Capítulo 4

Dominación de los jefes de mi mujer lV

Como es suponer los días posteriores nada fue igual, dentro de la normalidad, el ambiente era un poco incómodo para mí, no hubo relaciones sexuales con los compañeros pero no cesaban los comentarios fuera de, las, las risitas, todo ello por supuesto fuera de la presencia de don Gustavo.

No me hacían precisamente la vida imposible pero los gestos, como cuando coincidíamos en los vestuarios y pasaban delante de mí, diciendo burradas, lo que harían cuando estuviéramos a solas o lo bien que lo pasaron aquel día en la sala de reuniones.

Debo reconocer que tuve tentaciones de dar carpetazo y salir de la vida de todos de, don Gustavo, don Pablo y en especial de la de Sonia a la que apenas veía fuera del trabajo, ella ya tenía su macho. Y no lo hice, no abandoné porque en resumida cuenta me sentía agradecido a don Gustavo por haberme dado la oportunidad de descubrir otras formas de placer, la de tenerlo, orgulloso de mí, de mi sometimiento.

En aquella encrucijada mental estaba en aquellos tiempos cuando un día le gustaba me llamó a su despacho.

. Juanita, tengo la primera oferta de dos de tus compañeros ,les he convencido para que hagan un dos por uno ,ya sé que estos días no han sido fáciles y yo he estado muy liado con mi puta y no es por el dinero, pero sé que reafirmando tu sumisión te sentirás más emputecida que al final es lo que quieres y yo tengo que salir de viaje con ya sabes quién.

.como usted desee don Gustavo.

. Perfecto entonces ,pues mañana a la salida te esperas a por Miguel y José que te recogerán en el aparcamiento .elige bien la ropa interior y no quiero que me den ni una sola queja entendido?

Y diciendo esto me despachó con la palmada de rigor el trasero y me cerró la puerta. Yo me dirigí hacia mi mesa y acto seguido llegó José.

. Ya sabes la gran noticia verdad?

.si, susurré agachando la cabeza.

Me puso la mano en el hombro y se fue alejando sin dejar de mirarme. Hacía tiempo, quizás demasiado, pero solo las imágenes que se agolpaban en mi mente hicieron que tuviesen una media erección.

La jornada acabó tal y como había comenzado en los vestuarios, vacilándome con lo bien que lo pasaría mañana .pero esta vez lejos de agachar la cabeza le miré a la verga y sobre todo la gruesa de José, muy apetecible la verdad, tan cerca de mi cara y con ese olor tan agradable, se lo hubiera comido allí mismo ,pero el compromiso era claro, mañana, así que me vestí sin olvidar mis bragas y me fui a la puerta hasta que salió el último. Cerré las luces, la puerta, y me quedé allí como últimamente hacía esperando el día siguiente.

A la hora de la entrada,yo ya estaba en mi puesto de trabajo, ese día solamente estaba Don Pablo,puesto que don Gustavo y Sonia estaban de viaje,me resultó extraño que don Pablo me ignorase,supongo que no le gustó el saber que estaría en manos de otros y él no podría dirigir la situación.

Llegado la hora cerré y bajé al parking esperé impaciente veinte minutos.

. Bueno Juanita sube atrás, dijo Miguel

. Dónde vamos? pregunté mientras abria la puerta y me sentaba

.shhhh, ya lo verás.

Nos dirigimos a un barrio lejano, aparcamos y me dijeron que lo siguiera, llegamos a un bar de ambiente entramos no había mucha gente y nos sentamos en una mesa reservada y pidieron tres cervezas.

. Mira Juanita, v que te vamos a follar y te las vas tragar, eso lo sabemos todos pero no quita que nos divirtamos un rato.

Supuse que algo tenía la bebida, porque aunque no me hacía falta me sentía muy desinhibido aceptaba sus tocamientos,sus bromas,sus manos cogían las mías y la llevaban hacia ambos paquetes sin importarle que nos estuvieran mirando, yo notaba la durezas que tenían,lo mismo que la mía era nula cosa que ellos comprobaban entre risas.

. Juanita, tu amo te ha llevado alguna vez a un cuarto oscuro?

.no, a don Gustavo,le gusta exhibirme.

. No,? No que?

. No, Sr.jose.

. Así está mejor, bueno hoy lo vas a probar, se lo puedes contar ya que él no nos puso ninguna condición,al contrario.

Sería aproximadamente la una de la madrugada y el pub estaba completo, cosa que no los impedía el tratarme como a una zorrita delante del respetable público, como he dicho anteriormente yo estaba totalmente entregado, y recibía todos sus juegos con especial agrado y excitación.

. Ven, que vas a probar.

Me llevaron a una puerta que abrieron y con una reverencia burlona me invitaron a entrar dentro, habría otra puerta, la oscuridad era absoluta, me llevaban de la mano y una vez dentro me arrodillaron delante suya y me dieron su miembro para que los mamara,cosa que ese con devoción sobre todo el grueso de José. Iba alternando entre uno y otro cuando de repente sentí unas manos grandes que me agarraban de la cabeza y la hizo girar hacia atrás, simplemente me dejé llevar agarré las poyas de Miguel y José y sin soltarlas me dediqué a hacer una felación a esa nueva y desconocida, su sabor era amargo,pero eso no impidió que siguiera hasta que en breve segundo sentí un chorro caliente dentro de mi garganta,como soy muy esmerado no dejé que se cayeran ni una sola gota al suelo tragando todo el lefazo con un sabor tirando a fuerte.en la oscuridad escuche la voz de miguel diciendo:

. Nosotros salimos un momento fuera tú te quedas aquí y cuando te llamemos sales.

y guardando sus vergas me incorporaron y salieron. yo empecé a tantear a oscuras, habría cinco o seis personas, más alto, bajo, gruesos, delgado,con pelo, calvos, ellos también hacían lo mismo me acariciaban, yo no me resistí y empecé a tocar su miembro erectos,en poco tiempo me rodearon y empecé a pajearlos y a chupar tanto vergas como huevos, de repente zas…un salpicón ardiente cayó en mi cabeza,casi instantáneamente otro en mi mano y así sucesivamente. yo estaba súper excitado aunque no pudiera tener una erección.estaba haciendo lo que me pedía el cuerpo con extraños y con solo la sensación del tacto y el olor,ese olor al sexo a semen, a sudor, poco a poco y tras descargar se iban alejando,escuchandolos salir por la puerta me quedaría unos cinco minutos más o menos a solas en la oscuridad embarrado y caliente,al cabo de ese tiempo oí como me llamaban.

