Vídeo casero

La verdad es que a Miriam, mi novia, y a mí siempre nos a gustado grabarnos en vídeo en los momentos más íntimos, pero siempre lo habíamos hecho nosotros solos, o sea mientras follábamos o nos comíamos todo lo posible manteníamos la cámara y grabábamos como podíamos.

El resultado es que al final siempre pasábamos de la cámara y nos concentrábamos en lo que estábamos haciendo y lo que habíamos grabado no se podía ni ver.

Así, un día llegamos a la conclusión de que tendríamos que buscar a alguien que nos grabase, queríamos tener al menos un vídeo nuestro ahora que nuestros cuerpos eran jóvenes, nos hacía ilusión, pero claro nos daba mogollón de corte pedírselo a alguien, fuera amigo o no.

Una noche de estas llenas de alcohol, se lo explicamos a una pareja amiga nuestra (Eli y Pau), y no tardaron en ofrecerse sin ningún problema para grabar todo lo que quisiéramos, así que quedamos para la noche siguiente en nuestro pisito y a ver qué salía.

La pena, para mí, fue que Eli no podía venir porque tenía una cena familiar, la verdad es que me excitaba bastante que nos viera una chica en plena acción, pero de momento no iba a ser posible.

Llegó la noche, estábamos realmente excitados, y eso que habíamos estado follando casi todo el día.

Esperábamos impacientes la llegada de Pau, incluso habíamos hecho un pequeño guión, la cosa empezaba en la ducha, con Miriam masturbándose mientras me esperaba, sí, típico argumento de peli porno, pero nos hacía ilusión.

Pau llegó, le explicamos el plan y a «trabajar». Entramos en el cuarto de baño, Pau con la herramienta (la cámara) en la mano y mi novia a punto de enseñarnos su cuerpo, empezó a desnudarse con toda naturalidad y el paquete de nuestro amigo empezó a dejarse notar.

No lo he dicho pero Miriam está realmente buena, mide 1’70 más o menos, su cara es preciosa y tiene unas tetas increíbles super grandes, duras y mirando hacía arriba, son toda una gozada, me puedo pasar horas comiéndoselas.

Tiene unas caderas muy pronunciadas, un culo grande que es una pasada y un coño alucinante, normalmente lo lleva depilado, pero ahora hace tiempo que se ha dejado crecer el vello y la verdad, no sé como me gusta más.

Es una chica bastante tímida, con lo que no sabía como iba a reaccionar delante de nuestro amigo por mucha confianza que hubiera, de momento la cosa empezaba bien.

Acción, empieza a caer agua y antes de enjabonarse Miriam hace una cosa que me pone muchísimo, creo que me la dedica especialmente.

Empieza a mear, de pie, ese líquido dorado cae primero con mucha fuerza, directamente al suelo de la ducha, después con menos, cae por sus piernas.

Ahora mi paquete empieza a crecer y el de Pau creo que ya no puede crecer más.

Después del regalo empieza a enjabonarse, se acaricia por todos lados, hasta que llega al coño y empieza a masturbarse, se acaricia el clítoris, se mete un dedo, dos, empieza a gemir.

La idea es que esta escena fuera de unos segundos, sólo para calentar la cosa, pero mi novia estaba realmente caliente, no esperaba que empezara así, pero es que se había olvidado de nosotros, ahora estaba tumbada en la bañera con las piernas hacia arriba, enseñándonos su raja y como se acaricia un clítoris, el chorro de agua seguía cayendo sobre ella, se estaba haciendo un pajote increíble y cuando empezó a correrse y a gritar nuestros respectivos paquetes (el de Pau y el mío) estaban a punto de romper los pantalones.

Parecía que Pau se lo estaba pasando bien y que Miriam en esos momentos se había olvidado de su timidez.

Corten, fin de la primera escena, ahora es cuando ella me espera en el sofá del comedor a que llegue de trabajar, mojada, sólo con la toalla puesta.

Así que el hombre de la casa llega de trabajar, cansado y se sienta en el sofá al lado de su amada, un beso de bienvenida, un par de frases del tipo «¿estás cansado?, tienes que relajarte» y a la tenía desabrochándome el pantalón y agarrando mi polla, que desde la anterior escena ya estaba en su punto máximo.

Empezó a mover la mano, arriba y abajo, Pau no perdía detalle, me desnudó por completo y comenzó con una mamada de las suyas, son alucinantes, no para de escupir y de echar saliva y a meterla toda entera dentro su boca, le encanta chupar pollas, no tiene problemas en reconocerlo, se vuelve loca.

Además, esta vez, mientras hacía todo esto no dejaba de mirar a la cámara, algo muy peliculero que debía estar poniendo a Pau como una moto.

Pues bueno, la mamada fue de escándalo, y como siempre cuando ya estaba a punto de correrme, parón en seco, me encanta.

Ahora me tocaba a mí, ya se había desprendido de su toalla, estaba totalmente desnuda, empecé a sobarla a besarla a morderle por todos lados, cuello, tetas, pezones, piernas, pies y como no, llegué a su chochito, empecé a lamer su clítoris a chuparlo mientras metía un dedo en su coño, dos dedos, la lengua… ella ya había empezado a gritar, es un escándalo cuando se excita, le di la vuelta y empecé a comerle el culo, a escupir, meter un dedo, dos, la lengua, una pasada, volví a la rajita y seguí chupando, cuando estaba apunto de correrse paré, en seco.

