Dos tías puritanas y un sobrino cabrón II

Capítulo 2

Le solté un bofetón con todas mis ganas, me estaba aficionando…

-Tú decides…

Decidió, vaya si decidió, me adelantó y con la seguridad de que su hermana no se iba a despertar, me cedió el paso…

Así terminó el último capítulo…

…Agarrándose fuerte a mi brazo, como si fuese una niña chica, al atravesar la puerta. Cerré y con delicadeza conseguí soltarla de mi brazo…

– ¿Seguro que no se despierta?

-Belén. –Segura no, segurísima ahora veras…

Se acercó a ella y con ganas le soltó un bofetón, más fuerte incluso que el que le acababa de dar a ella.

-Jajajaja, creo que no es la primera vez tita.

-Belén. – -Viéndola sonreír por primera vez- sí, es la primera vez, y no sabes lo bien que me he quedado…

– ¿Y si se llega a despertar? -acercándome a ella, con mi polla dura y más tras ver la hostia que le acababa de soltar – ufffff, cómele la boca y saca el culo tita.

Me miró con cara de terror, se le borró la sonrisa de golpe…

-Belén. -Por favor Raúl, ese me da asco, ya te -le volvió la rojez- he chupado tu pito…

-Se llama polla tita.

La cogí con fuerza del cuello y pegué su boca a la de su hermana. Se resistía, hasta que sintió en su culo un azote fuerte, aunque solo pegó su boca a la de su hermana, para mí fue suficiente. La tuve que hacer subir a la cama y ponerse de rodillas, para poder follármela sin problemas de altura… Giró su cabeza…

-Belén. -Con cuidado ya sabes…

Fueron sus últimas palabras antes de soltar un grito de dolor. No estaba yo para miramientos, y de un solo golpe la penetré, penetré su coño mojado, encharcado diría yo y estrecho.

-Agggggg, ufffffff, quien me lo iba a decir a mí que iba a desvirgar a una madurita y encima tía mía, jajajaja.

Empecé a entrar y salir con fuerza de su coño, viendo cómo empezó a besar a su hermana, primero con mesura, pero a la vez que yo aumenta el ritmo de la penetración ella besaba con más ganas a su hermana, solo se separó…

-Belén. -Me corrooooo, gracias, gracias, sobrino, ufffffff, sabe bien mi hermana, sigueeee.

Vaya si iba a seguir, di por sentado que ya era menopáusica, y me iba a correr dentro y a no tardar…

-Ufffff, siiiii, que coño tienes tita, ufffffff, como lo vamos a pasar, me corroooo, agggggg, siiiii.

-Belén. -Siiiii, otroooo siiiii, agggggg, sí, sí, sí.

Me salí de su coño, dando fe de que la acababa de desvirgar, por sus piernas caía mezclada con sus jugos, bastante sangre.

-Límpiame la polla tita.

No sé porque me gustaba remarcar lo de tita. Esta vez no hubo dudas, ni asco, se bajó rápidamente de la cama e hincándose de rodillas, se metió mi polla en la boca.

-Vale ya tita, ve a lavarte, te espero en la salita.

Ciertamente no era tarde, aún no habían dado las once de la noche. Con una sonrisa de agradecimiento se levantó y se fue a su baño, mientras me acerqué a Vi, la destapé y metí mis manos por el escote de su camisón, no sin trabajo, se lo tuve que desabrochar y con ganas y riesgo de despertarla le apreté los pezones con ganas. Se movió, lo que hizo que sacará las manos, hasta que vi que seguía profundamente dormida. Me puse de rodillas en la cama y con descaro le pasé mi polla, limpia pero con la saliva de su hermana, por sus labios y por su cara. Me bajé de la cama, dándome cuenta de que la sábana tenía alguna que otra mancha de la sangre y jugos de Belén, tampoco hice intención de volver a abrocharle el camisón. Me giré y me encontré con la mirada temerosa de Belén al ver lo que acababa de hacer y sobre todo como la había dejado…

-Belén. -Raúl, creo que nos hemos pasado, por favor déjame limpiarla y cerrarle el camisón…

-Tira para el salón tita, no te preocupes por ella, y ni se te ocurra tocarla cuando entres a dormir.

Hizo intención de coger del suelo el camisón y las bragas, y al ver mi mirada de desaprobación, solo le pegó una patada metiendo las prendas bajo su cama y fue tras de mí al salón. Esta vez me senté en el sillón, el sofá no es que estuviera muy limpio…

-Belén. -Tendré que limpiar esto antes de irme mañana, porque…

-Déjate ya de limpiar o de tener cuidado con lo que piense o diga la tía, ¿tanto le debes?

