Capítulo 2
- La puta de Sylvia cumplió objetivos I
- La puta de Sylvia cumplió objetivos II
- La puta de Sylvia cumplió objetivos III – Final
La puta de Sylvia cumplió objetivos (II)
Al día siguiente de ser follada por D. Andrés, mi jefa se tuvo que morder la lengua ya que había cumplido objetivos solo con esa entrada de dinero y además llegue a casa tan cansada del polvo que no moleste a mi marido pidiéndole que me follara y haciendo que el me diera cualquier excusa para no follarme.
Sin embargo, recordando la follada y notando mi chocho dolorido, le hice una mamada por la noche mientras el dormía y no se entero.
Pude comparar los diferentes sabores del esperma masculino.
El de mi marido Paco, era mas liquido y de un blanco traslucido, el de D. Andrés era una leche caliente, pastosa y de un blanco muy marcado.
Ambas estaban ricas y saladas.
Lo bueno fue que al no despertarse, Paco no se dio cuenta de lo puta que estaba siendo.
Me llamo D. Andrés a la oficina y me dijo que si seguía interesada en conseguir mas clientes y le dije que si.
Me dijo: Bien, cacho zorra, entonces esta noche vamos a ir a tu despacho otro amigo y yo.
No quiero que lleves bragas ni sujetador, quiero que te vea como la zorrona que eres ya que le he dicho que nunca habrá visto otra tía mas puta que Sylvia.
Estuve esperando a que mi jefa se marchara, pero la muy zorra no lo hizo.
Llegaron los dos clientes ( el amigo de D. Andrés se llamaba D. Jose y tenia unos 60 años, gordo, feo, sudoroso y lleno de pelos por todas partes menos en su cabeza ) les metí en el despacho.
Mi jefa estaba con sus melones en una blusa blanca trasparente y cuando la vio D. Jose pensó que era yo y casi le mete mano a las tetorras.
Les dije que por favor, esperasen a que mi jefa se fuera pero no quisieron ya que tenían prisa, así que con la puerta cerrada pero esperando que a mi jefa no se le ocurriera venir a despedirse al marchar, deje que me sobaran y desnudaran. D. Jose estaba muy cachondo y le dijo nada mas verme: ¡es verdad, esta tía tiene la cara mas puta que he visto nunca! Y D. Andrés le dijo mirándome, claro, ya te dije que era Sylvia la putona.
Lo cierto es que eso me lo dicen muchos tíos, que con mi carita de niña bien, ancha, mimosona, de labios finos y ojos oscuros y de putita tengo la cara muy, muy de puta, o al menos que solo con mirarme ko que piensan es que tengo que ser una putona ya que mi cara les pone tan excitados.
Volviendo al asunto, D. Jose se saco la polla y se quito los pantalones, no llevaba calzoncillos y tenia el culo y los huevos llenos de pelo negro, olía a pises y a mierda, tenia una pinta asquerosa, pero los objetivos eran los objetivos y desnuda me arrodille delante de e y me puse a comerle la pollona mientras D. Andrés me pajeaba el coño y el culo con sus dedazos.
La polla de D. Jose era enorme, muy gorda y gruesa, larga y llena de venas, oscura, pesada y eso que solo estaba morcillona pero con la mamada se le iba poniendo cada vez mas gorda y dura.
Sabia a meados, pero D. Jose me agarraba del pelo y me follaba la boca, yo se la chupe con ganas dándole mucha lengua, ensalivándola, frotándole la polla y los huevos, lo que casi me produjo arcadas de tan profundo como había entrado, D. Jose me decia guarradas y mientras ls dedos de D. Andrés me estaban poniendo a caldo de tanta paja.
D. Jose le dijo al otro: Ojala tuviera los melones de su jefa, que también vaya pinta de puta, pero ese culo prieto va a ser una gozada el sodomizarla…, por de pronto, la puta hace unas mamadas de autentica profesional me estoy derritiendo dentro de su boca de guarra.