Le encanta. Mientras tanto, Pau seguía grabando, yo me había olvidado de él, pero allí estaba.

Llegaba la hora de follar, saqué un condón, me lo puse y Miriam subió encima, mirando hacia mí y empezó a moverse poco a poco, le agarré del culo y empecé a llevar yo el ritmo del asunto, Pau estaba detrás de su culo, obteniendo un primer plano de la penetración, creo que se le olvidó que podía utilizar el zoom.

Seguíamos dale que te pego, le metí un dedo en el culo, ella no paraba de gritar. Le encanta ese dedo en su culo, aunque todavía no me ha dejado metérsela por ahí, por ahora sólo el dedo, y la lengua.

Tocaba cambiar de posición, se dio la vuelta, seguía encima, pero ahora su coño miraba hacía la cámara, yo estaba detrás, debajo y la follaba sin parar.

Pau seguía sin acordarse del zoom y estaba a escasos milímetros de aquella penetración, demasiado cerca, tanto que no pudo aguantar más y empezó a sobarle las tetas a mi novia, a meterle la mano en la boca, y a acariciarle el clítoris, la reacción de Miriam no se hizo esperar le quitó la cámara, le agarró de los pantalones, se los bajó, le agarró de los calzoncillos, se los bajó también y allí estaba, por fin, la polla de Pau, tremenda, no es que fuera muy grande pero sí muy gorda, con muchas venas, como si estuviera a punto de estallar.

Miriam no tardó mucho en metérsela en la boca, y allí estaba yo, follándome a mi novia mientras esta le comía la polla a uno de nuestros mejores amigos, sinceramente no me lo esperaba, pero pensándolo ahora era inevitable que ocurriese, de todas formas me excitó bastante ver a mi novia chupando otra polla, así que seguí follando cada vez más fuerte y más rápido.

Miriam con una polla en su boca y otra en su coño, no paraba de gemir, estaba a punto de correrse, ya salían los flujos por todos los lados, tenía los huevos llenos de ellos y por fin, se corrió, yo no aguantaba más y saqué la polla para correrme en su cara, lo solemos hacer así, a ella le encanta y a mí, que les voy a contar, junto con las tetas y el agujero del culo es mi sitio favorito para correrme.

Pero Pau seguía disfrutando, y claro ya que estaba, no podía irse sin follarse un ratito a mi novia, ella lo recibió encantada y yo agarré la cámara para grabar ese momento mientras Pau agarraba un condón, nunca habíamos hecho nada parecido, y habría que recordarlo, la verdad es que me excité muchísimo cuando se la metió, ella estaba a cuatro patas y él empezó a follarla a lo bestia, yo intentaba sacar primeros planos, me puse debajo de ellos, justo en el coño de Miriam, ¡qué olor! Veía la polla de mi amigo entrar y salir, era una pasada.

Ahora notaba como Miriam me estaba quitando el condón, y empezaba de nuevo a mamar, sentía su saliva cayendo en mi polla, y su lengua, y su paladar, ¡qué boca! Miriam se estaba corriendo otra vez, su flujo le chorreaba por las piernas ni yo ni Pau aguantábamos más, mientras se corría, Miriam nos pidió que nos corriéramos en su cara los dos a la vez, cuando acabó de correrse (tiene unos orgasmos larguísimos) Pau sacó la polla se quitó el condón y nos dirigimos a la cara de mi novia, agarró las dos pollas, muy fuerte, y comenzó a chuparlas, a escupir en ellas, se las metía en la boca, nos chupaba los huevos, estaba totalmente fuera de sí, incluso se acabó metiendo las dos pollas a la vez en la boca, y no la tiene grande ni mucho menos, pero allí estaba con la boca llena de pollas, no aguantaba más, ella lo notó, las sacó y empezó a hacernos una paja muy a lo bestia, no pude más y me corrí, al segundo se corrió Pau, ella seguía dándole a las manos, apuntando hacia su cara, con la boca abierta, se la llenamos de leche hasta que no pudo tragar más, acabó toda llena de semen, ojos, nariz, boca (por supuesto), cuello, tetas… ella seguía fuera de sí, siguió chupándonos las pollas mucho después de habernos corrido todos.

Minutos después ya estábamos más relajados, Miriam seguía llena de semen por todos lados, Pau y yo con la polla en la mano, ya un poco más pequeña, pero seguíamos flipando con la mamada que nos había hecho mi novia.

Poco después nos reincorporamos e intentamos ver lo que se había grabado, bueno, de la parte del final nada de nada, yo no sé a que botón le di que no grabé nada, y del principio pues tampoco había mucho, Pau había estado fijándose en otras cosas y la grabación no era muy aprovechable, pero bueno, todavía la tenemos y de vez en cuando la vemos, y nos reímos y excitamos mucho, pero todavía no tenemos esa minipeli nuestra.

Pau dice que se lo pasó de muerte (no me extraña) pero que de momento no quiere repetirlo, aunque no lo haya parecido es un tío muy fiel a su novia.

De todas formas ninguno de los tres nos arrepentimos de haberlo hecho, y esperamos que alguna vez se vuelva a repetir, aunque personalmente espero que el próximo cámara sea una chica… y nos grabé mejor.