Agachó la cabeza y se puso roja, seguía delante de mí sin saber que hacer…

-Belén. -No es eso, -con la cabeza le dije que se sentara en el sofá, haciéndolo sin importarle lo manchado que estaba- me he acostumbrado a ella, a dejarla tomar las decisiones, y no sé, de siempre, desde que salimos de Granada hemos estado unidas.

-Por mucho que lo quieras justificar, no lo voy a entender, tienes un trabajo, a no ser que esté equivocado, es de mucha responsabilidad, y supongo que un buen sueldo, como para depender de la tita Viky.

Por primera vez vi rebeldía, esas palabras le molestaron…

-Belén. -No estas equivocado en eso, tengo un sueldo y una posición social y laboral muy por encima de Viky, así que no dependo de ella para nada, es más económicamente depende más de mí que yo de ella, me has…

– ¿Te he ofendido?, no esperes que me disculpe, porque más razón tengo, pero esto lo arreglo yo…

Saltó como un resorte, poniéndose de pie, enfadada y señalándome con el dedo, que es la cosa que más odio en este mundo…

-Belén. -Te estas equivocando, ya me estoy arrepintiendo…

Me levanté y encarándola…

-¡¡¡De que te estas arrepintiendo tita!!!, ¿de qué te haya follado?, ¿o de que este aquí?

-Belén. -¡¡¡De todo!!!

No me molestó que me lo dijera, me molestó que me lo gritara. Estaba furioso, a la vez que excitado, me había vuelto a empalmar. Me pegué más a ella y sin dudarlo le solté un bofetón, fuerte, tanto que empezó a sangrar por el labio, y sin darle tiempo a reaccionar la empujé sobre la mesa, aplastando sus tetas y su cara de muy mala manera, de tal forma que a pesar de sus esfuerzos por soltarse no podía y con la mano libre apunté mi polla y se la metí en el coño…

– ¿De todo tita?, tranquila GUARRA, mañana cuando vuelvas del trabajo no estaré aquí, pero ahora te voy a follar, te voy a dejar bien servida, para que veas lo que es un macho.

Empecé a entrar y salir de su coño con brusquedad, a la vez que azotaba su gordo culo y le escupía en la espalda y en su pelo. No era el único excitado, no tardé en sentirla gemir en ver cómo se agarraba con fuerza a la mesa y como…

-Belén. -Me corrooooo, perdona, aggggg.

Sentí por mis piernas su corrida, lo que me llevó a salirme de ella y apuntando a su espalda, me corrí… Me giré y sin mirarla, sin hablarle, me iba retirar a mi habitación, entre furioso y satisfecho, y esa misma furia hizo que me girase otra vez y al ver que seguía sin moverse, apoyé mi polla en su espalda y me meé, era la primera vez en mi vida que lo hacía. Terminé y esta vez sí, me fui a mi habitación, me lavé un poco y me metí en la cama…

A la mañana siguiente me desperté sobre las siete y media, y al salir de la cama para ir a la ducha me fijé en que en el suelo, junto a la puerta, había un papel doblado. Intrigado lo desplegué…

“Por favor perdóname Raúl, no te vayas, no volveré a hablarte mal, por favor, por favor.”

Me sacó una perversa sonrisa, me fui a la ducha y como no tenía pensado salir, por ahora, me puse el mismo pantalón corto del día anterior y una camiseta limpia y salí en busca de Marga, encontrándomela en la cocina…

-Buenos días Marga.

Se tensó al oírme, se giró y me sonrió…

-Marga. -Buenos días Raúl, no las tenía todas conmigo de que siguieras aquí, jajajaja.

La sonrisa le fue cambiando, se puso nerviosa al ver cómo sin apartarle la mirada me acercaba. Me pegué a ella, que fue retrocediendo hasta chocar con la encimera. Sin encontrar ningún obstáculo por su parte, solo bajó la cabeza, metí mi mano bajo el vestido, siendo ayudado por ella, que se abrió de piernas, lo que me sacó una sonrisa, no tardando en notar como había roto los pantys y no llevaba bragas, además de notar que su ya depilado coño estaba chorreando…

-Uhmmmm, veo que quieres más GUARRA.