Y dicho esto saco la polla y me dijo:¿eres una puta eh Sylvia?, le sonreía y le dije que si. Me dio la vuelta y le pregunto a D. Andrés: ¿está preparada? D. Andrés le dijo que si, no sabia d que estaban hablando pero D. Jose me hizo arrodillarme con el culo en alto y me escupió en el ojete mientras empezó a meterme un dedo, inicio un mete saca y luego metió dos, pajeo un rato y metió tres dedos después de ensalivarme mi ojete un poco mas.
D. Andrés se había sacado la polla y miraba como me pajean el culo y se masturbaba, pero luego me la metió en la boca para que se la chupara como una buena puta.
Al cabo de un rato, D. Jose me saco los tres dedos del culo, aunque había intentado meterme cuatro y apunto con su pollota gorda y dura a la entrada de mi ano.
Proteste, les dije que nunca me habían dado por el culo, que ese no era el sitio adecuado para el sexo, que podía entrar mi jefa y todo eso, pero no sirvió de nada, me la fue clavando poco a poco.
El estaba disfrutando de lo lindo y decia: vaya culo mas puto tienes Sylvia, eres la guarra con mejor culo que conozco y a las putas como tu os encanta que os sodomicen a base de bien.
Yo insistía en que nunca había tomado por hay y que no me sentía cómoda con su polla dentro, pero al cabo de un rato, tras nuevos escupitajos en el ojete (y algunos en mi cara como si fueran goterones de lefa) el mete saca fue teniendo efecto y empecé a mojarme como una guarra.
Por eso mientras se la mamaba a D. Andrés y D. Jose me daba por culo con su polla tremenda fui moviendo el culo al compas y me frotaba el clítoris y me metía un dedo en mi chochito mojado y caliente, … , estaba completamente encharcada.
D. Jose culeaba como si tuviera mucha experiencia, se agarraba a mis caderas y me embestía salvajemente, sacando y metiendo su rabo en mi culo.
De vez en cuando soltaba un escupitajo para que entrar mejor y volvía a la carga.
Tenia el ojete completamente abierto como en esas ocasiones en que estas cagando y parece que se te abre el culo o como en una película que vi en que a una chica (que también se llamaba Sylvia en la película) le metían la mano entera por el culo, eso era lo que sentía y me estaba gustando.
D. Jose me decia: Disfruta mi polla, puta y chúpale a mi amigo su rabo que te vamos a meter dinero en tu proyecto.
Yo ya estaba tan caliente que no me importaba que entrara mi jefa y me pillara mamando la polla de un viejo de 55 años y con el culo follado por un guarro de 60 años.
Al rato me sentaron en el suelo y D. Andrés se corrió sobre mi cara y se limpio con mi blusa y mi minifalda, dejando varios regueros blancos de esperma en la ropa. D. Jose se puso delante mío con su pollona gorda y llena de restos de mi culo, sucia por mi mierda, sudorosa, potente y me la metió en la boca para que se la limpiara…, me agarro la cabeza y me follo la boca sin dejarme sacármela de la boca, me soltó un chorretón de leche caliente en la boca y fue tanta que casi me atraganto, no pude tragarla toda así que salió por los bordes de mis labios mojándome la barbilla, e se la saco y me dijo: no te lo tragues todavía, putita, que vamos a jugar un poco.
Me la metió y saco de la boca suavemente varias veces, jugando en mi boca con el esperma pastoso, caliente y saladito dejando goterones en mi cara, en mi pelo, en mis ojos, luego me dijo: Ahora Sylvia, se una buena niña y trágate la lechita de papa como una buena puta.
Cerré la boca y mientras se vestían y me dejaban el cheque, trague y saboree su esperma caliente. Me vestí a toda prisa y les acompañe a la entrada.
Al volver a mi despacho para arreglarme un poco me cruce con mi jefa que me miro sorprendida: Tenia el pelo negro con un par de goterones de esperma que goteaban lentamente y se bamboleaban entre mis mechones, el rímel corrido y restos de lechada en mi boca, nariz, una de las cejas, esperma en mi blusa arrugada y en mi minifalda negra con varios lamparones… se me quedo mirando y seguro que pensó que era una zorra por la sonrisa condescendiente y de superioridad que echo, pero le puse el cheque en la mano y se le fue la sonrisa…, otra vez la había ganado.
Seria Sylvia la putona, pero volvía a cumplir objetivos.