. Juanita, sal ya.

Salí y el aspecto debería de ser muy cómico porque Miguel no pudo contener la risa.

.anda zorra que vas bonita, vamos.

Y allí que salía yo escoltado por mis propietarios temporales,mientras por donde pasaba me miraban sabiendo que algunos de esos llevaba su simiente ya reseca en mi piel.

. Venga guarra,súbete atrás que vamos a mi casa a que te limpies. porque no pretenderás que ahora que nos toca disfrutar a nosotros lo hagamos estando hecho una mierda como estas.

. Si, Sr.

Me monté tal y como me dijeron,llegamos a su casa y primero me ordenaron tirar la ropa a la basura porque estaba toda llena de chorreones y que me duchara yo primero y a conciencia. Mientras ellos observaban no dejen ni un centímetro sin limpiar con una esponja dura que me dieron, me enjuague y salí me dieron un batín corto de raso.

. Y y ahora que estás limpia nos lavas tú a nosotros se metieron los dos en la ducha era espaciosa los enjabone acariciando sensualmente su cuerpo, porque sabía que eso era lo que querían,empecé por sus cabezas continué por el pecho, espalda, piernas y pies dejando el postre para el final. No use la esponja en japonés con mis manos y fui lavando masajeando sus vergas tiesas y duras como mástiles.

. Aaaaah , que bien lo haces zorra. Pero para que no quiero correrme ya, quiero que dure. Dijo Miguel.

. Yo no tengo ese problema, me he tomado la pastillita azul y vamos a durar,ya verás como vamos a durar. Tengo que amortizar lo que me has costado.

Salieron de la ducha y los seque de la misma forma suave. He de confesar que yo tenía una mezcla de nerviosismo porque no sabía cómo o qué esperaban de mí. fuimos al cuarto y como sincronizados se sentaron en la cama, ya me dirigía a mamar de nuevo cuando me pararon.

. No Juanita, primero limpieza de huevos.

Me incline lo más posible para lamer un par de huevos gordos que apenas cabían en mi boca.los lamía, pasaba mi lengua por el Pireo hasta tenerlos todo lleno de saliva. Mirándolos a los ojos fui introduciendo sus glandes alternando, primero el de Miguel y luego el champiñón que tenía José , lubricandolo bien ( por mi integridad anal , sobretodo).

. Que ganas te tenía desde el otro día maricon,

dijo Miguel levantándome y tirándome boca arriba en la cama, quedando mi cabeza fuera de ella. Me la puso en los labios y dejé que fuera entrandola, empezó a follar la boca produciéndome arcadas, ya que comenté era larga y fina . Mientras el otro pellizcaba mis pezones, cuando cogieron forma, los chupo y mordió llevándome a un placer extremo, pero sin llegar a correrme, me dieron la vuelta colocándome unas almohadas en el vientre, me daban nalgadas poniéndome los cachetes ardiendo, note una humedad en mi ano, era mi propia saliva en la pija de Miguel invadiendo cm a cm mi ano. José se colocó delante pidiendo , ordenando que me la tragara, me costó pero al final entro bien , Miguel seguía penetrando cada vez con más rabia sin dejar de darme azotes, hasta que aumentó el ritmo descargando en mi recto y desplomandose en mi espalda, cosa que facilitó que el pollón que tenía en la boca entrará más aún.

.zorra corre, ve a vaciar la lefa que tienes dentro que me toca a mí .

Ande como pude dolorido hasta el bidé y me estuve lavando. Volví como perra en celo a por mi premio. De rodillas demostrando una vez más mi sumisión. Me subí a la cama, pero esta vez José me saco las piernas de ella , me quería follar como una hembra, separó mis piernas y las puso en sus hombros, tomo un tarro de vaselina y se impregnó bien, cosa que agradeci, por que sentía como mi ano se partía a cada milímetro que entraba, parecía imposible pero entro al completo, su follada fue como imagine, impresionante, me dolía,me gustaba, no quería que parase nunca,

. Se que esto te va a encantar, lo hago por ti, perra sumisa.

Y diciendo esto entro todo dentro de mi y con sus manos rodeo mi cuello, cuando el quería aflojaba para que pudiera gemir o simplemente respirar.

. Quiero oírte decir que eres una puta.

. Si, Sr José soy una puta.

.y qué más?

.una zorra.

Y?

Quiero que me inunde de leche Sr. José. Deseo complacerle.

Volvió a apretar mi garganta hasta que me puse creo que más que colorado y en eso dio tres empujes más y me lleno el recto mientras me soltaba para poder respirar.

Se quedó unos instantes dentro, pero no perdía erección, supongo que por el tema de la viagra. Al poco se salio soltándome las piernas y saliendo rios de leche de mi interior.

Buuuuuuuf , de lujo Juanita, descansa un rato que te lo has ganado, pero seguimos después eeeee?

Continuará…

Juanjocriado59

Continúa la serie