-Marga. -No soy una GUARRA, solo…

Cogiéndola con fuerza del pelo y encarándole la mirada, le escupí en su cara, en sus gafas…

-Eres una GUARRA, por eso estas aquí, por eso te has abierto de patas. ¡¡¡dilo!!!

-Marga. -¡¡¡Siiii, soy una GUARRA!!! ¿contento?

-Por ahora, ponme un café con leche y ven a desayunar…

Fue a decir algo, cuando me vio sentarme y sacarme la polla, que ya estaba dura, del pantalón de deporte, entendiendo perfectamente a que desayuno me estaba refiriendo.

-Marga. -Viky no tardara Raúl…

-¡¡¡Me tenéis hasta los cojones!!! Me importa una mierda mi tía.

Me levanté y con brusquedad la cogí del pelo y la tiré al suelo, sin importarme si se hacía daño.

-Marga. -Vale, vale, no te pongas así.

-¡¡¡Chupa PUTA GUARRA!!!

Se arrastró lo justo para meterse mi polla en la boca, y si ayer me la follé yo por la boca, esta vez no hizo falta, mucho protestar la muy guarra, pero empezó a lamer y chupar con ganas, estaba excitadísima, los pezones se les notaban a pesar del sujetador, del vestido y del delantal banco.

-Sigueeee, agggggg, así me gusta, no se te ocurra parar. -Le quité de un tirón la cofia y empecé a escupirle. – ¿Te gusta GUARRA?, jajajaja.

-Marga. – -Sacándose la polla de su boca- Siiii, cabrón, me excitas, me pones a mil, soy una guarra.

Me hizo reír y necesitaba correrme, cogí su cabeza con mis manos y aceleré mis embestidas en su boca, provocándole alguna que otra arcada.

-Traga, PUTA, no desperdicies ni una gota, aggggg, me corrooooo.

Fue abundante, tanto que para no atragantarse y no mancharse se retiró con rapidez…

-Marga. -Lo siento, pero no…

No terminó, le crucé la cara con dos bofetones…

-¡¡¡Qué sea la última vez que te retiras GUARRA!!!

Fue a hablar, la cogí del pelo y con fuerza le pegué la cabeza al suelo…

-Limpia GUARRA, mi leche no se desperdicia.

Para humillarla un poco más le di una patada fuerte en su enorme culo y pasando de ella, terminé de prepararme el café y me fui para el despacho de mi tía Viky. Ya en la puerta…

-Marga. – ¿Y yo?

La entendí perfectamente…

-Hazte un dedo si quieres, me voy a trabajar, date prisa porque mi tita está a punto de llegar, jajajaja.

Estaba sentándome en la silla, cuando sentí la voz de mi tía llamando a Marga, no pude contener la risa. Durante un rato grande, que me vino muy bien para centrarme en el trabajo, no se sintió ningún ruido en el piso, hasta que sentí como se abría la puerta y asomaba la cabeza mi tía…

-Viky. -Buenos días Raúl.

Era la única que me faltaba para hacerme dueño y señor de la casa, por lo que decidí seguir siendo un borde…

-¡¡¡Qué coño quieres tita, estoy trabajando!!!

Mis palabras la desconcertaron, y durante unos segundos, en los cuales hasta vi cómo se le hinchaba la vena del cuello…

-Viky. -¡¡¡Ya vale!!! Esta es mi casa y exijo un respeto, y este es mi despacho, es mejor…

-Tranquila, no hace falta que lo digas, me voy ahora mismo, antes dormir en la calle que aquí, con dos amargadas, además que huele a rancio.

Pensé que me había salido el tiro por la culata, pero ya era tarde para recular. Salí de su despacho, observando y sobre todo oliendo que estaba recién duchada, gustándome mucho el perfume que sin duda se había echado. Se tuvo que echar al lado para dejarme pasar, y tras hacerlo me giré…

-Me gustaría despedirme de la tía Belén, ¿me puedes dar su número de teléfono? O es mucho pedirle a la señora…

Lo dije con retintín, viendo cómo se ponía roja…

-Viky. -Si ahora te lo doy, pero no tienes por qué irte, solo tienes que respetar…

Sin que me viera sonreí, otra vez había reculado. Me giré y poniendo cara de enfado, de indignación…

-¡¡¡Respetar qué!!! No, déjalo, en dos días ya hemos discutido más de lo que una persona normal puede soportar -conforme subía el tono de mi voz, ella iba agachando la cabeza- me voy, lo siento por la tía Belén, ayer pasamos un rato agradable, pero antes dormir en la calle que tenerte que aguantar ni un minuto más, ¡¡¡amargada, que eso es lo que eres una PUTA amargada!!!

