumisa. En parte fue lo que la llevó a precipitar la boda, el vivir juntas, de hecho Celia está enamorada, pero Mabel solo cumple mis deseos, algo que quedó claro ese día…
Así fue…
-Mabel. -Uffff, que ganas tenía de tenerte aquí, ¿vas a cumplir tu promesa?
-Celia. -Si cariño, una promesa es una promesa, te dije que si te casabas conmigo, este día haría lo que me pidieses… -Se quedó callada al entrar en el salón y verme sentada en el sillón en lencería y con dos collares en mis manos- ¿Qué? ¿esto qué es?
-Mabel. -Lo prometiste cariño…
-Celia. -Si claro que te lo prometí, pero que pinta ella aquí.
-Pipi. -Las cosas claras Celia, ella es mía, se ha casado contigo porque yo se lo he ordenado, ni te quiere ni te va a querer jamás. Me pertenece y solo hará lo que yo le ordene ¿o no es así PERRA?
-Mabel. -Así es AMA, yo soy suya y como usted me ordenó aquí le traigo a esta PERRA.
-Pipi. -Ya sabes que hacer.
Mirando a Celia se quitó la ropa, quedándose solo con un conjunto precioso de tanga y sujetador blanco, y poniéndose de rodillas gateo hasta mí y besando primero mis pies se quedó de rodillas, momento que aproveché para ponerle su collar…
-Mabel. -Gracias AMA, creo que no hubiese podido aguantar un día más sin usted.
-Pipi. -Dos opciones tienes, la primera es coger la puerta e irte, desaparecer de su vida, porque te aseguro que jamás la volverás a ver, o te pones este collar -lo tiré a sus pies- te desnudas y te arrodillas ante mí, convirtiéndote en mi sumisa desde este momento. Y antes de que decidas que hacer, te diré que cada encuentro que has tenido con mi sumisa ha sido grabado, por si se te pasa por la mente ir con el cuento a alguien. Tienes hasta que me corra. Empieza PERRA.
Cerré los ojos y abriéndome de piernas, aparté el tanga que ya estaba chorreando, y sentí la lengua de Mabel en mi coño. Yo no las tenía todas conmigo en que se quedara, pero Mabel me había asegurado que la tenía tan enganchada que por no perderla iba a hacer lo que hiciese falta. No se equivocó, estaba a punto de llegar al orgasmo, cuando sentí como unas manos subían mi sujetador por encima de mis tetas y una boca se apoderaba de mi pezón.
-Mabel. – -Separando su boca de mi coño- uhmmmm, se lo dije AMA, está preparada.
Abrí los ojos y vi que se había desnudado del todo, como supe luego, Mabel le había pedido que no llevase nada bajo su ropa. También pude observar como una de las manos de Mabel entraba y salía con fuerza del coño de Celia, lo que me puso más PERRA.
-Pipi. -Agggggg, me corrooooo, agggggg, siiiii, como lo vamos a pasar.
-Celia. -Me corrooooo, agggggggggg, ufffffff.
-Pipi. -¡¡¡Qué coño haces!!! ¿Quién te ha dado permiso?
La tiré de mala manera, quería o más bien necesitaba dejarle claro desde el primer momento su papel en ese matrimonio. Me quité de mala manera a Mabel de entre mis piernas y cogiéndola del collar que previamente se había puesto, la llevé a rastras a la habitación. Me seguía como podía, sus rodillas sufrieron algún que otro arañazo en el camino. Delante de la cama, la solté, dejándola de rodillas, le solté un bofetón, ufffff, eso me pone mucho SEÑOR, por primera vez me fijé en su cara, el rímel corrido y algunas lágrimas corrían por sus mejillas. La levanté y tumbé en la cama, ese fue y ha sido hasta el momento la única muestra de cariño que le he mostrado. Acaricié su cara y besé sus lágrimas…
-Pipi. -Tranquila perrita, al final disfrutaras. -Era una muñeca, se dejaba hacer, lo que me vino muy bien para poder atar sus manos y sus pies…- PERRA ven aquí.
A cuatro patas y con una sonrisa triunfante en la boca, apareció por la puerta Mabel…
-Pipi. -Cómele el coño, se lo ha ganado, prepárala.
-Mabel. – ¿Cuándo la va a desvirgar AMA?
Sin que se lo esperara le solté un bofetón con todas mis ganas.
-Pipi. -Cuando me salga del coño PUTA, vuelves a no ser nada…
-Mabel. -Perdón AMA, lo siento, esta PERRA sabe que no es nadie…
Lo sentía de verdad, sus lágrimas daban fe de ello.
Iba a seguir contándonos la noche de bodas, cuando sentimos la puerta. Ambas se miraron extrañadas, yo no tanto, sabía perfectamente que era…
CONTINUARÁ…
Soy Amo, me encanta la dominación, me gusta tener, someter y humillar a parejas y a quien se quiera iniciar, necesitar un tutor o conocer este estilo de vida.
Mi Skype es ra_ul1967, mi correo ra_ul1967@hotmail.com y mi Telegram @Amo_Leo, hablo y respondo a todo el mundo, siempre que lo haga con respeto.
Nota del autor: Soy cómo escribo, soy exigente, dominante y no suelo dar segundas oportunidades, cuando ordeno algo es para ser obedecido, algo que suelo advertir a quien desea ser adiestrada o entregarse a mí. No trato con hombres solos, aunque no me importa hablar con ellos. Ni miento, ni juego, ni sigo ni persigo a nadie por muy buena que este o por muy sumisa o perra que sea.
No entiendo a quien estando advertida o advertidos en caso de parejas sumisas, se enfadan conmigo y hasta me tratan de mentiroso o manipulador cuando corto con ellos cuando no cumplen.
Seguro que en la red hay quien los o las acepte, yo no.