Mis palabras, surgieron el efecto que quería provocar. Levantó la mirada, una mirada llena de odio y se tiró a por mí, con la mano alzada para soltarme un bofetón…

-Viky. -Eso no te lo consiento, eres…

Le sujeté la mano, riéndome en su cara…

-A dónde vas fiera, ¿me vas a pegar?

La giré con rudeza pegándole mi ya dura polla en su culo, quería que la sintiera. Vaya si la notó, intentó separarse sin conseguirlo. La mantuve pegada a mí…

-Viky. -Suéltame por favor, perdona…

La solté con un empujón que la hizo tropezar con el marco de la puerta y casi caerse.

-Si en vez de mi tía fueses mi tío, te hubiese dado una buena mano de hostias, ¡¡¡amargada!!!

Lo mejor de la provocación es la reacción y más si es la que esperaba… Me fijé por primera vez en su ropa, falda un poco por debajo de la rodilla azul oscura, una blusa del mismo color a la que con el forcejeo se le habían abierto dos botones, dejando ver un sujetador beige, los pantys eran beige y descalza.

-Viky. – -Muy alterada- Eres tú muy valiente, hijo de puta…

Y se volvió a tirar a por mí. Esta vez no pensaba ser tan delicado y conforme me encaró con una de mis manos frené la suya y con la otra la cogí del pelo, volviéndola a girar…

-Tú lo has querido.

La arrastré dentro del despacho, dándome cuenta de que Marga estaba escondida en el pasillo, le sonreí y guiñé, quitándose enseguida de mi vista al verse sorprendida.

-Viky. -Suéltame cabrón, ya sabía yo que nos ibas a dar problemas, se lo dije a mi hermana.

Todo esto a voces y alterada, aunque no consiguió ablandarme o que la soltara, hasta que me senté en una de las sillas y bruscamente usando su pelo como correa, la puse sobre mis rodillas.

-¡¡¡Te voy a enseñar educación y respeto, amargada hija de puta!!!

-Viky. -¡¡¡Marga, Marga!!! En un último intento de pedir ayuda- Marga, ven…

Apareció al sentir como la llamaba, y casi se cae de espaldas al ver a su jefa en mis rodillas…

-Como te acerques cobras tú también.

Sonriendo ya que Viky no me podía ver le guiñé. Tampoco creo que hubiese hecho nada, se quedó totalmente paralizada. Mientras con una mano puesta en su espalda para  inmovilizarla, con la otra tiré de su falda hacia arriba, debido a la estrechez de esta, al culo prominente de mi tía y a la postura, me era imposible subírsela del todo y no estaba dispuesto a parar, cambie y no sin trabajo mi mano por el codo en su espalda y echando mi cuerpo sobre el suyo con cuidado de que no se cayera, y cogiendo por la abertura de la falda, con todas mis fuerzas, tiré a ambos lados, rasgándole la falda casi al completo, dejándome ver su culo envuelto en unas bragas de encaje beige y los pantis. Durante todas las maniobras ella no dejaba de jurar y de decirle a Marga que llamara a la policía. Hubo algo que llamó mucho mi atención, y es que en ningún momento peleó o pataleó…Al ver que Marga no hacía nada, paró de vociferar y volviéndose…

-Viky. -Termina de una vez hijo de puta.

Para mi extrañeza, apoyó sus manos en el suelo y haciendo fuerza subió el culo, ayudándome a algo que no tenía pensado hacer, pero que no rechacé, tiré de sus pantys, arrastrando a la vez sus bragas. ¡¡¡Sorpresa!!! Al volver a apoyarse en mis rodillas, note que estaba chorreando…

-Jajajaja, mira la amargada, jajajaja.

Giró su mirada hacía mí, fue a decir algo, pero no lo hizo, solo volvió a su postura original, sí que me fije en que no había lágrimas, solo odio en su cara. No me amínale, con fuerza empecé a azotar un hermoso y duro culo, para nada comparable al de su hermana y Marga, este culo estaba limpio de pelos. Le di más de 20 azotes y en ningún momento hubo palabras, si jugos, su coño no paraba de poner mis rodillas perdidas. Conforme terminé me levanté de golpe, lo que la hizo caer al suelo…

-Ahora si quieres me denuncias tita, me voy.

Las dejé a las dos en el despacho y me fui a mi cuarto a preparar mi maleta, aunque sabía perfectamente que la muy guarra sino se había corrido poco le había faltado. No había salido como yo esperaba, o eso creía…

-Viky. -Espera por favor…

Entró en mi cuarto desnuda de cintura para abajo, dándome cuenta de que en su coño solo había un pequeño hilo de pelo y que brillaba en exceso.

-¡¡¡Qué coño quieres ahora!!!

Entró en mi cuarto cerrando tras ella y para mi extrañeza, se puso de rodillas frente a mí…

-Viky. -Perdóname, llevas razón, soy una amargada, y lo que es peor amargo a quién se me acerca, por favor no te vayas, solo dame tiempo…

Tiempo era lo que no quería darle…

-Si quieres tiempo, te lo doy, pero antes chupa…

Vio cómo me saqué mi polla que por otro lado ya estaba casi fuera del pantalón, poniendo una cara de terror, como si fuese su primera polla. Fue a decir algo, que se calló y para su sorpresa como más tarde me confeso, acercó su boca a mi polla y abriendo la boca empezó a chupar.

-Uffff, que mal, hasta tu hermana lo hace mejor.

Su cuerpo se estremeció y hasta se paralizó al sentirme mencionar a su hermana, pero ya no estaba dispuesto a dejarla escapar y cogiéndola de la cabeza con las dos manos, al igual que a Marga y a su hermana, me la follé con ganas, arrancándole alguna arcada, aunque aquí sí que tuve que parar, porque se me iba a ahogar, mientras esperaba que se recuperara, me agaché lo justo para abrirle la blusa de un tirón, arrancándole todos los botones y sacarle sus nada caídos pechos, que me llevó a pensar y acerté a que se los había operado. Noté que su respiración se había normalizado y cambié de opinión, la cogí del pelo y de forma brusca la tiré en la cama de espaldas, y no queriéndole dar tiempo a ningún tipo de reacción, tiré de ella hacía mí y colocando sus piernas en mis hombros, se le metí de golpe, sin trabajo alguno, su coño era un mar de jugos…

-Viky. -Agggggg, ufffff cuanto tiempo, uffff, no pares cabrón, sigueeee, más fuerte siiiii.

Sus palabras me excitaban más si eso era posible.

– ¿Te gusta GUARRA?, ufffffff, tú de santa tienes poco, eres toda una GUARRA.

-Viky. -Soy lo que quieras, ufffff pero no pares, siiiii, más fuerte, más, más, más… me corrooooooo, siiiiiiii.

En la vida había visto a nadie convulsionar de tal forma al correrse, y fue tal el placer que le dio a mi polla…

-Agggggg, me corrooooooo, siiiii, titaaaaa, ufffffff.

Nos quedamos ambos mirándonos a los ojos, hasta que nuestra respiración se tranquilizó, y mi polla volvió a su estado natural. Me separé de ella, dejando sus piernas caer, momento que aprovechó ella para con vergüenza y lágrimas, esta vez sí había lágrimas, girarse y taparse la cara.

-Viky. -Por favor, sal de la habitación, déjame sola, esto no tenía que haber pasado. -paró de hablar un momento, dándose cuenta de que no estábamos solos en el piso- ¿Qué hemos hecho?, tengo que hablar con Marga…

-Para de una vez, lo que ha pasado es que eres tan GUARRA como tú hermana, y por Marga no te preocupes -vi terror otra vez al sentir el nombre de su hermana- ¡¡¡Marga!!!…

CONTINUARA…

Soy Amo, me encanta la dominación, me gusta tener, someter y humillar a parejas y a quien se quiera iniciar, necesitar un tutor o conocer este estilo de vida.

Mi Skype es ra_ul1967, mi correo ra_ul1967@hotmail.com y mi Telegram @Amo_Leo, hablo y respondo a todo el mundo, siempre que lo haga con respeto.

Nota del autor: Soy como escribo, soy exigente, dominante y no suelo dar segundas oportunidades, cuando ordeno algo es para ser obedecido, algo que suelo advertir a quien desea ser adiestrada o entregarse a mí. No trato con hombres solos, aunque no me importa hablar con ellos. Ni miento, ni juego, ni sigo ni persigo a nadie por muy buena que este o por muy sumisa o perra que sea.

No entiendo a quien estando advertida o advertidos en caso de parejas sumisas, se enfadan conmigo y hasta me tratan de mentiroso o manipulador cuando cortó con ellos cuando no cumplen.

Seguro que en la red hay quien los o las acepte, yo no.